Go Hard | Lucemond

09.

Este va a ser un capítulo basado en Rhaenyra y Alicent, desde su niñez juntas hasta ahora, siendo adultas.

Si no les gusta el Rhaelicent pueden saltearse está parte, aunque apreciaría mucho si lo leyeran. Tambien van a explicar algunas cosas que ayudarán en la trama de la historia.

Disfruten el cap!!

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La princesa Rhaenyra tenía 8 años cuando la conoció. Lady Alicent tenía 10 años.

Cuando se conocieron, ambas se llevaron muy bien, hablaron, se hicieron peinados y hicieron todo tipo de cosas.

Otto quedo encantado al ver cómo su hija y la princesa se llevaban tan bien, terminaban sus frases y apenas conociéndose eran como almas gemelas. Los Hightower quisieron aprovecharse de eso, viendo como ambas menores se miraban y se reían, querían proponerle una unión de casas a el rey.

La reina Aemma le parecía una buena idea, ya qué, Lord Otto tenía razón, ambas niña eran adorables juntas y su pequeña niña se veía feliz. Pero, el rey, no quiso aceptarlo, puso una escusa de que ya tenía un buen pretendiente para su hija y algunas cosas más.

Los años pasaron, Alicent ya había cumplido los 17 y Rhaenyra tenía 14,cumplirá los 15 dentro de 3 lunas. Los Hightower aún trataban de convencer al rey de que Lady Alicent era la candidata perfecta para su hija, pero él no escuchaba.

Llegó un día, el día de la muerte de su querida madre, Aemma. Por la culpa de la avaricia de su padre al querer a un varón en el trono. En ese momento Lady y princesa se volvieron más unidas, pasaban juntas y no se despegaban.

La princesa Rhaenyra y Lady Alicent, un día, estaban en la habitación de la princesa, peleando con almohadas. Terminaron con Alicent encima de la rubia y ésta con la cara roja contra la cama. Se besaron, con un simple beso, se dieron cuenta de muchas cosas.

De ahí, empezaron a besarse a escondidas y a compartir un montón de cosas juntas. Rhaenyra soñaba con que algún día, ambas volarán en Syrax comiendo pastel, casadas por un antiguo ritual Valyrio. Alicent se había imaginado todo una vida con la Targaryen. Se imaginó a Rhaenyra cargando un hijo suyo, casándose en la fe de los siete,teniendo muchos más hijos con esa preciosa Omega y marcandola como suya.

─Nyra, amor.. Eres lo más bello que me ah pasado...

Un beso.

─Ali...eres el amor de mi vida, jamás dejaré de amarte y les daré de comer a Syrax a las personas que se atrevan a hablar mal de ti, mi dulce alfa.

Otro beso.

Se besaron tanto tiempo, tanto que empezaron a calentar su ambiente. Hicieron lo que no debieron y no se arrepintieron.

El rey al enterarse, empezó a hacer reuniones para un futuro Alfa para su linda niña.

Otto, al ver que el rey no cedía, decidió mandar a su hija a seducir al rey. Alicent no quería ni debía, pero lo hizo y el rey se dejó.

Rhaenyra no había aceptado a ningún pretendiente solo para jurarle su amor a su reina, pero la chica estaba distante de ella, ni siquiera se vieron desde que empezaron las reuniones. La rubia lloro noches seguidas por la falta de distancia con su alfa, pero se dispuso a hablar con ella.

Trataba de encontrarla por todo el castillo y no había señales de ella. Se había cansado. Se dirigió a los aposentos de su padre, tenía que preguntarle a él donde estaba ella.

Pero..

A medida que se acercaba escuchaba ruidos, ruidos que ella conocía.

Asomó su cabeza por la puerta y ahí vio todo. Vio a su maldito padre el rey Viserys, cojiendose a su puta alfa Lady Alicent.