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Esta plática era más que necesaria, estaba conociendo a Aldo, estaba siendo sincero con algo nuevo en el.
Ya habían dado la una de la mañana, nuestros ojos ya pesaban, así que con un beso y un buenas noches, ambos nos quedamos dormidos.
. . .
Esta vez Aldo fue el que se despertó primero.
Abrí poco a poco mis ojos, la luz que entraba de la habitación me golpeaba a mi, al notar Aldo esto, con su cuerpo trato de hacerme sombra, para poder despertar.
-Buenos días pinche viejo rascuacho
-¿Apoco si tilín?
Aldo sonrió y me di un beso de piquito en los labios.
-¿Que hora es?
-Es temprano, apenas son las 10 de la mañana
Aldo se levantó primero y se acostó encima de mí
-Pesas un chingo Aldo, levántate, me vas a sacar la mierda
No me hizo caso y me hizo cariñitos, amaba su lado cariñoso de el.
Terminamos fundidos en un beso, para después ambos levantarnos.
-Vallamos a desayunar, el día de hoy te invito por completo, solo préstame tu presencia y tu cara bonita.
-Me agrada la idea de salir sin gastar, acepto chisquistriquis
Completamente gustoso acepté su oferta.
Ambos salimos de casa bien vestidos, esta vez no dejó que manejara y prefirió pedir un Uber. Este nos llevó a una plaza cercana donde habían varias distracciones, y en la que destacaba su parque de diversiones en la azotea del gran edificio.
La mañana comenzó en un restaurante, nos salimos sin desayunar para aprovechar el día completo.
Empezamos desayunando en "La casa de Toño", los desayunos ahí me gustaban, y Aldo lo sabía.
Una vez bien comidos, cargamos pilas para seguir con nuestro recorrido.
-Wey, quiero ver una película
-Va, si tu quieres vamos, el cine está en el tercer piso
La primera atracción era algo simple, tenía ganas de de ver una película que recientemente se había estrenado en cines, era "Talk to me" o en español "Háblame". Es una película dirigida por un par de amigos que hacen cortos de terror en YouTube.
Entramos a Cinépolis, Aldo compró los boletos para la función de la 1:30. Nos quedaba un poco menos de media hora para comprar los snacks que íbamos a meter a la sala.
Para ser sincero, no se me antojaba nada más que el Ice de la dulcería.
