Rengoku, un estudiante muy inteligente y amable, siempre tenía las mejores notas y eso lo hacía muy popular entre las chicas, hasta que un día llega un nuevo compañero al aula, ese era Akaza, un chico despistado y rebelde, solo le gustaba jugar al b...
Después Akaza volvió a su casa y Rengoku a la suya, desde que pasó eso Akaza no respondió el teléfono. En la mañana Akaza se levantó cansado, cuando bajaba las escaleras se encontró a su madre. - Akaza alistate, Douma llega a las 12. Akaza la miro con cara de odio y respondió. - No voy a verlo, me largo. - Ni creas que te voy a dejar te vas a quedar aquí y lo vas a recibir. - NO QUIERO! No voy a dejar que vuelvas a mandarme, no voy a ver a ese bastardo! Mejor nunca hubiera vuelto. - NO ME GRITES Ni mierda, tu vas a hacer lo que yo digo, el único que arruinó todo fuiste tu! Si no ahora mismo estuvieran muy felices! Si no fuera por tu estupidez ahora estuvieran casados!!! - .... - Alistate.
A Akaza le temblaba la voz, y los recuerdos volvieron a su mente, esos horribles momentos los cuales hicieron que se entristeciera y se enojara aún más, pero no podía seguir no le podía ganar a esa señora llamada madre.
Su teléfono tenía muchas llamadas y mensajes de Rengoku, desde la mañana Akaza no le contestaba lo cual hizo que Rengoku se preocupara Por que no me respondes... Tal vez le pasó algo muy malo! Iré a su casa.
Ya a la hora, Akaza estaba sentado en el sofá mirando a abajo sin más, un sonido se escuchó, era el timbre, ya había llegado Douma. Akaza se congeló, nunca le había tenido tanto miedo a un sonido - Ve a abrir, voy a servir la mesa. -... Akaza se acercó a la puerta, sus manos temblaban y con miedo la abrió.
Un hombre alto, con una sonrisa apareció ese era Douma.
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- Hola de nuevo Akaza~ Akaza trago saliva y respondio - Hijo de puta... Que vienés a hacer aqui otra vez? - Douma, por favor entra! Estoy sirviendo, mientras sientese en el sofá para que platiqué un rato con Akaza!
Akaza no paraba de temblar, y tener que guardarse todas las cosas que le quería decir lo enojaba aún más, Douma tenía una sonrisa siniestrada, su mirada tranquila lo pertubaba era como una tortura verlo Pronto los dos se sentaron en el sofá mientra la Mama de Akaza terminaba de ordenar todo, habia una mesa de cristal pequeña en medio, un sofá largo y dos más pequeños, Akaza se sentó en el sofá largo mientras que Douma en uno pequeño, el ambiente era tenso y incómodo, pero Douma no lo dejaba de ver junto con esa sonrisa, Akaza solo pudo mirar abajo intentando ocultar su dolor y ira. - Como te a ido? Akaza~ Alzó la cabeza y lo miro unos cuantos segundos pensando en si responder o no - Mejor que nunca, por que ya no veo tu asquerosa cara *Risa* - Ah que lindo, estoy seguro que sufriste mucho no? Si no hubiera sido por que derrepente dijiste que no querias casarte... - Y POR QUE CREES QUE LO HICE??!! Akaza no aguanto la ira y alzó la voz - Tranquilo~ podemos hablar normal, no hay necesidad de gritar Akaza~ - Esque se te borro la memoria o algo? Ya no te acuerdas de la mierda que hiciste?! Si no fuera por ti! Desgraciado... Era notorio el dolor de Akaza, pero todos esos sentimientos por que nacieron? Que fue lo que pasó?
3 años antes, la familia de Akaza y la de Douma se conocían por negocios de empresa, los padres eran buenos socios y un día decidieron hacer un negocio más, hacer que sus hijos se casaran para que así heredarán las dos empresas y las unieran y así formar la mayor empresa del mundo, o esa era la idea de los padres y así fue, Akaza y Douma eran buenos amigos y de por medio habían ya sentimientos que nunca se habían dicho, al recibir esta noticia Akaza se alegro por dentro pero tenía miedo de la reacción de Douma, y si no queria? Pero la suerte estaba delante, Douma al parecer también lo quería, así los dos se comprometieron, eran lindos, era como la pareja perfecta, Douma era amable y tierno, Akaza se hacía el duro mientras que no lo era, 2 semanas antes de la boda Douma le dijo a Akaza que iba a trabajar horas extras por lo cual llegaría más tarde a casa, a lo cual no hubo ningún problema, así a las 9 Douma salió del trabajo pero no llegó a la casa de Akaza, ellos todavía no vivían juntos pero habían días en los que se quedaban en la casa del otro, Akaza se preocupó por Douma, tal vez le había pasado algo así decidio ir a la casa de Douma, cuando llegó abrió la puerta, no había nadie mientras subía las escaleras ruidos se escuchaban, eran.... gemidos? En el momento Akaza no lo asimiló, tal vez era la tele o algo por el estilo se acercó al cuarto de Douma, cualquiera no lo quisiera aceptar, el hombre que amaba.... Estaba sosteniendo en sus brazos a otro, Akaza se quedó congelado mientras los veía por la endija de la puerta, Douma lo vio pero no paro, que le pasaba!?? En ese momento un escalofrio paso por el cuerpo de Akaza al ver a Douma sonreírle, Acaso todo era mentira?
