۵ Capítulo siete ۵

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7||Las consecuencias de tomar decisiones que hacen cuestionar a Jesús si no nos urge un diluvio.||

"Vamos a encontrar una luz en el interior de nuestro universo ahora. En donde nadie nos pueda inferiorizar. Solo ven y toma un poco, deja que ellos digan lo que quieran."
Ariana Grande - Focus.

Acabo de cometer la estupidez más grande de mi vida

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Acabo de cometer la estupidez más grande de mi vida.

Esto no es una pregunta, es una realidad. Una de la que estoy muy consciente, muchas gracias.

Me pasa por impulsiva por supuesto, mi madre me ha advertido toda la vida desde que aprendí a hablar, que no controlar mis impulsos idiotas me llevará a darme de golpes contra una pared.

Una pared no es suficiente en este momento, necesito un maldito muro con clavos incrustados.

Estoy exagerando, claramente, no deseo sacarme un ojo.

Eso no es lo peor, no, lo más horrible de todo, es que se me ocurrió besar a Mattia en medio del maldito pasillo para que hasta la principal se enterara, y ahora el móvil se me está sobrecalentando por la cantidad de mensajes que Hayes me envía por segundo.

Hay foto, así es, claro, por supuesto que la hay, algún ser del diablo nos tomó una estúpida fotografía en el precioso momento en el que Straxford me recargó en los putos casilleros y la subieron a la cuenta de Instagram de Billiard con la descripción: "La chica indomable y el chico más solicitado acaban de confirmar su relación. Esa no me la vi venir ni yo."

A ver si se ven venir una patada de mi parte, digo, para ver si se les quita.

El día que descubra quién o quiénes están detrás de esa maldita cuenta, voy a ir a la cárcel y con mucho gusto.

Posaré para mis fotos de presa con una sonrisa, ya verán.

A mi hermano le va a dar un paro cardiaco y no es el único.

Ezra está frente a mí, pálida, con un gesto que se parece mucho al de la constipación y tiene la boca abierta.

Así que como la buena y considerada mejor amiga que soy dirijo la mano hacia su barbilla para cerrársela, no quiero que le entre una mosca, se la trague y muera.

¿Finjo que estoy relajada? Evidentemente, por dentro estoy pateando mi cuerpo hasta que decida pedirme clemencia.

Soy mi propio verdugo.

¡Carajo! ¿En qué coño me metí?

—Dorothy Alliseth Barbsnight.

¡Ah mierda! Acaba de decir mi nombre completo, es mi puto fin.

Ojalá que mi madre elija un bonito ataúd y un excelente atuendo para mi entierro, porque de las gradas no bajo viva.

—Ezra... no es...

Al final del día Donde viven las historias. Descúbrelo ahora