the ruins of the past

Rain

Me había quedado dormido un rato despues de estar un rato viendo mis redes sociales.
Pero en cuanto desperte tenia lagrimas recorriendo mis mejillas y mi frecuencia cardíaca acelerada.

-J-joder... de nuevo ese sueño.- aunque sabía que no era un sueño, era un recuerdo- no puedo seguir así...

Golpe la pared con fuerza, mientras las lágrimas caían humedecido la cobija de mi cama. Trate de relajarme, pero, la suerte me había abandonado desde hace mucho tiempo. Mi celular empezó a sonar y en la pantalla se veía el nombre de mi madre, así que tome el celular y contesté.

-¿Si?- dije fingiendo una voz tranquila y relajada

-¿Rain?, vístete elegantemente ¿okey?- di una sonrisa, por un momento pensé que saldríamos a cenar al barrio chino al que tanto me gustaba ir pero, era demasiado ingenuo.- Hoy llegan tus abuelos paternos.

La sonrisa que se había dibujado en mi rostro desapareció de inmediato.

-Okey... t-te veo en un rato- dije y colge la llamada.

Mi madre sabía solo una pequeña parte del infierno que viví... solo sabía que me hacían sentir mal con insultos y las comparaciones que llegaban a hacer, pero jamás se entero de los golpes...

Me metí a la regadera y de nuevo me di un baño con agua fría... era la única manera de calmar mi ansiedad...
Después de aquel baño, saque un traje negro y una corbata color rojo obscuro, para después verme en el espejo, inseguro de si me veía bien o no...

Tome el móvil y le marque a Connor, ya que Lizzy en estos momento estaría en clases. Y al tercer tono contesto.

-¿Qué quieres mendigo pulgoso?- con tan solo escuchar su voz me tranquilizó un poco.

-Hoy llegan...-hice una pausa pero al parecer entendió a quienes me refería.

El tampoco sabía del todo lo que pasó en el pasado, sabía lo mismo que mi madre, pero el sospechaba que escondía algo más...

-Oh no... aver Rain, antes que nada ¿Cómo estás? Se que la respuesta es más que obvia porque si no, no me estarías marcando pero, quiero escucharte.

-Estoy nervioso, estoy tenso, no sé qué hacer, ya me di un baño con agua fría, ya me vestí pero me siento inseguro- hable tan rápido que no se realmente si me logro entender.- tengo miedo a que vuelvan a hablar mal de mi Connor... como siempre...

Al otro lado de la línea se escucho un suspiro pesado y una pequeña pausa antes de contestarme a lo que le acababa de decir.

-Aver Rain Miller Katz... alias el pulgoso, tu debes sentirte seguro de ti mismo, que te valga todo lo que tu familia piense, solo tu sabes si hacer caso o no. Tu eres grandioso pero sigues con esa venda que ellos te pusieron,  para cegarte y no dejarte ver quien eres en realidad, solo... tienes que quitartela- iba a decir algo pero me interrumpió- se que no es fácil pero todo llegara a su tiempo pulgoso. ¿Okey? Y cualquier cosa sabes que puedes llamar a este número.

Sonreí, vaya que Connor Erkai Nines, sabía como hacerme sentir mejor o mínimo sacarme una sonrisa. Connor me llama pulgoso debido a mi apellido, Katz que suena a cat, gato en inglés  y dice que los gatos son unos pulgosos y de ahí mi querido apodo.

-Esta bien... gracias, en verdad- suspiré un poco más tranquilo- por cierto te iba a decir al...

‐¿Rain?

-Han llegado,  tengo que colgar...- y así fue, colgué al escuchar el timbre sonar y ver el auto de mi padre estacionado en frente de casa.

Los nervios de nuevo empezaron a salir a flote, mientras caminaba asía la puerta para poder abrir, pero entre más me acercaba sentía a mi corazón queriendo salir de mi pecho. Quedé frente a la puerta y solté un suspiro y me puse aquella máscara con la que fingía estar bien mientras me destrozaba por dentro. Tome la manija de la puerta y la abrí.

Y aparecieron dos rostros que conocía a la perfección, aquellas dos personas que acabaron con mi felicidad siendo apenas un niño, aquellas personas que se encargaron de destrozar al pequeño Rain que solo quería ser apoyado, al Rain que solo quería un abrazo... y que ahora solo había un Rain fracturado, usando una máscara donde fingía que todo estaba bien y todos lo creían. Al parecer logré dominar el arte de la mentira, de la actuación y podría usarla ante cualquier situación... pero ¿De que servía? Si ya ni si quiera sabía quien era en realidad..