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La noche era ruidosa. La lluvia azotaba con fuerza las calles de la ciudad, siendo así el sonido repetitivo de las gotas chocando con el pavimento, haciendo una orquesta junto con los truenos que sonaban fugazmente en el cielo gris. Definitivamente hoy no fue un gran día para Taehyun. ¿La razón? Es sencilla. Su madre le había protestado del porqué se tomó un día de descanso, decidiendo salir con una "indócil" e "irresponsable" persona—su madre nunca le había agradado su amiga—como Soori, e ignorar la importancia del estudio para entrar a la universidad.
Taehyun no sabía qué era lo que dolía, el hecho que lo estaba regañando por tener solamente un día de descanso, o el hecho que la opinión de su madre es transparente en cuestión a lo que piensa sobre Soori. Pero esta vez era distinto, su madre lo había hecho sentir fatal.
—¿Cuántas veces te he dicho que no dejes de lado tus estudios Kang Taehyun?—Su madre le dedicó una mirada incrédula, gritándole furiosamente a su hijo.
—¿Enserio te es más importante salir con la insolente de Soori y perder esta oportunidad?—La mujer se había vuelto un completo desastre, le desagrada la idea en pensar en los gastos mensuales de la universidad, es por eso que lo presionaba para conseguir una beca académica. Pero Taehyun se molestó al escuchar la descripción que le dio a su mejor amiga.
—No la llames así por favor.—Taehyun con la voz firme y baja mencionó, pero eso no fue suficiente para que su madre siga dándole el sermón de su vida.
—¡Ay, por favor Taehyun! Como si eso me importara—Su madre expresó despreocupada.—¡Lo único en que te estas volviendo es en una persona inservible como ella! ¿Siquiera te preocupa la universidad?—Hizo una pausa teniendo su mirada fija en él, sin embargo, ese fue el punto definitivo donde Taehyun explotó alzando la voz.
—¿Quieres por favor dejar de decir mierdas sobre Soori? ¡Ella no tiene nada que ver con esto!—Taehyun sentía poco a poco su mirada nublándose, pero esto no lo detuvo a seguir hablando.
—¿Nunca te has puesto a pensar lo mal que me haces sentir?—El castaño se vio obligado a hacer una pausa. El llanto le estaba ganando.—¿De verdad piensas que soy inservible solo porque decidí tomarme un día de descanso?—Su madre estaba reprimiendo sus gritos, pero rápidamente Taehyun volvió a hablar.
—Créeme que me esfuerzo todos los días para conseguir esa beca pero, ¿no te estás pasando del límite?—Y así fue como Taehyun empezó a sollozar. Se sentía destrozado por su propia madre.
—Si tanto te estresa los gastos que haremos cuando entre a la universidad, ¿por qué te molestaste en tenerme?—Y sin más por decir, Taehyun agarró una chaqueta colgada en el perchero y salió de la casa ignorando los gritos enfurecidos de su madre. En ese momento todo lo que necesitaba era Soori. No le importaba caminar debajo de la pesada lluvia y empaparse. Solamente deseaba ver a Soori.
(...)
—¡Ya voy!—Soori gritó al escuchar el timbre tocar. Le hacía extremadamente raro el hecho que Taehyun no se hubiera comunicado con ella en todo el día, pero también la persona que esté tocando su puerta a estas alturas de su casa.
Soori vivía sola en su humilde morada, tal vez un poco pequeña, pero para la pelinegra era más que suficiente. Sus padres son un tanto diferentes a los de Taehyun—sin olvidar mencionar que son completamente opuestos—pues le rentaron una pequeña casa cerca de la universidad donde quiere entrar, así practicando ella sola sus planes de rutina y claro, unas cuantas salidas con sus amigos. Una completa descripción fuera de lo que la madre de Taehyun piensa.
Al bajar de las escaleras tenía una presión en el pecho, un mal presentimiento de lo que estaba sucediendo. Pero al divisar Taehyun enfrente de su casa empapado, mientras que sus lágrimas se mezclaban con la lluvia, no dudó en abrazarlo. Lo peor que pensaba podría ser cierto, pues Soori ya conocía como de estricta era la madre de Taehyun.
El castaño no dudó en corresponder su abrazo, quería buscar un refugio, ese refugio lo podría encontrar solamente en Soori. Mientras más pasaban los segundos Taehyun lloraba y se aferraba fuertemente a su amiga, solo quería olvidar el día de hoy. Quería desaparecer, no existir.
Dicho pensamiento se vio interrumpido cuando sintió la suave mano de Soori acariciar su cabello. Lo hizo de manera tan cariñosa que todos sus problemas se esfumaron y simplemente quedo hipnotizado por ese dulce toque que tanto amaba. No quería que dejara de hacerlo.
—¿Ya estas más tranquilo?—Soori preguntó al sentir que los sollozos del contrario cada vez eran mas silenciosos.—Ven, vamos adentro y platicaremos con calma las cosas.—La pelinegra tomó de las manos al castaño y se adentraron al hogar.
Taehyun no podía pensar con claridad, eso sí, la única sensación que se apoderaba de su cuerpo era la calidez con la que Soori lo recibió. A pesar de ser un día frío y nublado, encontró calidez y amor por parte de la chica.
"Cada que me siento solo y roto, tu me encuentras. Tu presencia se siente como el cálido resplandor de sol."
