Spy x Family | One-Shots

III - Enamorado Tuyo

Y si te parece que yo estoy enamorado tuyo...

"Eso es un invento, intuyo..." Pensó al unísono con la radio una mujer de blancos cabellos, bebiendo de su segunda taza de café de aquella lluviosa mañana mientras veía fijamente el periódico del día.

Fiona Frost, una espía de WISE haciéndose pasar por doctora en el hospital general de Berlint que disfrutaba las tardes lluviosas de otoño.

Agente Nightfall, una enamorada no correspondida, que odiaba la lluvia.

Veía la foto del objetivo de la operación STRIX en el diario, apretando con su pulgar justo entre las cejas de la imagen de Donovan Desmond. Aquel monstruo que amenazaba con iniciar la guerra con Westalis, que la tenía metida en aquel embrollo... Y que tenía a su amado jugando a la casita con una rata de pelo rosa y una incompetente esposa.

"Donovan Desmond dará un comunicado público hoy..." Leyó el subtítulo del reportaje tras relajarse un poco. Llevó la taza a sus labios nuevamente, tardando unos pocos momentos en beber un sorbo del bendito café. La mujer sabía que no era su responsabilidad encargarse del asunto, y que su verdadera misión estaba en manos de un encubierto en camino a aquella cafetería, pero no podía evitar sentir una profunda ira en su interior cada vez que recordaba aquella estúpida operación. Madre de sus conflictos y origen de su reciente ineficiencia.

No podía negarlo; sus inseguridades con respecto a su amado Twilight la habían vuelto torpe. Más explosiva, más directa; más predecible. Más manipulable que nunca. La idea de acabar con la operación STRIX de forma externa era tentadora; acabar con Donovan Desmond y derrocar sus planes de conflicto internacional cada vez sonaba mejor en su cabeza. Era perfectamente capaz de ello, pero...

"Acabar con Desmond sólo cambiará el nombre del que debemos investigar."

Las palabras de su amado resonaban en su mente, cada una de las cientas de muertes imaginarias que se inventaba para Desmond. Handler se lo recordaba cada que le pedía ir por la cabeza de ese bigotudo; es un proyecto colectivo. Twilight es el indicado para la infiltración en el colegio Edén, porque lo que necesitan es información.

Como si saber del imbécil fuera a resolver la guerra...

"Raramente desespero, por tenerte aquí a mi lado..."

-Y eso no significa que tenga un significado - el canto de Fiona era apenas audible, y luego fue interrumpido por otro sorbo de café. Tantas veces había escuchado aquella canción, sea en la radio o de pasada en el escritorio de algún compañero de trabajo. Para una amada no correspondida, ya había pasado del punto de la molestia.

Fiona sólo cantaba por lo bajo; Nightfall se deshacía en lágrimas al oír el coro.

La albina alzó la vista del periódico para buscar con la mirada a alguien cargando con el mensaje del cuartel general, pero no vio nada. Cada minuto de espera era una forma de torturarse en sus propios pensamientos, recordando la sonrisa de Loid Forger al ver a su mujer servirle café, o abrazando a su hija adoptiva. Trataba de mentirse a sí misma, de pensar que la actuación de Twilight era simplemente tan perfecta como para formar una imagen de padre de familia modelo.

Pero sabía que hasta el mejor mentiroso que conocía, sabía cuando decir la verdad.

La imagen le hacía daño. La perfecta sonrisa de su amado junto a otra mujer era tortuosa para Nightfall, pero no había mucho más que hacer al respecto.

-Casi nunca nadie dice que yo estoy enamorado tuyo...

-Disculpe, señorita... ¿No va a querer otra taza de café? - la voz de la mesera la devolvió a la realidad, notando el sonido de la canción volver a ser opacado por la estática y por las gotas contra el ventanal.