AMOR EN UNA MIRADA

I - T13 C1 - TIERRA ARRASADA - EL PRIMER ENCUENTRO

Las llamadas volaban con este caso, pues se trataba de un poderoso diplomático italiano, claro que estábamos en la mira de todos por estarlo cazando.
Y nos faltaba un detective desde que Elliot esta en problemas con asuntos internos, pero no me importa trabajar el doble, yo lo quiero de vuelta.

A pesar de el gran caso en el que estamos, mi cabeza solo piensa en él, lo quiero ayudar, pero él ni siquiera responde a mis llamadas y me siento impotente ante la situación.

- Benson! Ve con Fin a llevar a la víctima al hotel donde se hospedará!
Antes de irme, me acerqué al Capitán con curiosidad.
- Sabe algo de Elliot?
Él estaba algo atareado por tanto trabajo, pero se detuvo y suspiró con expresión de cansancio.
- No... Pero sé que nos mandarán a dos detectives, una llegará en una rato.
- Qué!? Pero él aún es parte de este equipo!
- Escucha Olivia, yo no soy quien decide estas cosas, ahora, ve con Fin a donde les pedí!
Me sentía molesta por esto, él sigue siendo mi compañero y no es justo que ya traigan un par de juniors a reemplazarlo tan rápido.

Me fui con Fin e hicimos lo que el Capitán nos pidió, luego volvimos a la Unidad.
Investigamos sobre el diplomático que debíamos encarcelar cuando el Capitán volvió y llegó con una mujer joven, rubia y de ojos azules.
Estaba bien vestida y tenia una placa y un arma, así que supuse que era la nueva detective.
Ella se acercó feliz a mi, igual que un perrito emocionado.

- Hola! Es un placer poder trabajar aquí y conocerte, yo vi muchos de tus casos, eres impresionante.
Debo admitir que me sentí halagada por ella.
- Muchas gracias.
La verdad es que fui algo cortante con ella, no quiero que se sienta bienvenida, Elliot volverá y ella deberá volver de donde vino.

Le entregué información importante para el caso al Capitán y antes de salir de su oficina, él me llamó.
- Cómo te comportaste con la detective Rollins?
- Qué? La rubia?
- Si, su nombre es Amanda Rollins y a partir de hoy será tu compañera, así que trátala con respeto por favor.
- Elliot volverá.
- Eso no lo sabes, y aunque así fuera, Rollins no tiene porque soportar tus groserías solo porque Stabler no contesta a tus llamadas.
Eso me dolió y mucho.

No dije nada, solo salí de la oficina y me senté tras mi escritorio.
Un rato después Amanda se acercó a mi con un sobre.
- Encontré esto a cerca del hombre que perseguimos, crees que sea de utilidad?
Me lo entregó y lo abrí y miré los documentos que tenia dentro.
Mientras los miraba, por mi mente pasaba lo que dijo el Capitán.
Él tenía razón... Ella no merece que la trate mal solo porque estoy molesta por lo de Elliot.
La miré y sonreí.
Sus notables ojos azules brillaron cuando vio mi sonrisa.
- Esta muy bien, deberías mostrárselo al Capitán y a Cabot.
- Si, por supuesto!
Los tomó de vuelta y corrió a la oficina del Capitán, era bastante tierna honestamente.

Salieron los dos de la oficina y Rollins corrió por su saco.
- El Capitán dice que vayamos por una orden de arresto con Cabot!
Me levanté y estaba por seguirla a los autos, pero el Capitán me detuvo.
- Gracias por hacerme caso y tratarla bien.
Asentí con una ligera sonrisa y seguí mi camino.

El viaje en auto era algo incómodo, ambas estábamos en silencio, una que otra vez notaba como ella me miraba, pero yo no le correspondía la mirada, pero decidí romper el hielo.
- Así que... Estudiaste algunos de mis casos?
Ella se vio bastante sorprendida cuando le dirigí la palabra.
- Si! Soy una admiradora de como trabajas, eres increíble y tienes una forma de empatizar que no muchos tienen, eres asombrosa, me siento afortunada de conocerte en persona.
Debo admitir que mis mejillas se tornaron rojas con el comentario que hizo, me hace sentir bien que alguien me diga eso.
- Pues ahora trabajaremos juntas.
La miré y sonreí.
Seguimos nuestro camino y al llegar con Cabot hablamos unos quince minutos y accedió sobre la orden de arresto, así que al instante salimos de ahí a arrestarlo.

Llegamos a su enorme mansión donde se resguardaba, él iba saliendo, se estaba subiendo a un auto y llegamos a tiempo para llevarlo a la estación.

Mientras Fin y Munch lo interrogaban, yo decidí ir por un trago y seguir con mis intentos de llamar a Elliot. Estuve un buen rato sentada, esperando a que contestara por lo menos un mensaje, cuando de pronto se sentó conmigo Amanda.
- Puedo acompañarte?
- Claro..
Me entregó una copa de vino y me lo bebí de un trago.

- Estás llamando a Stabler?
No sabía quién le había hablado de él, pero no tenía caso molestarme ahora.
- Si...
El silencio que hubo fue algo incómodo, yo no sabía que más decir y parecía que ella tampoco.
- Crees que él se vaya...?
Luego de esa pregunta, me quedé en blanco unos segundos, repasé todos estos años con él, no creo que Elliot se fuera de la nada sin pelear, hemos sido compañeros y amigos por mucho tiempo.
- No lo sé.. Pero, por lo menos se despediria de mi y no lo ha hecho, así que no creo que se vaya.

Ella asintió con la cabeza, yo lo último que necesitaba ahora era lastima por parte de ella, pero sus ojos parecían reflejar apoyo, lo cuál me hizo sentir de una manera muy... Peculiar.
- Pues perdón, pero sería algo muy tonto de su parte alejar de su vida a una persona tan buena como tu.
Ella tenía un extraño talento para hacerme sonreír, nunca creí que ella me hiciera sentir así, al parecer no es tan mala como creí...

No volvimos a compartir palabras, solo nos fuimos y conduje a la estación.
Las cosas ya estaban más tranquilas, él ya había sido procesado hasta su juicio.

- Olivia, puedo hablar contigo?
Caminé a la oficina del Capitán con la intención de terminar rápido con la platica para irme a casa.
Se quedó mirándome, me preocupe por eso, ya que sabía que sería una mala noticia.
- Elliot presentó sus documentos...
Se sintió como si mi mundo cayera en pedazos.
- Necesitas hablar?
Ni siquiera le contesté, solo salí corriendo de la oficina, porque sabía que estaba por desmoronarme.

Lo primero que se me ocurrió fue ir a una sala de interrogación, ya que todas estaban vacías.
En cuanto la puerta se cerró, yo caí en lágrimas.
Nunca imaginé que él se iría, yo creí que estaríamos toda la vida juntos aunque solo fuéramos amigos... Pero nunca me preparé para esto y mucho menos para que se fuera sin despedirse.
¿Cómo por qué se fue así?
¿Acaso nuestra conexión solo la imaginé yo?
¿Yo no le importaba lo suficiente?
Mientras más pensaba, más lloraba

Cuando escuché la puerta abrirse detrás de mi, entré en pánico, no quería que nadie me viera tan vulnerable.
- Necesitas algo... Liv?
Era la voz de aquella nueva detective en la estación.
- Estoy bien...
Mi voz me delataba por completo, pero aún así ella no se acercó a abrazarme o algo por el estilo.
En su lugar, escuché que dejó algo en la mesa y se retiró de la sala.

La intriga me ganó y al voltear, vi en la mesa una bolsa de papel, dentro había un café de mi cafetería favorita, la cual le mencioné una sola vez cuando veníamos a la estación. Nunca imaginé que fuera a comprarme uno y que por eso no estaba en la estación cuando el Capitán me dio la noticia.
Venía junto con una pequeña nota que decía "Para cada lágrima, hay un café esperándote y una amiga que irá a comprarlo por ti ♡"

Una pequeña sonrisa se generó en mis labios y me bebí el café mientras me tranquilizaba.
Al salir de la sala para recoger mis cosas, vi a Amanda trabajando, ella solo me sonrió e hizo una seña que me indicaba que no le diría a nadie que me vio en ese estado tan vulnerable, así que le devolví la sonrisa y caminé al ascensor.

El sentimiento de tristeza aún se percibía en mi pecho, pero había una pequeña pisca de felicidad y yo sabía perfectamente quién la causó.