Bakugo Katsuki lidia con una serie de homicidios y suicidios que únicamente tienen una única conexión que parece intocable.
Uraraka Ochako solo esta tranquila disfrutando de ver al nuevo pegarse en la trampa como una mosca en una telaraña, su telar...
"...Estamos fuera de la fiscalia donde se está llevando a cabo el juicio por homicidio, secuestro y extorsión de la empresaria Ochako Uraraka..."
"...También estarán presentes la familia de Setsuna Togake, quiénes hace unos pocos años atrás llegaron a instancias de juicio contra la empresaria, recibiendo con dolor el veredicto que se sentenció con la libertad de la mujer..."
"...Nos están informando de último momento que el abogado que estuvo toda última década al lado de Uraraka renunció al caso, la representante de la mujer será Camie Utsushimi..."
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–Señora Kirishima, ¿Usted conoce a la acusada?
- Sí.
- ¿Que tan bien puede decir que la conoce?
La mujer de cabello colorido miro a Uraraka, quien desvió el rostro y bajo la vista.
- Fuimos amigas hasta hace unos años, una gran pelea nos separó.
El fiscal asintió y sonrió de lado.
- ¿A que se debió aquella pelea?
- ...Por dinero.
- ¿Está hablando del desvió de dinero que hay en las cuentas bancarias de la mujer dentro del hotel de lujo "Rich Hotel Must"?
Ochako abrió los ojos de par en par, mirando con pánico a su antigua amiga, quien frunció el ceño mientras se miraban mutuamente.
- Así es. Yo intente que Uraraka no avanzará con eso, sin embargo, nunca me escuchó.
