𝐓𝐎𝐑𝐌𝐄𝐍𝐓𝐀 𝐃𝐄 𝐅𝐔𝐄𝐆𝐎 & 𝐒𝐀𝐍𝐆𝐑𝐄 [ʜᴏᴛᴅ]

"PROPUESTA"

ʜᴀꜱᴛᴀ Qᴜᴇ ʟᴀꜱ ʙᴀᴛᴀʟʟᴀꜱ ꜱᴇᴀɴ ɢᴀɴᴀᴅᴀꜱ, ʏ ᴇʟ ʀᴇɪɴᴏ ᴠᴇɴɢᴀ.
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La sala privado del consejo del rey estaba en sesión, Aurion tenía un rostro insatisfecho y una mirada fría, sostenía una copa de vino de Dorne, mientras examinaba las palabras de algunos lords que formaban parte del consejo privado.

— Creo que sería una buena opción enviar a la princesa Valyrian a Poniente. — opinó Lord Lyam Garlyn.

— La princesa es temperamental, puede causar problemas. Recordemos que el rey también tiene una hija, y por lo que se ha rumoreado, es una completa mimada. — interno lord Will Tanner.

Aurion rodó los ojos, al igual que su hermano menor, Jasper, quien era el señor de Dragonseal, una isla a pocos metros del Continente. El disgusto de ambos señores dragón era evidente, si bien, Valyrian era terca, obstinada e indomable, aún así, seguía siendo la princesa heredera, y se había ganado su lugar.

— Dejemos que sea ella quien decida. — habló Jasper. — Si desea ir, entonces, la apoyaremos sin dudarlo. — terminó.

Todos en la mesa asintieron, y el rey también, la reunión del consejo terminó y cada quien se dispuso a cumplir con sus deberes del día. Aurion caminó con tranquilidad hasta la sala de armas, en donde sabía perfectamente que su preciada hija estaría.

— Debes afilar la hoja con sumo cuidado. — habló el rey.

— Padre. — la menor se puso de pie y reverencio a su progenitor. — ¿Sucede algo? — pregunto.

— Claro que no cariño. — tomó asiento y señaló a su hija para que imitara la acción. — Dime mi niña, ¿qué opinas sobre Poniente? — pregunto con curiosidad.

— Bueno, realmente no tengo un concepto claro sobre ellos padre, me limito a hablar y hacerme una percepción sobre lo que nuestros antepasados decían sobre ellos. Es una tierra plagada de envidia, maldad y traición. — expuso con franqueza.

— Entiendo, hoy el consejo propuso que viajaras como enviada del rey, y te presentarás en la corte de los sucios Targaryen. — arrojo con desprecio el apellido de los gobernantes de Poniente. — Me ha parecido una idea acertada, creo que es momento que esos traidores paguen las humillaciones que un día le hicieron a nuestros antepasados. Y no hay nadie mejor que tú, para hacer tal trabajo. — sonrió.

— Sabes que estoy a tu disposición padre, nada me gustaría más que, enseñarles a esos sucios de sangre, quienes son los verdaderos señores dragón. — imitó el gesto de sonreí de su padre y se puso de pie. — Dime padre, ¿qué deseas que haga? — bajo la cabeza en señal de respeto.

Según el maestre August, la princesa Valyrian y el rey Aurion, conversaron casi hasta la media noche en el salón de armas, se dice que a la mañana siguiente la misma joven se presentó en la corte, vestida de forma impecable, y una sonrisa maliciosa en su rostro, anunció que sería ella, quien viajaría en calidad de invitada del rey Viserys Targaryen, a Poniente.

A pocos días de aquella charla, los barcos con las pertenecientes de la joven heredera de Sothoryos, partido hasta Poniente, llevando en ellos, tesoros incalculables para la corona de la casa Targaryen.

Y a lomos de su preciado dragón, Valyrian de la casa Stormfyre, voló hasta King's Landing, con un solo propósito en su mente... Venganza.