Rain

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Seguía abrazando mis piernas con fuerza, mientras los recuerdos visitaban mi mente y se apoderaba de ella.

Me sentía como si estuviera callando de un pozo, mientras todo a mi alrededor eran aquellos recuerdos, de esos viejos que arruinaron mi vida. Deformaron mi sentido de ver las cosas. Quienes eran los culpables de mi depresión, de mi ansiedad, de mis inseguridades.

Me estaba hundiendo poco a poco, hasta que llamaron a la puerta.

—¿Rain?— llamo mi madre a la puerta. Me levante rápido apague la luz y abrí la puerta

—¿Si?— vi a mi madre entrecerrados los ojos, fingiendo que ya me estaba durmiendo.

—Hay... te desperté

—No te preocupes, ¿Qué pasa? — la mire, mientras escondía algo detrás de ella.

—Vino tu amiga Lizzy hace rato y te vino a traer esto— me tendió un libro que ni si quiera lo vi.

—Gracias— fingí un bostezo — Bueno ya me iré a dormir.

—Okey... pero, ¿Estas bien?— hizo una pequeña pausa — ya sabes, lo de la noticia de hoy.

—Lo estoy, no te preocupes, pero ya debo dormir. Buenas noches

Le di un beso en la mejilla, que de igual manera me lo devolvió y cerré la puerta. No revise ni si quiera de que era el libro y lo deje en el escritorio.

Com dificultad logré llegar a mi cama, mientras mi corazón bombeada a toda velocidad.  Estaba cayendo de nuevo. Sentía que me faltaba el aire, mientras a mí al rededor solo podía ver visones de lo que había pasado.

Esa noche no logré dormir, nada, ni un solo minuto. Sonó la alarma de mi celular que en seguida la apague.
Me levante de la cama y como pude llegue al baño, quitándome la ropa y metiéndome a la regadera, hasta que sentí como el agua fría iba cayendo sobre mi espalda. Cerré los ojos y el agua fría hizo que me relajará un poco.

Termine de bañarme y salí del baño ya con el estúpido uniforme puesto. Tomé mi mochila y salí de casa sin desayunar.
En cuanto salí de casa el viento uso el trabajo de despeinarme pero me dio igual y empecé a caminar hacia el instituto mientras los pensamientos atacaban mi mente de una manera descarada.

Creo que el mayor enemigo de todas las personas, son nuestros pensamientos. Esos pensamientos que envenenan el alma. Y bloquean nustra mente y que aunque tratemos de enfrentarlos, el intento es nulo.

Llegue al instituto y ne adentre caminando hasta el aula de clases, y al parecer nadie más había llegado, solo era yo. Saque una libreta y empecé a dibujar, para tratar de mantener mi mente enfocada en otra cosa, pero no logré nada, más que terminar rayando y rasgando toda la hoja. Hubiera continuado pero alguien me detuvo. Era Connor, tenía una cara de preocupación, peor que la de mi madre.
Y fue peor cuando vio mi rostro.

—¡Mierda! ¿P-pero que te paso?— pregunto con preocupación.

—¿Porqué lo dices?

—¿Acaso no te has visto en un espejo?, ¡pareces un panda! Vamos al baño.

No espero a que respondiera. Y me llevo directo a los sanitarios y joder, tenía razón, las ojeras eran visibles ante cualquier persona.

—Es claro que no dormiste pero...— se aclaro la garganta— ¿Porqué?

Dude un momento si en decírselo. El solo sabía una pequeña parte de lo que había pasado. Así que solté un suspiro y lo mire con una mueca.

—M-mis abuelos paternos...

—¿Los de hace dos años?— asentí con la cabeza— ¿Porqué no me mandaste mensaje?

—Porqué... no quería hablar con nadie. Ni siquiera podía pensar..  con trabajos logré llegar a mi cama.

—A ver Rain, no puedes fingir que todo esta bien, cuando en realidad estas echo una mierda— me miró serio.

—Lo sé...—mire mi reloj y lo volví a mirar— debemos regresar... ya solo faltan unos minutos para que inicie la clase.

—Esta bien... pero esta platica no ah terminado.  Vamos.

Salimos de los sanitarios, y nos dirigímos al aula, pero claro, este día al parecer sería un completo desastre, y lo supe en cuanto vi a dos idiotas pegando una goma de mascar en mi mochila.
Pero eran, los tipicos idiotas que se sentían dueños de toda la escuela, asu que mejor decidu no decir nada, aunqur a Connor le molesto, porque decia que tenia que aprender a defenderme, a dejar de ser el tapete de todos y mostrar quien era realmente. Pero solo asenti con la cabeza. Quitar la goma de mascar de mi mochila con una hoja de cuaderno y segui como si eso no hubiese pasado.

Llego la hora del almuerzo, y honestamente no tenía nada de hambre, sentía nauseas. Monty estaba comiendo unas uvas, mientras Connor solo tomaba una soda. Estavamos en silencio y eso era un problema para mi, porque me dejaban a solas con mi mente... pero gracias al cielo, Monty rompio el silencio.

—Y entonces ¿Hay alguna chica que les guste? — sonrio divertido, mirando a Connor, quien en seguida respondio.

—Tal vez.

— y tu ¿Rain?

—Yo... no, por ahora no estoy listo para una relacion, ni si quiera hay alguien que me interese.

Había algo que ellos, ni mis padres e incluso mi mejor amiga no sabían, y es que yo soy gay, aunque tampoco yo se miy bien si lo soy. De echo es por ello que aun no me atrevo a decirlo y por el miedo de ser juzgado.

—Y a ti Monty, ¿Te gusta alguien?— sonrio y asintio con la cabeza.

—Tengo a muchas personas detras de mi— presumio, pero su sonrisa no le duro mucho porque Connor y yo intercambiamos miradas y nos empezamos a abrir abiertamente de el

—Eso ni tu te lo crees, eres tu quien va detras de todas— dijo mientras aun se reía y Monty parecia ofendido

—Apoyo a Connor— mencione— desde que entre a esta escuela siempre te eh visto detras de variaa chicas y rechazado por todas ellas.

— ¡E-eso es falso!— dijo poniendo los ojos en blanco— mejor cambiemos de tema.

—Rain y yo ya nos vamos le tengo que decir algo— lo mire confundido, a lo cual respondio con una mirada que me decia "vamonos", asi que me levante y fui hasta su lado.

—Yo voy con ustedes...— y fue interrumpido por connor que respondio serio y cortante que me hizo estremeser.

—No.
Empezo a caminar y me despedí de Monty empezando a seguir a Connor, quien me guiaba hasta las canchas de basquet ball y llevarme hasta las bancas.

—Necesito de tu ayuda— dijo seriamente.

—¿Sí?

—¿Conoces a Kara?— asenti con la cabeza— bueno, ella y yo llevamos meses hablando y bueno, es una chica realmente linda, tierna, enojona y cuando estoy con ella me siento realmente bien, la veo y todo dentro de mi tiembla. Me gusta— dijo con sinceridad, y lo se porque mientras hablaba de ella, sus ojos brillaban y jamas había visto a Connor de esa manera, expresandose de alguien asi como menciono a Kara.

—Me le quiero declarar, le quiero pedir que sea mi novia.— sonreí, porque me gustaba verlo feliz, ¿Quíen no se alehraria por ver a su mejor amigo feliz?— y quiero saber si puedo contar contigo...— esta vez yo lo interrumpi.

—¡Claro que te voy a ayudar!, solo dime en qué, como y cuando— el sonrio agradecido.

Me empezo a decir todo el plan, al parecer queria hacer su declaracion en un parque al cual ellos dos solían ir saliendo de la escuela. Dijo que para el ese lugar se había vuelto especial y unico, así que decidio que ese seria el lugar perfecto. Al parcer todo esto se aría el 7 de Noviembre.
En 2 semanas y media.

the ruins of the pastDonde viven las historias. Descúbrelo ahora