One shots [Miles G. Morales 42]

Es ASMR

Haimi y Miles habían tenido una pequeña discusión, por lo tanto ambos estaban durmiendo en sus propias casas.

Miles no podía dormir, ya se había acostumbrado a dormir con su novia y ahora no podía conciliar el sueño. Daba vueltas en la cama, cerraba los ojos y nada.

Vio la hora, las 2:47am, su madre no se encontraba pues tenía turno muy tarde. Con un suspiro salió de la cama, tomó su abrigo y teléfono. En la cocina tomó unos post-it, escribió algo para dejarlo pegado en la nevera, cogio las llaves y salió.

Iba a reglar las cosas con Haimi y tal vez si tenía suerte, dormiría con ella.

Hacia un poco de frío, pero este lo no detuvo, Miles conocía muy bien la ciudad de Brooklyn, por lo que, no tuvo miedo de salir tan tarde por la noche, pero aún así estuvo en alerta.

Al llegar subió por un árbol que estaba pegado de la ventana de la habitación de Haimi, rogaba para que la ventana estuviera abierta, su novia siempre le decía que la ventana estaría abierta a cualquier hora para el.

Cuando pudo comprobar, entró con cuidado para no despertar a los padres de Haimi. La habitación estaba oscura simplemente estaba iluminada por una lamparita que Miles le había comprado hace meses.

El echo que Haimi la usara le daba mucha satisfacción.

Dirigió su mirada hacia la cama donde la chica estaba acostada, se acercó hasta ella, pero lo detuvo un sonido raro.

Agudo su sentido y pudo escuchar como susurraban y tocaban cosas con lo que parecía ¿uñas?

—¿Que carajo?—frunció el ceño.

—Es Asmr—Miles se dio un susto cuando vio a su novia abrir los ojos y hablarle.

—Puñeta, loca que suto'—tocó su pecho mientras trataba de respirar normal—¿Asm-Que?

—Asmr, sonidos relajantes para dormir—puso en pausa el video y se acomodó mejor para ver a su novio.

Este la miró extraño pero se relajó y puso una cara de perrito regañado, se arrodilló en frente de la cama y apoyo sus brazos en la orilla de la cómoda.

—Perdón por lo de esta tarde, mami, vine hacia aquí para pedirte perdón, se que es mi culpa por eso estoy aquí—Haimi lo miro sería, pero luego le sonrió.

—Nah, está bien, me gusta que cuando sepas que fuiste tú quien tuvo la culpa, vengas y te disculpes—le acarició la cabeza.

—Gracias por perdonarme, ahora, ¿me puedo acostar contigo?—preguntó.

—Claro, ven—hizo espacio para que Miles se acostara.

Se quitó el abrigo y sus zapatos, abrió la sábana que cubría el cuerpo de su novia y se arropó con ella, atrajo a Haimi hacia el y enteró su cara en el cuello de la chica.

—Jesus, gracias—susurró Miles con alegría.

Haimi le dio play al video de Asmr y cerró los ojos, al los segundos sintió como Miles se removió un poco.

—¿Que pasó?—preguntó con la voz adormilada.

—¿Es normal que ese sonido me de cosquillas en el cerebro?—Haimi soltó una risita.

—Ajá—con eso dijo todo, los minutos pasaron y espero una respuesta de Miles, ya que siempre era él, el último en hablar.

Miró hacia abajo y lo pudo ver soltando pequeños suspiros estando ya en el quinto sueño.

Tengo que admitir que sin ASMR no duermo, ya es una adición a los sonidos.

Cual es su Asmrista fav?

El mío es Mol

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