¿Chan? ♡ chanlix

Capítulo O1.

Felix estaba demasiado nervioso y asustado, pero debía controlarse o sino su alfa lo llamaría preocupado preguntándole que le ocurría.

Se encontraba sentado en la tapa del inodoro del baño de la habitación que compartía con su alfa, esperando el resultado de la prueba de embarazo que se hizo, tenía la sospecha de que estaba en estado.

Tenía miedo de cómo iba a reaccionar su alfa, Chan. Estaban enlazados hace ya dos años, Chan era probablemente uno de los seres más amables de este mundo, era super cariñoso y atento con su omega.

El alfa amaba a los bebés, los adoraba. Siempre le gustó la idea de tener cachorros y añoraba algún día tener muchos de ellos y más si seria junto al amor de su vida, su omega.

Ambos ya habían hablado sobre este tema y estaban de acuerdo en tener hijos, tenían todo lo necesario y no le faltaría absolutamente nada.

Felix no se quedaba atrás, él también amaba a los bebés y soñaba con algún día formar una familia con su alfa. Pero ahora estaba realmente asustado, ¿qué pasaría si no sería una buena madre para su bebé? Alejó deprisa esos pensamientos de su cabeza, ahora confiado en que él sería una buena madre y cuidaría muy bien a su hijo.

Felix al ver que ya pasaron los minutos que tenía que esperar, inquieto fue a ver el resultado de la prueba. Unos pasos antes de llegar a donde se encontraba la prueba se repitió que todo estaría bien, si llegara a estar embarazado estaría demasiado contento, para luego levantar un poco su remera y acariciar su pancita todavía plana. Sonrió un poco para después finalmente ver el resultado.

Estaba en estado.

Juraría que podría desmayarse en ese instante.

El omega impactado soltó un leve sollozo y luego empezó a llorar de la felicidad aún con la prueba en sus manos para luego dejarla a un costado y acariciar su pancita. Lo único que podía pensar en ese momento era voy a tener un cachorro, voy a tener un cachorro... Un cachorro con su alfa. Mientras que su omega en su interior brincaba de felicidad.

Felix después de eso se dispuso a hacer la cena para su alfa que pronto llegaría del trabajo, mientras pensaba en las maneras de darle la noticia a Chan.

Una vez que Chan llegó fue recibido por un sonriente Felix que rápidamente lo rodeo con sus brazos cálidos, abrazo que el alfa devolvió mientras enterraba su nariz en el suave cabello del omega mientras respiraba profundamente su aroma. El cual últimamente lo sentía demasiado dulce era extraño, pero le encantaba.

Luego de que hayan cenado y lavado todos los platos sucios, se dirigieron a su habitación dispuestos a tomar una ducha para luego irse a a dormir. Era su parte favorita del día ya que sólo eran ellos acurrucados en las finas mantas dándose calor y disfrutando de la calidez del otro.

El omega se bañó primero así que ahora era turno de Chan cosa que Felix aprovechó para buscar en su cajón de ropa la prueba que se había hecho esa tarde.

Mientras que por otro lado, estaba Chan pensando en que Felix ha estado toda la cena alegre e inquieto, bueno él siempre está así pero Chan está seguro que es algo más, lo ha sentido así desde la tarde. Que tramara mi pequeño omega pensó en su interior mientras negaba con la cabeza con una sonrisa ladina mientras se terminaba de bañar. Cuando saliera del baño le preguntaría.

Felix estaba sentado en el borde de la cama con una gran sonrisa esperando a su alfa y en el interior de sus manos tenía el test.

Chan después de salir del baño vio a su omega sonriente en la cama con algo entre sus manos.

-¿Qué tienes ahí, Lix? -preguntó el alfa curioso para luego acercarse hasta su lado y sentarse junto a él. Felix en todo momento mantuvo su sonrisa con esos ojos almendrados brillantes que Chan tanto adoraba.

El rubio le tendió aquel palito para que el alfa lo tomara. Chan lo tomó en sus manos para ver que era, una vez que se dió cuenta de que se trataba quedó atónito mientras que el omega inquieto esperaba su reacción.

El alfa a los segundos reaccionó, va a tener un cachorro con su omega.

Rápidamente, dejo la prueba a un costado de la cama y abrazó fuertemente a Felix mientras soltaba algunas que otras lágrimas.

-Dios mío Felix, no puedo creerlo ¡Vamos a ser padres!- tomó al omega entre sus brazos mientras lo abrazaba y le llenaba la cara de besos.

-¡Claro que sí, Alfa!- este reía mientras que también algunas lágrimas abandonaban sus ojos.

-Me acabas de hacer la persona más feliz en este mundo, te amo demasiado mi omega- lo tomó de las mejillas y lo besó.

-También te amo mucho, alfa.