Capítulo11

1 0 0
                                    

-No puedo creerme lo que acabas de hacer.-Anakin vino hacía mí con una gran sonrisa como todos los demás al acabar de cruzar el portal y cerrarlo de una vez por todas, realmente me sentia muchísimo mejor pero no sabía que era aquello que me havia pasado pero lo bueno es que todos ellos estaban a salvo y que una vez más derrote a Kyoto, esperaba que fuera suficiente para el gran día.-¿Elisabeth cómo activaste tus poderes de hada guardiana?-La verdad es que no lo sabía y se lo conté a todos pero era una sensación totalmente nuevo y que no creía posible para nada, yo una hada guardiana realmente era impresionante todo aquello pero no sabía como desactivar esos poderes.-Realmente estoy seguro que nuestros padres estarán orgullosos al ver lo que conseguiste, nadie durante siglos ha conseguido activar esas tres transformaciones y mucho menos a la vez como has hecho tú.-Eso me hizo muy contenta porque realmente quería terminar con todo esto de una vez por todas y volver a estar al lado de mis padres ya que porfin estaríamos todos juntos y no permitiría que nadie más se atreviera a separarnos otra vez.-Creo que es hora de ponernos a buscar los horrocruxes que faltan de una vez por todas pero antes creo que algunos deberemos ayudar a buscar sitió a todos ellos. ¿No crees Elisabeth?-Asentí con una sonrisa ya que todos aquellos niños y niñas se veían totalmente impresionados y felices de estar a salvo de las manos de Kyoto pero al igual que los profesores, Luke no estaba para nada bien ya que no había respuesta sobre su estado según Deku quién lo estaba atendiendo cuidadosamente a la perfección así que me lleve a los niños hacía una gran habitación que me indicó Ahri donde estarían todos ellos juntos

-Estoy deseando ser una hada guardiana como tú y llegar a conseguir las mismas transformaciones que has invocado tú.-Esa niña pequeña de cabello azul oscuro atado con un moño alto y de piel rosada parecía muy contenta la cual parecía tener unos cinco años pero así, le pregunte que tipo de poderes tenía ella y si me podía hablar un poco más sobre que significaba ser una hada guardiana como se suponía que era yo.-Puedo controlar todos los líquidos sobretodo el agua y hablar sinfonicamente con los animales, soy una Selkie música acuática gracias a mis padres ojalá ellos hubieran estado aquí para verte seguro que se hubieran quedado impresionados. Una hada guardiana es aquella que ha nacido con tales poderes que son los más poderosos de su especie y tú tienes los poderes más poderosos que he visto nunca y bueno una selkie como yo somos pequeñas sirenas, hadas y ninfas que nos podemos enlazar con alguna hada mayor y poderosa para ayudar y aprender de ellas.-Laila hablaba realmente emocionada al igual que todos sus compañeros sobre el tema hasta que llegamos al dormitorio donde debían quedarse para poder descansar y recuperar fuerzas ya que después de todo, solo eran niños de diferentes edades pero aún pequeños y indefensos para ponerse en peligro.-Elisabeth estoy segura igual que todos los demás que conseguirás vencer a Kyoto y mucho más ahora que eres una hada guardiana, ten es un frasco de polvo de hada puede reparar cualquier cosa y si es bien usado puede ayudarte a poseer nuevos poderes se que una hada tiene que ganárselo pero apareció en mis manos cuando acabaste de transformarse y salvarnos a todos.-Sonreí para después darle las gracias a Laila quién me entregó un frasco en forma de corazón azul con un cubo verde brillante a su alrededor el cual se integró como si nada en mis alas, Laila no parecía una niña de cinco años por el hecho de que era muy madura para su edad pero supongo que la muerte de sus padres le havia hecho hacer aquel cambio

-Veo que ya no tendrás que ponerte ese traje que nos enseñó Ahri pero de igual manera, creo que nunca podré acostumbrarme a tus transformaciones ya son demasiadas pero eso es bueno porque cada vez eres más poderosa y podremos vencer mejor a Kyoto.-Regrese con todos los demás aún con aquella vestimenta que havia aparecido al invocar inesperadamente para enfrentarme a Kyoto pero estaba cómoda con aquello después de todo aunque no era momento para pensar en eso así que les explique lo que me havia dado Laila no hacía tanto y sus cara se tornaron como si hubieran visto a ya saben quién detrás de mí.-Invocaste aquellos poderes pero también el Charmix, es sorprendentemente increíble pero creo que debemos centrarnos en encontrar lo más rápido que podamos esos horrocruxes y destruirlos ya que solo nos quedan veinticuatro horas.-Ashoka tenía razón en eso, quedaban pocas horas para el gran enfrentamiento después de tanto tiempo y no teníamos tiempo a perder por nada del mundo pero está vez, teníamos una ventaja que nos dio el pensadero y la cual era la ubicación de los horrocruxes que faltaban.-Debemos ir al campamento mestizo lo más rápido posible, Felix tú nos guiarás.-El asintió y sacó de su bolsillo el traslador que siempre llevaba con él pero antes de acercarme a él como todos los demás, en mi cabeza rodaban preguntas sobre como estarian todos esos niños y niñas al irnos nosotros de aquí para ir al campamento mestizo un lugar secreto para muchos de entrenamiento para semidioses.-Tranquila ellos estarán a salvo tienen a sus profesores así que no te preocupes.-Ellos sonrieron hacía mi acción que me alegro mucho de saberlo ya que sino me quedaría muy intranquila al irme sin saber si ellos estarían bien así que ahora si podía ir con ellos perfectamente a nuestro próximo destino por así decirlo. Me acerque a los demás y al hacerlo, todos tocamos el traslador para poder desplazarnos pero aún sabiendo que estarían ellos bien, havia algo extraño en mi mente que desapareció al sentir la cálida mano de Draco entrelazarse con la mía, realmente nose como esos simples actos hacen tanto impacto en una misma pero no me importaba porque después de todo no me desagradaba para nada del mundo al igual que el paisaje que nos rodeaba y donde nos havia traído el traslador ya que se trataba de un bosque frondoso que supongo que estaba cerca de algún lago o mar por la suave brisa que sentia y hacía mover con delicadeza y dulzura las hojas de todos aquellos árboles

Elisabeth Silver y el mundo de AstralDonde viven las historias. Descúbrelo ahora