Vendi mi alma por ti, cariño -Tom Kaulitz

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Pasaron los días y Tom y yo éramos esa pareja imperfecta.. él completaba también conmigo, sus pensamientos mafiosos eran parecidos a los míos él decía algo y yo lo completaba. Solo éramos 1 solo.

Podía ver a mi hermoso hombre tomar de mi mano a todo los lugares que íbamos, el con su aspecto espeluznante que atormentaba a toda una multitud no me alegraba ver a Tom ser lo que era pero podía estar segura que su corazón es mucho muy diferente a lo que se ve por fuera, sus ojos siempre me demostraban frialdad pero sus abrazos no, ellos lo delataban. Tom no me mato, pero gano algo más mi corazón, y una promesa. Sentados mi amado y yo hablamos de las cosas que pasarán.

—Megan, necesito saber que pasará con todo lo que construiste algún día. —toma de mis ambas manos, se pone fijamente frente mío y yo frente de él.

—No lo sé Tom, probablemente continuaremos con todo esto, no te puedo evitar de algo que siempre a sido tu vida. — bajo un poco mi mirada, levantó mi mirada y sus ojos me ven fijamente —Es lo que de verdad quiere, siempre has querido desacerté de todo— lo veo —Lo sé pero mi vida ya no es solo mía, si no que tuya también y estaré de acuerdo en la decisión que tomes— sonreímos ambos y me recosté en su pecho, él pasaba su mano sobre mi cabeza yo lo abrazaba y él asía lo mismo.

Andreas
—Darán de alta a Sarah, entra ala habitación agitando respirando fuertemente.

Salimos de la habitación, estaba angustiada por ella, necesitaba tenerla en mis brazos, sabía que Sarah no merecía la clase de madre que soy, pero trataría de recompensar el tiempo perdido. Llegamos al hospital Sarah se dio de alta la lleve ala Manzini la verdad a ella no le gusto mucho la idea de que yo anduviera con Tom por todo lo que pase con su padre pero lo acepto por que era mi vida, ella solo me decía que si yo era feliz todo estaría bien, Sarah era mi más grande regalo, lamentablemente no lo pude ver de joven hasta ahora en la fecha actual.

Tom
—No seré tu padre, pero te brindaré mi protección y mi apoyo cada que lo necesites, y si se meten contigo se meterán conmigo sin importar que suceda o que pase.— toma las manos de Sarah  y la ve a los ojos con gran seriedad, ella solo inclina su cabeza frente de él.

Salimos de la habitación donde se sopesaba para que pueda descansar , Bill me vio fijamente tomada de la mano de Tom. — Ahora eres Kaulitz Megan? — se ríe con fuerza mientras aplaudía sarcásticamente. Sigo caminando pero Tom se queda con él hablando de negocios. Alguien tocó el timbre desesperadamente. Me dirijo abrir la puerta rápidamente y al abrir era Katashi.

Avienta la puerta sin yo darle el pase —Donde está Sarah?, cómo estás. Puedo verla!— gira y voltea asía alrededor su respiración era alterada.

—Está arriba relájate. Cierro la puerta tranquilamente y su expresión es exaltaba.

—No puedo hacerlo Megan, quieres que me quede sentado mientras matan a Sarah?, ese es tu plan?, Sarah no puede quedarse contigo, llegamos el primer día y nos secuestraron. Me ve y empieza a exaltarse extendiendo sus manos de lado a lado asiendo movimientos para al final ponerlas sobre sus caderas.

—Pero ni siquiera yo sabía del secuestro, no sabia absolutamente nada, no me culpes. Tom y Bill arriba del balcón nos empieza a ver discutir.

—Tu eres una persona demasiado poderosa Megan, cualquier persona quiere el poder que tienes, todos quieren darte en el ego, y ya descubrieron tu debilidad, y Sarah es el objetivo. Abre los ojos de una puta vez!— empieza a gritar

—Pero eso ya cambió, seré persona diferente Katashi, quiero recuperar el tiempo perdido con ella.

—No quieras jugar al juego de la casita feliz, no importa que hagas que no hagas, eso siempre te seguirá toda la vida no puedes desaserte de todo esto así de la nada. En Japón no pasaba este tipo de cosas, por eso me llevare a Sarah lejos de ti. Apunta con su dedo asía mi y después al suelo mientras me gritaba.

—No vengas a soltar tu maldito veneno aquí Katashi, respeta mi casa y a mi mujer. —Tom venía bajando y su grito me puso la piel helada, se mostró muy robusto y molesto.

—El payaso del circo, que ridiculo te vez alado mío Kaulitz no tiene nada de lo que yo, es como que te pones a jugar al mafioso, o me equivoco?— se ríe y me voltea a ver mientras extendía sus brazos asía arriba y daba una vuelta.

— Ve ahora quien es el ridiculo, que está dando vueltas como estupido en mi casa, que le tiene miedo a Megan?, Ja!— se rio y aplaudió con sus manos mientras se colocaba lado mío.

—No vine con ustedes a perder el tiempo quiero a Sarah. —Sarah no ser ira de aquí Katashi, Sarah es hija de Megan, y ya es hora de que esté con su madre. Se enfureció y corrió asía las habitaciones de arriba. Tom fue detrás de él y yo detrás de los dos.

Entramos los 3 ala habitación donde se quedaba Sarah y ambos salimos de ahí sin hacer ruido.

—Eres un idiota Katashi.

—Megan ten mucho cuidado!, pronto vendré por Sarah es mi hija y ni tú aunque seas el diablo echo persona me impidira volver a estar con ella— se hirió y se fue mientras su mirada al dar vuelta me comía el alma.

Tom me abrazo una vez más. —No tengas miedo Sarah ya es grande para que elija estar donde ella quiera. — lo veo a los ojos casi a punto de llorar —No conoces a Katashi ni siquiera a mi Tom— me solté de sus brazos y camine recta mientras trataba de no lagrimear. Él se quedó solo viéndome fijamente mientras me marchaba.

Llegue al balcón donde usual mente me la pasaba, tome un fuerte suspiro de aire vi todo a mi alrededor de mi ojo solo lagrimeo sabía que Sarah tarde o temprano se iría de mi lado y no por qué ella quisiera si no por que su padre lo aria de todas las formas posibles él tiene la custodia de ella, y él tomaría como ventaja el que yo estuviera en la cárcel y sea una persona mala, solamente tenía que acceder a lo que él quisiese, respiré con fuerza, y solté el aire al salir solo podía pensar que Tom y yo ahora éramos como las estrellas de este maldito lugar.

Holi..
Estoy seca de lectura, estoy sin ideas, estoy muy confusa, hace tiempo que le deje de tener amor a esta historia, por que nadie la leía, y estoy muy emocionada de que la lean y les guste, déjenme pensar necesito acomodar mis ideas, y recordar.