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Maratón 2/3
"¿Volverán?"
_______ Rivera | Nube
Llegué a casa de Ari, bajé de mi auto y toqué la puerta; salió Samy.
— ¡Hasta que llegas! Hay una sorpresa, pero necesito taparte los ojos. — La miré curiosa.
— ¿Y eso?
— Tú solo déjame, te va a gustar la sorpresa. — Samy no me dejó contestar y rápido fue a cubrir mis ojos. — Aguas, pendeja, no te vayas a caer.
— Samantha, si me tiras te voy a matar. — Samy rio y tomé sus manos que estaban en mis ojos. Caminamos unos cuantos metros hasta que con mis pies comencé a sentir césped; el patio trasero...
— Contaré hasta tres y voy a quitar mis manos... Una, dos, tres... — Quitó sus manos de mis ojos y logré mirar una figura femenina, me acostumbré a la luz y me di cuenta de que era una persona que yo extrañaba demasiado...
— ¡Sof! — Exclamé y corrí a abrazar a esa chica, ella aceptó mi abrazo gustosamente.
— ¡Nube! — Exclamó ahora mi amiga. Sofía Guarnizo, fue mi mejor amiga por muchísimo tiempo... Nos separamos hace tres años cuando ella tuvo que regresar a Colombia con su madre, volverla a ver fue como volver a una etapa de mi vida... — Te extrañé tanto...
— Yo igual, Sof... No sabes cuánto... — Me separé del abrazo y la miré detenidamente. — Estás tan linda, no puedo creer que volví a verte...
— Ay... No me digas eso que me chiveo. — Dijo ella para después cubrir su rostro, nosotras reímos. Voltee a mi costado y estaban Ari, Juan y Samy mirando atentamente la situación. Saludé a mis amigos y entramos de nuevo a su casa...
Pasaron al rededor de dos horas y nos fuimos a casa de Samy, ella y yo, estábamos hablando tranquilamente hasta que ella se quedó seria...
— Nube... — Dijo y bajo la mirada. Le puse pausa a la película que veíamos y la miré.
— ¿Qué sucede, Samy? — Ella no contestaba, alcé su barbilla y miré que sus ojos estaban cristalizados. — ¡Hey! ¡Samy! ¿Qué pasó? — Pregunté. Samy intentaba decir algo pero las palabras no salían, no lo pensé dos veces y la abracé escuchando pequeños sollozos en mi hombro.
— Félix me terminó... Dijo que conoció a una chica más y que ella era muy linda e interesante, que me agradecía por todo lo bueno pero que hasta aquí llegó nuestra relación... — Sentí un nudo en mi garganta... No contesté, solo acaricié su espalda y ella me abrazó aún más fuerte...
