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Era un día normal en la escuela Kamiyama High School. El clima despejado junto a la sensación de un calor agradable y abrazador era lo que caracterizaba estas épocas de primavera.
Era inicio de ciclo escolar, y por lo general en el país de Japón el año escolar suele comenzar en el cuarto mes del año, en épocas de primavera.

No era un día especial en particular, era un jueves cualquiera en el mes de abril. La brisa del aire era agradable y el cielo despejado daba una luz clara de mañana.
Era hora de descanso. Nene Kusanagi, estudiante de primer año, se encontraba almorzando con dos de sus amigos en la azotea de la escuela.

Nene, una chica no muy alta, un largo cabello de un tono verde pálido, acompañado de unos ojos grandes y almendrados de un color morado tenue con un pequeño lunar de color azul pálido en su iris.
Era el tipo de persona a la que le tienes que hablar primero para entablar una conversación con ella, si no, solo se quedaría absorta observando a su alrededor. También era muy tímida, por lo que no era muy extrovertida.

— ¡Y ahí es donde aparezco yo! ¡¡Tenma Tsukasa!! — Exclamó gritando un chico alto, de un cabello rubio corto con un degradado naranja en las puntas del mismo.
— Y aquí vamos otra vez... Raro... — Pensó Nene.
— Tsukasa, tal vez podrías cambiar algunas cosas de este guión, sigue estando imperfecto. — Dijo un chico alto, de cabellos morados con dos lunares en su cabellera de un tono azul mientras veía las páginas aún incompletas del dichoso guión.
- ¿iMoh, qué dices Rui!? iMi guión es perfecto, solo está incompleto! - Dijo el chico rubio gritando y haciendo un alboroto señalando al chico de cabellos morados.

Esto era algo normal para los descansos de Kusanagi, ver a sus dos amigos discutir acerca de los shows que se aproximarían para la banda no es nada fuera de lo común.

Ambos chicos discutían acerca de como podían mejorar la obra que Tsukasa escribió el día anterior. Nene solo podía mirar con extrañeza a Tsukasa, pero en un momento dado volteó a ver al otro chico, y ahí se dió cuenta.
Sus profundos ojos amarillos con ese tono de diente de león tan característico de él, su cabello largo con esa forma tan particular de corte, el como movía las manos explicándole a Tsukasa lo que estaba mal con su obra, su forma de hablar y razonar. En fin, lo que era su forma de ser en sí, de una u otra forma le daba seguridad a Nene.

Nene se quedó absorta viendo a Rui con una minúscula sonrisa en su cara. Su corazón latía con fuerza cada que lo veía.
Rui notó el que Nene se le quedaba viendo fijamente, entonces le preguntó — Nene ¿pasa algo? — Con esa voz tan melódica pero a la vez pícara y extravagante que caracterizaba tanto a Rui.
Nene solo volteó a ver sus piernas mientras hacía una expresión de sorpresa y su cara se sonrojaba levemente.
Tsukasa no le dió importancia a esto y siguió alabando su guión. Rui si lo notó, más decidió no darle muchas vueltas, aunque en un momento dado miró a Nene por un segundo. Nene estaba notoriamente nerviosa — ¿Será acaso qué..? No, no lo creo. Tsukasa la ha de ver espantado. —

Nene se puso nerviosa y fue al baño sin decir ni una sola palabra dejando a ambos chicos solos mientras discutían. Entró en un cubículo y se sentó arriba de la tapa. En su mente, comenzó a darle vueltas a la situación.
— ¿Por qué me puse tan nerviosa? solo estaba viendo a Rui... no debió ser para tanto. Pero... Mi corazón latía con fuerza. ¿Será que...? No, eso no va a ocurrir. — Pensaba Nene mientras estaba sentada arriba de la tapa en posición fetal.

En un momento, sonó la campana del timbre y todos tenían que entrar a sus salones. Nene salió rápido del baño para ir apresuradamente a su salón.

Rui llegó a ver a Nene bajar las escaleras, ella estaba notoriamente nerviosa. Rui lo notó y se le hizo extraño, más no quiso darle tantas vueltas y lo dejó pasar.
El resto del día, Nene se quedó absorta en su propio mundo pensando en lo mismo. Cuando era momento de irse a sus casas, Nene nisiquiera escuchó el timbre por lo mismo y se quedó recostada en la paleta de su pupitre, hasta que sintió una mano tocando su espalda.

— Kusanagi ¿te encuentras bien? Después de receso has estado muy distraída — Preguntó un chico de un cabello corto de tono azul obscuro y pálido. Su nombre era Toya Aoyagi.
Nene se levantó de golpe dando un pequeño susto a Toya, exclamando al instante con un tono tembloroso — iE-eh, me asustaste! claro que estoy bien, solo estoy algo cansada... ¡No dormí muy bien anoche! — Dijo Nene en respuesta.
El chico de cabello azul no encontró nada raro en aquella respuesta, así que contestó en un tono de voz átono — Bueno, entonces dejo de molestar. Por cierto, será mejor que te vayas, va a oscurecerse en poco — Dijo Toya antes de salir de la sala de clases.

Nene guardó sus cosas y se fue a casa extrañada de lo que pasó. Decidió saltarse la cena y se quedó jugando hasta tarde para ignorar lo sucedido. Se quedó dormida poco después después de terminar la partida.
Pero antes de dormir, en ese corto tramo de tiempo, volvió a pensar vagamente en lo mismo que pasó en el receso. Más sin darle muchas vueltas, ya estaba muy cansada como para reflexionarlo a fondo.

Al día siguiente después de las clases, como de costumbre Rui, Nene y Tsukasa iban a la azotea a hablar sobre los próximos shows para después contarle a Emu sobre sus ideas y ver que más podrían ofrecerle al público.

Tsukasa quería que su guión fuera perfecto... a su manera, mientras que Rui le intentaba dar recomendaciones para la historia y el guión. Mientras tanto Nene solo se sentaba a almorzar y escucharlos hablar.
Nene no quería ni podía ver a ninguno a los ojos, se sentía muy avergonzada por algo tan mínimo. Rui notó esto y colocó su mano en la espalda de Nene para preguntarle si se encontraba bien. Nene un tanto sonrojada y sin voltear a verlo contestó que sí, Rui estaba un tanto extrañado por su actitud pero lo dejó pasar, nuevamente.

Nene solo podía pensar en lo que Rui le preguntó el día anterior y lo que ella hizo, aunque, probablemente, ambos chicos lo habrían olvidado ya.

Un hilo que nos unió. | Ruinene fic | remake !!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora