11. Capítulo 10.

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Hi~ Ayer se dieron luces para donde van a ir nuestros conflictos y hoy nos toco profundizar un poquito más así que nada, de verdad me gusta mucho la dinamica de este fic, a su manera se vuelve muy adorable, solo espero que les guste.

Gracias por tanto.

—¿Estás listo, onii-chan? —El aludido se encuentra parado como un poste de luz frente a la flamante Harley-Davidson que le pidió prestada a Shorter sin permiso, sus ojos oscuros repasan la motocicleta con desconfianza, sus pies están totalmente rí...

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—¿Estás listo, onii-chan? —El aludido se encuentra parado como un poste de luz frente a la flamante Harley-Davidson que le pidió prestada a Shorter sin permiso, sus ojos oscuros repasan la motocicleta con desconfianza, sus pies están totalmente rígidos en la acera y sus dedos juguetean entre ellos, le resulta sumamente adorable como Eiji es incapaz de disimular sus emociones.

—¿Estás seguro de que puedes conducirla?

—Sí. —No duda—. Puedo conducirla.

—Ya veo. —Eiji se muerde el labio inferior dada la ansiedad, más el gesto se le hace sexy y de repente sus palmas se sienten mojadas en las manillas—. Nunca he andado en una.

—Quieres llegar rápido a la universidad ¿verdad?

—Sí, pero... —Eiji da un par de pasos tímidos hacia el vehículo casi como si esperara que se le lanzara a la cara para morderlo cual perro rabioso—. Pero está el subterráneo.

—¿Realmente crees que llegaremos más rápido en metro? —Su voz es calma y ligera, si bien, al igual que Eiji está muerto de nervios porque vamos, va a llevarlo pegado en una motocicleta a la cuna del trauma (es decir, la facultad) sabe que debe reafirmar la seguridad por ambos—. ¿No confías en mis capacidades de conductor? ¿Es eso? —Así que recurre al chantaje.

—¡No es eso! —Que alce las manos y se vea en pánico lo hace soltar una risa, Ash se baja del asiento de cuerina y enreda los brazos coquetamente alrededor del moreno, disfruta viendo esa faceta suya.

—Me siento realmente herido. —Sus dedos empiezan a juguetear con las ondas de la punta, le gusta que sea esponjoso y oscuro, realmente oscuro—. Me siento ofendido, onii-chan.

—No es eso. —Pero entonces Eiji lo mira sin vacilar—. Confío en ti, te confío mi propia vida. —Y esos ojos oscuros, joder, se encuentran tan ennegrecidos por su determinación y son relumbrantes y más que cualquier joya que haya vislumbrado—. Solo me da un poco de vergüenza abrazarte tan pegado.

—O-Oh. —El cerebro no puede responder a eso—. Ya veo. —Lo suelta apreciando de antemano que su cara está roja y sus orejas bermellón.

—Pero estoy dispuesto a intentarlo, así que vamos. —Eiji se pone el casco y le pone el casco, es todo un desconfiado—. Te ves guapo con tu cabello de James Dean pero tu seguridad va primero.

—Joder. —Prefiere no pensarlo más y saltar a la motocicleta—. Afírmate bien.

—Sí. —Su respiración se corta cuando siente las manos del mayor deslizarse alrededor de su vientre.

Dandelions [Agosto de MPreg]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora