I wanna be yours // Avatar

Capítulo 5

Neteyam no recordaba sentirse tan solo en su vida. Aonung había llenado por completo el vacío de sus días, durante el tiempo que permanecieron juntos.

Llevaban más de 3 semanas sin apenas dirigirse la mirada. Aonung metido más que nunca en su papel de hacer lo que debía hacer por las personas que le rodeaban y Neteyam dolido por la situación y apenado por haberse dejado llevar tanto como para llegar a sentir tanto por el otro chico Na'vi.

Lo peor de todo es que nadie parecía haberse dado cuenta del estado anímico tan desastroso en el que se encontraba Neteyam. Todos mantenían su día a día de la misma manera sin detenerse a observar que Neteyam había perdido peso, pues no tenía demasiado apetito, sin percatarse de las bolsas y ojeras que surcaban sus ojos por no poder descansar como era debido; como las sonrisas tan notorias semanas atrás habían desaparecido en su totalidad y como Neteyam se mantenía ocupado todas las horas del día posibles porque de ser lo contrario, los pensamientos sobre Aonung, cuando tenía tiempo libre, no paraban.

Neteyam estaba tan sumido en sus propios pensamientos, en el dolor de su corazón, que no caía en cuenta que los demás si habían notado su estado.

- ¿Neteyam quieres ir conmigo a nadar?- preguntó la pequeña Tuk hace unos días.

- Lo siento, pequeñaja pero tengo cosas que hacer...otro día lo haremos ¿vale?

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- ¿Neteyam quieres ir a pescar tú y yo como en los viejos tiempos sin Tsireya?- le propuso Lo'ak.

- No, no pasa nada. Ve tú con Tsireya, lo pasarás mejor- Neteyam le dedicó una débil sonrisa a Lo'ak, pensando que lo hacía por solidaridad y no porque realmente quería pasar tiempo con él. Llevaba años sin pasar tiempo con él, desde que empezó a salir con Tsireya, quizás Lo'ak esa misma mañana se había sentido culpable por ello.

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- Cariño, ¿no te gusta mi comida?- inquirió Neytiri al observar que su hijo apenas estaba comiendo.

- Esta muy buena, mamá.

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- Bro, ¡Qué careto tienes! ¿Estás durmiendo bien?- Spider estaba preocupado pero lo único que procesó Neteyam era que lucía horrible.

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No notaba como cada uno de ellos sí se preocupaban por él. No notaba como Kiri lo observaba continuamente desde la distancia preocupada y cómo se acercaba cada vez que consideraba que Neteyam necesitaba ayuda, no notaba cómo Neytiri se esforzaba todos los días más para hacer comida sabrosa y del agrado de Neteyam para que comiera un poco más...

No era simplemente el dolor de ser rechazado. Pues Neteyam había vivido siempre con el miedo de ser rechazado si no hacía las cosas bien. Era el hecho de que da igual lo mucho que lo intentara nunca sería la primera opción de nadie. Era el hecho de sentirse tan ingenuo y patético al considerar que Aonung sentiría lo mismo que él. Era el hecho de sentirse capaz de hacer amigos y mantenerlos a su lado. Era el hecho de que su padre jamás le diría "estoy orgulloso de ti" o "no tienes que aparentar ser alguien que no eres, porque te queremos tal y como eres con tus virtudes y defectos"

Sus hermanos jamás cancelarían un plan mejor por pasar tiempo simple y llanamente con Neteyam. Porque Neteyam era aburrido, nada que ofrecer a parte de los dotes que se ha obligado a aprender para ser un mejor Na'vi. Una personalidad plana, sin nada especial.

Neteyam continuó en su bucle de pensamientos un par de días más, hasta que una mañana Jake se cansó de ver a su hijo mal y decidió hablar con él.

-Iré directo al grano. ¿Qué te esta ocurriendo?

- Hice las tareas encomendadas lo más rápido posible esta mañana. ¿Hay algo que este sin hacer? ¿O hay algo que he hecho mal?

- No me refiero a eso. Está todo perfecto. Me refiero a ti. ¿Qué te está ocurriendo a ti?

- No estoy entendiendo la pregunta...- rio incómodo.

-Todos y todas hemos notado que no eres feliz en estos momentos. Ni comes, ni duermes, ni sonríes y estás pidiéndome constantemente más cosas para hacer en el día, cuando ya no hay nada más que hacer.

- Pensaba que no os habíais dado cuenta...- dijo con pesar.

- Pues claro que nos hemos dado cuenta. Toda la familia te quiere y quiere verte feliz.

- ¿Te han mandado el resto a hablar conmigo?

- ¿Piensas que han tenido que ser ellos por qué yo por cuenta propia no me hubiera preocupado por mi hijo?

- N-no he dicho eso.

-Mira, sé que no he sido el padre más cariñoso del mundo. Pero no quiero que pienses que no me importas. Me importas, nos importas mucho. Intentaré trabajar en ello y te daré todo el cariño que te mereces aunque me cueste un poco. - miró a Neteyam- No me gusta mostrar mis emociones demasiado, pero lo haré por todos, no solo por ti. Es algo que debería haber mejorado muchos años atrás.

- No tienes por qué hacerlo.- Neteyam no quería obligar a su padre a hacer nada que él no quisiera, solo porque había visto a Neteyam un poco más triste de lo habitual.

- Lo haré- Jake parecía decidido- ven aquí -dijo abriendo sus brazos.

Podría sonar absurdo pero en el momento que Neteyam sintió los brazos de su padre rodearlo, rompió a llorar. No recordaba la última vez que le dio un abrazo tal y como ese con tanta fuerza, como si tuviera miedo de que Neteyam se desmoronase.

- Cuéntame que te pasa ¿si?- dijo mientras daba palmaditas suave en la espalda de Neteyam para ayudarlo a desahogarse.- ¿tiene algo que ver con Aonung?

- ¿C-cómo?

- Estoy más pendiente de ti de lo que crees... ¿Os habéis peleado?

- Es complicado- dijo bajito.

-¿Te gusta Aonung?- Neteyam se separó inmediatamente del abrazo- ¿Por qué pareces tan asustado? No pasa nada si te gusta. Sé que aquí no es tan común, pero de dónde yo vengo es de lo más normal.

- ¿En la Tierra no pasa nada?

- Depende de la zona, por desgracia...- dijo serio- pero no tiene nada de malo, y estoy seguro de que aquí tampoco ocurriría nada.

-¿Seguro?

- Neteyam las personas que te quieran, solo quieren verte feliz y te aseguro que hay más gente que te quiere de la que tú crees.

- Pero Aonung no siente nada por mi.

- ¿Estás seguro de eso?

- Él mismo lo dijo- los ojos de Neteyam se llenaron de lágrimas al recordar la última conversación que mantuvo con Aonung.

- No pasa nada. Todo se solucionará. Estamos aquí. Apóyate en nosotros y nosotras. No estás solo. Nunca estarás solo.