Máscara

Capítulo 24: ¡Visitas al santuario! Y nervios...

•Narrador Omnisciente:

Días antes de año nuevo; Najimi, Hitohito y Shouko en la nieve que rodeaba sus casas, jugando con niños y disfrutando la compañía de sus amigos, que también se unieron a ellos.

No obstante, decidieron pasar año nuevo por su cuenta. Shouko fue con su familia a la residencia de su abuela, Hitohito se quedó en su casa y Najimi se infiltró en la casa de los Tadano, para la sorpresa del chico.

...

La familia Komi decidió visitar el santuario o, tal como lo hacían todos los años, donde fueron a orar. Shouko tuvo que pedir prestado un kimono a su abuela.

Shouko; Akira, su prima, y su abuela se encontraban frente  a la reliquia, a punto de agradecer. Aplaudieron dos veces y se inclinaron dos veces también.

"¿Se cumplió tu deseo del año pasado?"—Pregunto la mayor de las Komi, mirando a su nieta. Shouko se quedó en silencio, pensando, y asintió.—"Asegúrate de mostrar tu gratitud, en ese caso."—Sonrió su abuela.

Una vez terminaron, se inclinaron una vez más y fueron a saludar al "jefe" del santuario.

"Disculpe la intrusión"—Dijo la mayor de las Komi mientras abría la puerta.

"¡Yuiko-San! ¡Justo a tiempo!"—Exclamo la señora, contenta.—"¡Una de las empleadas que trabaja a medio tiempo se resfrío! ¡Y esto está lleno de gente! ¿Que debería ha...?"—La señora se detuvo cuando vio a Shouko.

Momentos después, la chica estaba vestida como asistente del santuario, avergonzada. Su abuela la incitó a ayudar.

Shouko seguía a la señora, nerviosa.—"Noko-chan! Esta chica nos ayudará temporalmente, enséñale a hacer su trabajo."—Dijo la señora.

"Okay!"—Respondió Inaka alegremente.—"Ven, siéntate por aquí"—La llamó. Komi obedeció.—"Básicamente vendemos amuletos, solo mira la lista de precios y deberías estar bien. ¿Tienes frío? Puedes usar la estuf..."—La chica se detuvo, sus ojos se abrieron.—'¿¡Komi-Sama?! ¡Maldición, ella se enterará de que vengo del campo!'—Pensó, mientras su corazón aceleraba.

'¡Me van a molestar, no puedo volver a la escuela!'—Pensaba mientras paniqueaba, no obstante, Shouko no decía nada.—'¿No me descubrió? Genial'—Inaka soltó un suspiro.—'De todos modos, Komi-sama no debería tener ningún problema con esto, es una chica de la ciudad, después de todo.'—Se sonrió.

"Una flecha de ceremonia, y un amuleto de parto seguro, por favor"—Pidió un muchacho. Shouko, como era de esperarse, entró en pánico.

'¿¡Komi-Sama?! Tengo que ayudarla, ¡Pero quizás me descubra!'—Inaka lidiaba con sus pensamientos.—"Cálmate, puedes escribirlo"—Dijo mientras le entregaba una hoja y un pincel.

"Ah, okay"—Dijo el hombre en confusión luego de ver el precio, escrito en una hoja. Las chicas trabajaron hasta el anochecer.

"¡Muchas gracias, muchachas, me salvaron!"—Suspiro en alivio la jefa.—"Y también viene otra empleada, así que puedes tomar un descanso"

Inaka se arrodilló, relajándose, pero luego recordó que Shouko podría describir su identidad, y además la estaba mirando. Para su sorpresa, ella le entregó un papel escrito con letra perfecta.

"Muchas gracias por hoy, Inaka-san. Feliz año nuevo, espero que nos llevemos bien este año también"—Decía la nota. Inaka, al leerlo, sonrió aliviada.

...

2 de enero, Tadano se acababa de despertar. Caminó torpemente hasta el comedor entre bostezos.