Sangre Y Espinas Biologia : Libro 1

capitulo 4

Mañana en un día muy importante para (muchos) mí. Mañana cumplo 17 años y tengo planeado una súper fiesta como todos los años anteriores.

Todos van a asistir y otra vez mi fiesta va a estar en la primera plana de la escuela. Espero que los nuevos estudiantes vayan, digo, ya deben saber de la fiesta porque hace tres meses que se habla de ella y ellos llegaron hace una semana.

Apenas ayer pude conocer a tres de los cinco nuevos porque dos van a mi curso y el otro bueno, nos cruzamos y no fue nada amistoso el chico, pero equis.

A todos esto, siento una opresión en el pecho que me tiene irritada e inquieta desde hace semanas y no tengo idea de lo que puede ser. Diría que tiene que ver con Julián pero incluso él anda insoportable, más de lo normal, que no se le puede ni hablar.

-Estoy emocionada- Mili aparece con las mejillas rojas, un poco sudada y con la respiración agitada por el calor parece que le va a dar un ataque en cualquier momento.

-Porque...

-Por tu fiesta nena -dice abrazandome por lo hombros y no me molesta. - Es de lo que se habla últimamente. La mejor fiesta del año - hace un titular imaginario con las manos y voz de locutora.

- Verdad. Justo pensaba en eso.

- ¿Si?, bueno, todos estuvimos pensando en eso. - se calla un segundo al mirar a una persona random. Llegaron las hermosuras - señala con la cabeza, según ella disimulando, y es cuando veo al grupo de tres chico nuevos. Que están sentados en la banca con la computadora frente a ellos en medio de la mesa.

Deben estar en una videollamada. Los veo sonreír mientras hablan animadamente con la otra personas. No sé por que mis pies se mueven hacia ellos con afán, mientras escucho los pasos de Mili a mis espaldas.

Llego hasta ellos y me siento frente a ellos y les doy una sonrisa sin saber porque mierda decidí venir hasta acá. Lo peor es que no tengo ninguna jodida excusa para mi atrevimiento pero ya esta hecho.

Suspiro ganándome sus preciosos ojos en mk y Mili que se queda parada a mi lado con una sonrisa coqueta.

-Eh... - balbuseo. No llego a nada más porque el mismo chico poco amable me interrumpe de forma brusca.

-Nadie dijo que podías tomar asiento.

Quedo en blanco y veo que a Mili se le borra la sonrisa y mira para un lado. Yo solo lo miro roja y me levanto apoyando mis manos en la mesa. Los tres me miran atentos esperando a que me vaya y los deje seguir su conversación ya que apenas llegué, dejaron de hablar y sonreír.

- ¿No puedo?- pregunto un poco nerviosa. Hasta se me olvido como se respira.-¿Está ocupado?

-No.

Responde el mismo chico con una expresión poco amable. Si sonríe más seguro seria hermoso.

-No puedes y No está ocupado - aclara al ver que no entiendo. Pero si no esta ocupada, puedo sentarme libremente.

- Pero....

- Nos vemos luego Reina- Dice para después levantarse. Sus amigos los siguen y veo al rubio sonreirme con disculpas.

Pero mi cabeza esta ocupada por esa puta frase. REINA. No, no puede ser. Solo debe ser un apodo cariñoso. No tiene sentido, por lo que sí, solo es un sobrenombre.

Para cuándo dejo de pensar, me doy cuenta de que se están yendo y apenas logro tomar el brazo del rubio que me mira fijo.

-¿Si van a la fiesta?- pregunto

-Seguro.

Los veo irse y decido ir a mi clases junto a mi fiel amiga. Mientras ella va cotorreando sobre la fiesta y demás cosas, yo solo puedo pensar en los chicos nuevos. Habían dicho que eran cinco alumnos nuevos y si mi matemáticas no me falla y mi vista tampoco, solo hay tres chicos nuevos por lo que faltan dos más.

-Son cinco.

-¿Quiénes?- Mili pregunta a mi balbuceo.

-Los nuevos- explico-, no eran cinco.

Ella se encoge de hombros- Si, pero solo hay tres.

Raro.

* * *

Llevamos 4 horas de clases de microempresas y mi cerebro ya está hecho papas por tanta información. Y como si fuera poco, estoy por mearme y no me queda de otra que pedir permiso.

- ¿Puedo ir al baño?- pregunto y me gano la mala mirada de la profesora. Por lo que respirando despacio le hago mímica y entiende la situación.

Una vez salgo del baño, veo al rubio de espaldas frente a un bote de basura. Por poco y chocamos y digo eso porque literal está frente a la puerta del baño de chicas. Va con una camiseta diferente a la de hace un rato,por lo que de habrá duchado.

-Hola- lo salido con una sonrisa, pero él solo me responde cortante y se va.

A ver, que carajos hice ahora. Bueno, tiene un mal día y por eso su ánimo cambió o le debe doler algo. Si, debe ser eso, porque hace rato estaba sonriéndome y ahora ni siquiera me miró.

Por la chismosa que llevo dentro, miro el basurero y veo que en ella está la misma camisa que tenia el rubio puesta en la mañana. La tiró, pero ¿por qué?. Miro hacia los lado para ver cuanta gente hay en el pasillo, levanto la camiseta para ver si hay alguna mancha o algo por lo que la tiro pero no hay nada.

Esta en perfecto estado.

La guardo entre mi camisa y vuelvo al aula de clases para encontrarlo frente a mi asiento hablando muy animado con Mili. La camisa la tiró porque quiso, pero que deje de hablar justo cuando llego yo es mucha coincidencia,¿no?

Cuando termina las clases tengo que ir a casa lo más rápido posible porque tengo cosa para la fiesta que hacer y no llego con el horario pero parece ser que no está en los planes del destino que vaya a casa porque veo salir a rubio con sus amigos y mis piernas va hacia él sin siquiera pedirme permiso.

-Hola-. Me veo en la obligación de saludar porque mi mano está agarrando con fuerza su brazo. ¡Dios ayúdame!.

Él solo mira mi agarre y se suelta, despacio pero se suelta, con los ojos cerrados. -Hola-. Y se vuelve a dar la vuelta.

No me jodas.

-¿Te hice algo, o te molesto algo que dije?- pregunto sin importame que me dé la espalda. Lo escucho suspirar y a su amigo decir ^esto no va a terminar bien^para darse la vuelta e irse dejándonos solos.

-No-. Se aleja de mi toque y me mira unos segundos para después apartar la vista -No te conozco u lo que digas no es problema mío linda.

- Lo sé, pero como hoy me hablaste bien...

-Yo no te hablé,- Me corta apurado -, tú me hablaste a mi, yo solo dije una palabra. Y no me molesta quedarme y hablar contigo pero tengo cosas que hacer, por lo que nos vemos en la noche linda.

Y se fue. Así como si nada.

Me dejo claro que si va a la fiesta.
Lo que no me queda claro es este sentimiento raro que tengo y eso me pone inquieta.

°°° Anónimo °°°
Verla llegar a casa con su ropa toda apretadita me vuelve loco. Hoy lleva una falda demasiada corta con un top que por poco deja ver el inicio de sus tetas, y una zapatilla sin plataforma porque ya es alta.

Al parecer está hablando con alguien muy amable por la sonrisita en su boca. Al verla así,  aparentando ser tan inocente y pura, me dan unas ganas de saltat encima de ella para comerla. Y hacerle ver lo bien que nos vemos juntos aunque ella no quiera.

Es que se ve tan perfecta, igualita al primer día en que nos vimos;la primera cena. La primera cena fue en un restaurante dónde fui con unos amigos para dejar de pensar en ella y al llegar, lo primero que vi fue a ella en un vestido Rosa que la hacia ver como una barbie en toda la palabra. Me quede mirandola por unos segundos y mis amigo me sacaron de la ensoñación a pellizcos discretos por estar en publico. Esa noches fue la mejor de mi vida porque nos besamos, y la llevé  a su casa y lo mejor pasó al día siguiente, su cara fue un verdadero poema sumándole a la llegada de sus nuevos hermanos.

Pero a pesar de ser perfecta, tiene que sufrir un poco por su intento de engaño. De solo pensar en eso me dan unas profundas ganas de ir por ella y lleavarle a mi lugar único que tuve que adaptar para la princesa y pueda llevarse una gran sorpresa, aunque eso puedo darle hoy ya que es su cumpleaños.

-Feliz cumpleaños amor.