La Liberación del Instinto [Jinx/Omegaverse]

2: Refugio

Dan limpiaba sus manos distraídamente. Por dentro, estaba muy feliz de escuchar en el gimnasio que el Alfa Joo había vuelto de su último viaje.

Ni siquiera sabía que estaba en un viaje.

Tantos días creyendo que había molestado tanto al Alfa para que ni siquiera quisiera aparecer por el gimnasio y culpandose por eso. Sabía por sus propias observaciones que a Joo Jaekyung le encantaba practicar boxeo. Se la pasaba todos los viernes entrenando y notaba como se divertía con eso. Pero también pensaba en el por qué se molestaría con él. No es como si fuera alguien importante para el Alfa.

Sus manos estaban brillosas por del aceite para masajes y solo después que el brillo desapareció se giró hacia el Alfa Joo y entonces notó la mirada extraña que le estaba lanzando. Cuando se acercó lo suficiente a él para preguntar si necesitaba algo lo tomaron del brazo con una fuerza que lo hizo quejarse del dolor y comenzó asustarse tanto que se quedó inmóvil viendo a los ojos del Alfa que estaban más enojados por cada momentos que pasaba.

─ Quítate el pantalón.

Dan entonces comenzó a sudar frío. No de nuevo por favor. Sus ojos no pudieron ocultar sus lágrimas y con sus labios temblando murmuró suavemente.

─ Alfa...

─ ¡Que te quites el pantalón!

Tras el repentino grito no pudo moverse, solo sus piernas que comenzaron a temblar tanto que temía caer de rodillas. Sus labios apretados en una línea forzandolos a no crear una mueca que haga enojar más al Alfa.

─ Si no te quitas el pantalón en este momento te lo arranco.

Tras la amenaza del Alfa Joo, Dan llevó su mano libre a sus pantalones, pero no se lo iba a quitar. Lo observó a los ojos con una mirada firme.

─ Suélteme.

Una mirada que hizo a Jaekyung soltarlo, sólo entonces notó la fuerza con la que estaba sosteniéndolo. Jaekyung observó de reojo el brazo y una marca roja comenzaba a formarse. Le exigió furioso intentando suprimir su rabia.

─ Entonces dime por qué cojeas.

─ Me... ─ Dan sostuvo su brazo mientras lo veía a los ojos, sus lágrimas bajando por sus mejillas, sorbió sus mocos y le dijo de manera firme─ Me caí rodando por unas escaleras desde el segundo piso de una casa. Y eso no es motivo para que me exija y amenace. ¡No sea entrometido!

Jaekyung se puso de pie y Dan lamentó inmediatamente decirle aquello. Este Alfa media casi dos metros y él apenas alcanzaba a llegar a sus hombros. Si se atrevía a golpearlo o a hacerle algo entonces estaría acabado. Inmediatamente comenzó a disculparse en un nervioso intento de apaciguar su furia.

─ Alfa... Yo... Lamento haberle gritado.

Jaekyung al ver lo lamentable que el Omega se miraba, le dolió el corazón y no comprendía el por qué. Pero no cambió sus palabras. Por lo que cuando notó a Dan dar un paso hacia atrás tan lentamente que apenas pudo verlo le dieron ganas de apretar el puente de su nariz de lo irritado y molesto que estaba.

─ Estás cojeando, quiero que te quites el pantalón.

Dan seguía sin moverse más allá de ese único paso hacia atrás, Tenía tanto miedo que ni siquiera estaba escuchando correctamente. En su cabeza se insultaba grandemente por hacer enojar nada más y nada menos que al Alfa de la Manada. Su nivel de estrés estaba por los aires por lo que sintió náuseas y sentía que podría perder la conciencia en cualquier momento.

El abundante aroma rancio invadió el pequeño cuarto que quedaba detrás del salón de yoga. Todos se habían ido y si hubiera alguien tal vez estaría lejos de ese pasillo. Dan comenzó a imaginar que si gritaba por ayuda, nadie lo vendría a rescatar por que quien lo puso en esa situación fue el propio Alfa y nadie quería enfrentarse al Alfa si no quería consecuencias graves.