Cartas Anónimas.

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Febrero 15, 2015.

Era un día helado pero eso no impidió a Ashton en comprar algo para la chica. Aunque no tenía ni una idea de que le podría gustar.

El llevaría algo sencillo y pensó que un collar sería perfecto así que tomo uno plateado con un pincel en medio.

Pago por el, y compro una cajita para cubrirlo, por lo que sabia, el cumpleaños de la chica podría ser cualquier día de estos así que dejará el regalo hoy en la noche, y posiblemente, al momento de dejar la carta anónima, ella recojeria el pequeño obsequió.

No sabia porque se sentía tan emocionado, talvez el hecho de que alguien tuviera tanta confianza y tantos sentimientos hacia el, lo hacían sentir alagado.

Camino devuelta a sí apartamento, eran las 7 de la tarde y rogaba al cielo de que todavía no hubiera llegado su carta, así tendría tiempo de posicionar todo en orden.

Con suerte, no había nadie afuera en el pasillo, y era normal. Solamente vivía el, y otros dos chicos a lo largo de este piso, era demasiado tranquilo y eso le agradaba.

Abrió la puerta y antes de entrar suspiró y miró al suelo.

No había carta, eso lo hizo sentir bien.

Entró rápidamente, y pensó en esta vez contestar su carta, nunca lo había hecho porque ella siempre lo dejaba sin palabras con todas las confesiones y tristes palabras.

Pensó por varios minutos hasta que por fin encontró las palabras, nada comprometedor ni exigente, solo agradecido.

Hola,
Durante estos meses, una de mis mayores preguntas y curiosidades han sido tu identidad, pero no te preocupes, no te forzare a darmela.
Esta carta es en respuesta a todas las demas, gracias. Gracias por confiar en mi, y por no sólo verme como un chico mas, sino como una persona con un alma, tus palabras me han hecho pensar diferente de mi y te lo agradezco. No se cuando sea tu cumpleaños pero hay un pequeño regalo de mi parte, se que no la has estado pasando muy bien y eso está mal :-(, si tan siquiera me dijeras quien eres talvez te podría ayudar, y siempre leo tus cartas, de hecho las tengo todas, nunca las tiro, y nunca me molesta leerlas, de hecho las espero con ansia.
Ten un buen cumpleaños.
-Ashton.

Leyó una y otra vez el papel hasta que se sintió seguro de su escritura y corto mensaje, no quería presionarla a revelarse pero quería que ella sintiera que el no la juzgaria.

Abrió la puerta y tomó el obsequió, rezaba que nadie lo robara, aunque aquí casi nadie era así.

Puso la pequeña caja debajo del sobre y cerró la puerta. Ahora había que esperar.