Los años pasaron, y los ninjas como los conocíamos pasaron a ser historia. Las personas que hacían uso del Chakra cada vez eran menos debido al esfuerzo que desarrollar dicha habilidad significaba, además, no era algo asegurado ser portador de ch...
Se habían alejado de aquel lugar, los bandidos no aparecían así que estaban a Salvo. Sasuke soltó a la Hyuga.
- Gracias.-expresó mirando a quien la había salvado, aunque este aun estuviera atento a la ruta de la cual veían.
- ¿No sabes lo peligroso que es entrar a lugares así?- frunció el entrecejo.
-- Quería acortar camino... - agacha la mirada - lo siento ¿podría pedirte algo?--El pelinegro la miro sin responder.-la bolsa q... no, no es nada. Muchas gracias. - dijo después de recapacitar en lo que estaba a punto de decir e hizo una reverencia no muy pronunciada, y comenzó a alejarse. Pero el chico a quien le dio la espalda caminó a su lado.
- Aun traes el uniforme de la escuela, ¿por qué no has ido a casa?
- Salí con una amiga, compramos algunas cosas y apenas volvía a casa.
-¿la pelirosa?
Hinata sonrió - sí.
- La próxima vez que salgas regresa más temprano, ve por rutas menos solitarias o usa un taxi.
Mirándolo asintió y una duda cruzó su mente - me sorprendió que aparecieras.
- pasaba por ahí.
- eres hábil.
- Entreno para volverme policía. - era verdad, pero lo usó para evitar sospecha alguna de ser un ninja urbano.
-¿Vives por aquí?
- la pregunta es: ¿donde vives tú?
Era verdad, solo caminaban sin rumbo alguno.
- lo siento- se disculpo nuevamente. - tomaré un taxi y me iré a casa.
Hubo un silencio y Hinata buscó su celular, pero este se había apagado por falta de batería.
Al notar que no encendia, devolvió el celular al bolsillo en que lo guardaba, y con un poco de pena; porque aun no se concideraba cercana a su tutor, le pidió su celular a Sasuke.
- ¿podrías... prestarme tu celular?.- Preguntó, y el Uchiha extendió su celular a ella. Hinata pidió su servicio, y una vez devolvió el celular junto a un "gracias ", el silencio reinó entre ellos. Era una situación extraña, algo emocionante y también incomoda. Al menos para ella.
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- El taxi no tardará en llegar...- No supo como continuar, no quería hacerlo sentir que lo corría después de haberla salvado.
Sasuke la miró, ella parecía querer decir algo, ¿a caso iba a decirle que se marchara después de lo que pasó? Porque esa parecia ser la intención.
- Esta bien, cuando llegue el taxi me iré. Esta zona es peligrosa. - especialmente este día, ninjas urbanos se concentrarian cerca de ahí por la competencia, en la que él mismo participaría. No iba a dejarla sola sabiendo que si bien no todos eran malos, la reputación conseguida no era en vano.