ɪ ᴅᴏɴ'ᴛ ʟɪᴋᴇ ʏᴏᴜʀ ʟɪᴛᴛʟᴇ ɢᴀᴍᴇꜱ, ᴅᴏɴ'ᴛ ʟɪᴋᴇ ʏᴏᴜʀ ᴛɪʟᴛᴇᴅ ꜱᴛᴀɢᴇ. ᴛʜᴇ ʀᴏʟᴇ ʏᴏᴜ ᴍᴀᴅᴇ ᴍᴇ ᴘʟᴀʏ ᴏꜰ ᴛʜᴇ ꜰᴏᴏʟ, ɴᴏ, ɪ ᴅᴏɴ'ᴛ ʟɪᴋᴇ ʏᴏᴜ.
——————————————————————————Valyrian retiró lentamente la mano que yacía alrededor de su cintura con sumo cuidado, se levantó de la cama y se colocó una bata satinada en color negro. Caminó hasta el balcón en donde la vista eran sumamente fascinantes hasta la puerta superior y entrada, sintió como unas manos la tomaban nuevamente por la cintura, volteó para mirar al hombre de cabellos platinados y sonrisa tranquila.
— Buenos días, querida. — saludó este depositando un cálido beso en la mejilla de esta. — ¿Cómo te encuentras? — pregunto.
— Buenos días, mi rey. — sonrió ella. — Estoy bastante bien, aunque el dolor en los pechos me atormenta. — se quejó. — Pero no te preocupes, iré con el maestre en estos días, ¿tú cómo estás? — pregunto.
— Eso espero, no quiero que dejes que ese dolor siga molestándote. — suspiro. — Estoy bien, querida. Algo cansado por las últimas noches. — sonrió con picardía.
Ambos miraron el alboroto de las carrozas entrando a la fortaleza roja, varios invitados estaban llegando para las apremiantes celebraciones que se llevarían a cabo en aquel lugar. Valyrian se despegó de Viserys y caminó hasta la mesa en donde los alimentos ya habían sido colocados.
Viserys caminó hasta donde ella y se colocó a su par, suspiro para sí mismo y tomó la mano de la mujer que su corazón anhelaba.
— Sabes que nada cambiará entre nosotros, ¿verdad? — él la miro esperando una respuesta y ella asintió. — Esto no cambiará nada entre nosotros, mi amor. — un par de lágrimas rodaron por el rostro de la mujer. — Sabes que mi matrimonio con Alicent es para cumplir con el deber, no puedo permitir que ese niño nazca siendo señalado como un bastardo. — dijo.
— Lo sé, Viserys. — ella bajo su cabeza y jugueteó sus anillos. — Pero, temo perder tu cariño. — sollozo.
— Oh, mi amor. — seco las lágrimas de la mujer y levantó el rostro de ella. — Yo jamás podría dejar de quererte, has iluminado mi vida desde que llegaste. Haces tan feliz a Rhaenyra, ella te ve como una madre. – sonrió. — Te prometo que al nacer el hijo que Alicent lleva en el vientre y este cumpla su primer onomástico, anularé el matrimonio. — acarició la mano de la mujer. — Te lo juro, solo dame tiempo, y serás mi esposa, ante los dioses antiguos, y ante la fe. — aseguró.
ESTÁS LEYENDO
𝐓𝐎𝐑𝐌𝐄𝐍𝐓𝐀 𝐃𝐄 𝐅𝐔𝐄𝐆𝐎 & 𝐒𝐀𝐍𝐆𝐑𝐄 [ʜᴏᴛᴅ]
Science FictionCuando la maldición arrasó con Valyria los Targeryen, Velaryon y Celtigar estuvieron a salvo, sin embargo, me creían si les dijera que no fueron los únicos. Los señores de "Stormfyre" la segunda casa más importante en el vasallaje de los señores dr...