ALGO LOCO (LIBRO III SAGA MUJERES DE LA MAFIA)

CAP 1

¡¿Hijo?!

BRITTANY.

Salgo del jet, el clima frío de Moscú me hace temblar unos segundos mientras me acostumbro.

--Pensé que te quedarías más tiempo en Colombia. -dice Antonio, la mano derecha de Vladímir- Ya iba de vuelta, solo volví por unas cosas.

Lo reparo, está apoyado en el capo de un mazda cx 30, color rojo, tiene un traje negro liso.

--Tengo un negocio con una amiga, me regreso mañana. -explico.

Me abraza con fuerza por la cintura y me alza en el aire dándome vueltas, sólo puedo reírme mientras el aire golpea mí rostro.

--Mi rubia preferida. -dice al bajarme- No está Vladímir presente lo que significa que soy tu amante preferido, bésame.

Pego mis labios a los suyos mientras llevo mis manos a su nuca, él aprieta mí cintura e intensifica el beso al adentrar su lengua en la mía, nuestras lenguas danzan con sincronía y siento que pierdo la respiración pero Antonio no me suelta.

--Ya. -alcanzo a susurrar cuando me da un poquito de espacio.

Él se separa y yo mojo mis labios al ver cómo recorre mí cuerpo con lascivia.

Tengo un vestido corto de color negro, tiene un escote profundo y al no llevar sostén deja a la vista la curva de mis senos, mientras los pezones se me marcan, tengo unos tacones negros de punta fina, que se amarran a mí pantorrilla con pitas delicadas, mí cabello se encuentra suelto pero no es muy largo por lo que me llega a la mitad de la espalda.

--Amo cuando Vladímir no está cerca porque eso significa que eres mía. -alardea abriendo la puerta de su auto.

--No soy de nadie. -aclaro cuando él sube al auto y salimos de la pista de aterrizaje- Y qué Vlad no te escuche decir que amas cuando no está, es tú jefe...

Sonrío cuando blanquea los ojos, el sol se esconde en el horizonte y yo solo vengo por una cosa.

--Brittany Russo, Antonegra de todas las mafias y una de las mujeres más sangrientas del mundo... ¿Le tiene miedo al Boss de la mafia Rusa? -río ante la mención del título de Vlad.

--Sabes mejor que nadie qué Vladímir jamás me tocaría un cabello y no temo ni por mí ni por ti, sólo temo que eres un buen polvo y siempre estás dispuesto para mí. -explico- Antonio, hoy no tendremos sexo, vengo por negocios.

--Se me olvidaba que la mayor cualidad y defecto de Brittany Russo, es ser sincera a un punto exagerado. -susurra con el ceño fruncido.

--Llévame al club Epifanía. -exijo sin darle importancia.

--Le dices Club a un prostíbulo. -suelta con desdén.

--Es uno de los prostíbulos más cotizados y aclamados, las putas sueñan con trabajar allí y los hombres anhelan entrar cómo invitados y no cómo trabajadores. -digo mirando mis uñas color negro- ¿Celoso?

--¿De qué me dijiste que no quieres sexo pero seguramente apenas entres al club buscarás a algún hombre para cogertelo delante de todos? No. --su tono de voz me hace sonreír.

Hay escalas en mí vida sexual, primero: Vladímir Ivanov, Boss de la Bratva. Segundo: Antonio, Vor de la Bratva, de ahí en adelante todos son simples aventuras.

Digamos que me encanta brincar en pollas diferentes, pueden decirme prostituta que la verdad no me va a importar, solo quiero mí placer y no lo encuentro en una sola persona.

--¿Vladímir sabe que estás aquí? -cuestiona mientras yo miro las calles ajetreadas de Moscú.

--No lo sabe, está ocupado enamorándose de la rubiecita. -respondo- ¿Tú que haces aquí?