💖💖𝐻𝑢𝑦𝑒𝑛𝑑𝑜 𝐷𝑒𝑙 𝐷𝑒𝑠𝑡𝑖𝑛𝑜💖💖 [LIBRO 1]

Capítulo 3

Murmullos, suspiros, temblores ligeros, cualquier movimiento era visto por la chica que yacía sentada en su silla.

Podía decirse que exageraba viéndolo dormir, aunque su preocupación era justificada por su comportamiento en los últimos días, estaba pendiente de otros de sus ataques.

No era tonta, captó un patrón en el cual involucraba ciertos reflejos por el cual eran destruidos, amaba a su rubio gruñón pero si tocaba su espejo de cuarto, ahí si lo mataba.

En esta vida, tienes salud, conocimiento de lo que te rodea, aprendizaje de los errores que cometes por curiosidad y amor, había otras cosas pero ella no le interesa o solo los ignoraba.

Además de que ese espejo era el único que era lo suficiente grande para verse el cuerpo completo, examinarse y preguntarse por sus orígenes.

Hunter le dijo que no sabía nada, ella aprendió como reconocer cuando miente con el pasar de los meses, perdió la cuenta del tiempo que yacen juntos, más no importaba.

Nuevo dolor de cabeza, aunque consiguió la mayoría de los ingredientes de la lista y la poción estaba casi lista para crear un campo de fuerza capaz de incluso ocultar al mismo Titán, lo cual podría sonar irónico.

Ayudaba sin preguntar, ponía su vida en peligro sin importar el motivo de su novio, su excusa era la cazeria de los taliamigos.

Cualquier persona en sus zapatos preguntaría, razones había de sobras, pero ella era luz, novia de hunter, protectora del bosque y los taliamigos.

Deseaba tener un título más largo, podía agregar que no tiene recuerdos de su familia, una chica que no conocía su pasado, tal vez si exigiera respuestas a la única persona que la ha salvado del peligro incontables veces.

Y de nuevo volvemos al tema de su persona, nada, no tenía apellido y solo tenía un nombre que su novio encontró en su ropa interior una vez que decidieron lavar porque estaba cubierta de polvo hasta los pies.

-Confio en ti, hunter... ¿Cuanto piensas en seguir durmiendo en esa cama? - se sube al colchón donde busca verle la cara - Voy a dibujar en tu rostro si no te levantas de inmediato

Era como hablarle a una pared, se acomoda a su lado, sospecha que las orugas del sueño tuvieron que ver al respecto.

*Tal vez fueron demasiadas en el beso*, acaricia su cabello

Amaba a su rubio bipolar, su rostro rojo cuando se mostraba molesto, feliz y lo que le fascina era cuando estaba sonrojado.

Cuando estaban solos, hunter jugaba hasta donde ella le permitiera, la respetaba, le daba su espacio, a pesar de tener cicatrices en su piel, sus besos le dejaban con ganas de más.

Un pequeño problema era su comportamiento al sobreprotegerla, la primera vez que una bestia intento dañarla cuando recogia frutos en el bosque.

Nunca lo había visto tan salvaje, al solo recordar eso le hizo morder su labio al punto de ponerse encima de él.