HEY, NERD! I NEED A BOYFRIEND | SUNWON

I: Necesito

Sunoo había citado a sus tres mejores amigos en su humilde -de humilde nada tenía- hogar, dejándolos que se pasearan con libertad a través de su enorme habitación. Sus ojitos se fijaron en las acciones curiosas de su amiga castaña, quien parecía inspeccionar el lugar en busca de algo que le resultara interesante.

─ Yo los traje aquí para que me ayudaran con algo, no para que estuvieran en silencio y viendo qué sacarse de mi habitación...

Sunghoon volteó hacia él con una mueca ofendida, reclamándole con ese simple acto. Sus manos se fijaron en sus caderas y su cabeza se inclinó, mostrando fuerza en cada movimiento. ─ Disculpa, pero yo estoy haciendo eso porque no estás diciendo nada. Además Felix ni siquiera ha llegado, y si todos vinimos con gusto acá fue para ayudarte

─ Te recuerdo que te sobornó con no comprarte comida en el restaurante de los Jang nunca más, pendejo paliducho.

─ Tú fuiste la primera en aceptar ese soborno, yo la dudé más porque no quería salir de casa, pelirroja desteñida.

Haerin le sacó la lengua a su pálido amigo y éste sólo rodó los ojos y se alejó un paso de ella, acercándose más a Sunoo y dejándole ver su mandíbula tensa. Iba a hablar, pero todo se vio interrumpido con grito grave proveniente de fuera de la habitación.

─ ¡Gracias por dejarme pasar, joven Bang! El uniforme nuevo le queda excelente.

Sunoo y Sunghoon soltaron una pequeña risa al escuchar a Felix entrar con paso apresurado, mientras sonreía apenado ante su repentina intromisión. El rubio saludó a los tres chicos con un movimiento de manos animado, acercándose a la cama fe Sunoo (donde se encontraba el mencionado) y tirándose en el piso junto a ella.

─ Perdonen la tardanza, me quedé lugando LOL y se me pasó la hora... Vine corriendo en cuanto acabó mi partida, estoy sudando como puerco. ¿Qué necesitabas contarnos, Sunoo?

─ No te preocupes, Lix. Y gracias por tu interés, se nota quién es el real aquí.

Sunghoon lo arremedó de forma infantil y se tumbó al suelo junto a Felix, mientras que Haerin rodó los ojos y se acomodó el vestido quedando de pie. Sunoo suspiró y se echó en su cama viendo el techo, dejando que sus ojos se cerraran mientras sus dedos jugueteaban nerviosos en su estómago.

─ Mi papá me consiguió una portada para ELLE en su próxima edición, dice que se lo rogaron porque hará que tenga muchísimas ventas, así que aceptó.

Felix aplaudió realmente feliz por su amigo, sentándose para poder verlo a medias y dejando una palmada escandalosa en su muslo izquierdo, sacándole un quejido al pelinegro. ─ Eso es buenísimo, ¡vas a tener mucho reconocimiento a nivel internacional! tu carrera va a ir en ascenso así.

El pálido más alto se levantó con lentitud y rodeó a su amigo para poder tirarse en la cama del chico más joven, aplastando sus piernas y acomodándose sobre ellas. Él dejó un pequeño golpe en su estómago a modo de felicitación, cerrando también sus ojos con la misión de tomar una pequeña siesta.

─ Pero, a ver, sí es súper buenísimo y todo, estoy fe acuerdo. Pero tu tono de voz sonó a que hay una condición enmedio de todo y que es por eso que me hiciste salir de casa en plena tarde con un sol ardiente. ─ Reclamó Haerin, dando un pisotón que se oyó amortiguado por la gruesa alfombra de peluche que Sunoo tenía en su habitación.

El pelinegro frunció los labios y asintió, algo que habría pasado como no importante de no haberse oído la fricción de su cabeza con su colcha.

─ Bien, sí, hay una condición. Ni mamá ni yo la sabemos porque papá no quiere contarnos, pero debe ser algo malo porque quiere negociar con los señores que pidieron que estuviera yo en la portada, ¿qué creen que sea?