°Dame tu corazon° Andy x lectora

Cap 14 °Rayos de pasión°

Me desperté con una sensación de confusión envolviéndome, como si estuviera atrapada en un sueño turbio, mis parpados se abrieron con lentitud, y por un instante, todo a mi alrededor parecía borroso y distante. Pero pronto, la realidad se apoderó de mi conciencia. Mis ojos enfocaron el espacio frente a mí, y lo primero que vi fue a Joe, tendido en un sillón cercano. El horror se apoderó de mi mente al notar la sangre que manchaba su ropa. Mi corazón dio un vuelco, y un grito ahogado amenazó con escapar de mis labios. ¿Qué había sucedido? ¿Dónde estábamos? Mis manos buscaron apoyo, y me senté bruscamente en la mesa en la había estado acostada. Una punzada aguda se apoderó de mi estómago, y gemí por el dolor, mi mano instintivamente presionando la herida que descubrí en mi abdomen. La sangre seca y la incomodidad me recordaron lo que había pasado.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, y mi mente seguía tratando de procesar lo que veía y sentía. Pero entonces, como un rayo de luz en medio de la oscuridad, la puerta se abrió de par en par, y Andy apareció ante mí. Sus ojos se encontraron con los míos en un instante, y su rostro se iluminó con un alivio palpable. Sin pensarlo dos veces, se lanzó hacia mí y me rodeó con sus brazos. Sentir su abrazo cálido y protector fue como un bálsamo para mi alma, y por un momento, me sentí segura y reconfortada.

El calor de su cuerpo contra el mío me hizo sonrojar involuntariamente, pero rápidamente una nueva punzada de dolor en mi abdomen me devolvió a la cruel realidad. Andy me miró con preocupación, sus ojos recorriendo mi rostro en busca de señales de heridas o angustia. Pero antes de que pudiera decir algo, una voz en mi interior insistía en que primero debía preocuparme por Joe y la sangre que manchaba su ropa.

La confusión y la preocupación se reflejaban en mis ojos mientras miraba a Andy con inquietud. Mi voz temblaba cuando le pregunté, ansiosa por respuestas, "Andy, ¿qué le sucedió a Joe? Está herido, está sangrando...".

Andy mantuvo su abrazo reconfortante, sus brazos fuertes alrededor de mí, y me miró con una expresión tranquila. "Está bien, Milena," dijo con suavidad, intentando calmar mis temores. "Recuerda que no podemos morir, solo está herido." Dijo intentando calmar el ambiente.

Sentí un alivio momentáneo al escuchar esas palabras, pero mi preocupación no desapareció por completo. "¿Pero ¿cómo está? ¿Cómo se siente? ¿Qué es lo que paso?" pregunté, mirando hacia Joe, cuya figura yacía en el sillón.

Andy me acarició el cabello con ternura mientras respondía, "No lo sé todavía, Milena. Pero vamos a ocuparnos de ti. Primero, ¿cómo te sientes tú?"

La punzada en mi estómago seguía recordándome que tenía heridas propias, aunque no entendía cómo ni cuándo habían ocurrido. "Me duele aquí," dije, señalando el área dolorida en mi abdomen. "Pero en general, me siento bien. Solo... no sé lo que pasó."

Andy apretó su abrazo ligeramente, reconfortándome una vez más. "Tranquilízate, Milena. Hablaremos de todo en el camino de regreso a casa, ¿de acuerdo?" Asentí, sintiéndome un poco más segura al saber que estaríamos juntos en esto. Pero entonces, algo inusual sucedió, me di cuenta de que estaba sonrojándome. La cercanía con Andy, su preocupación y su abrazo protector habían hecho que mi corazón latiera más rápido de lo habitual. Antes de que pudiera procesar completamente mis emociones, una voz interrumpió nuestro momento.

Nicky apareció en la entrada, con una mirada de preocupación en su rostro. "¿Cómo te encuentras, Milena?" preguntó, dirigiéndome una mirada.

Mis mejillas se calentaron aún más, y me apresuré a responder, "Estoy bien, Nicky. Solo un poco confundida" Nicky asintió con alivio y se acercó para unirse a nuestro abrazo. Le sonreí a Nicky, agradecida por su preocupación. "¿Y Joe? ¿Cómo está él?"