Termino de arreglarme poniéndome los pupilentes verde esmeralda, ya había olvidado como me veía con mi cabello teñido de rubio, siempre me dió un aire calmado y dulce.
A él le encantan los rostros bonitos pero también con aire seductor y misterioso.
Me anuncian y salgo de una vez.
Ya es la hora del espectáculo.Camino hacia la tarima y una vez arriba empiezo con el baile, hago uso de todo mi cuerpo moviendolo sensualmente al ritmo de la música. Atraigo las miradas de varios y les sonrío con coquetería mientras sigo con el show.
Me esfuerzo por atraer la atención de la mesa que yace en el fondo, con poca iluminación y con solo tres clientes en ella.
Una vez la obtengo sonrío victorioso a mis adentros. Uno de sus guardias se me acerca pidiéndome lo acompañe hacia aquella mesa, lo hago aún en una posición segura y seductora.
Mis ojos se centran en los hombres que tengo delante.
Yasahiro Mucho, y los hermanos Kawata. Los dos últimos ya tienen acompañante.
— Nada mal —aplaude Mucho— fue un show estupendo, digno de admirar.
Lo observo fijo.
— ¿Solo me trajo para decirme eso? —inquiero.Hace una medio sonrisa.
— Eres muy osado —de un momento a otro se levanta y me toma de la nuca acercándome a él— ¿Acaso sabes delante de quienes estás, dulzura?. No te conviene tener esa actitud para con nosotros.Le sonrío.
— Solo era una pregunta —observo el revolver que tiene sujeto a la cintura.Los hermanos Kawata dejan de besar a sus acompañantes.
— Nosotros iremos a otro lado —dicen ambos hermanos— diviértete.
Continúa fumando el puro que sostiene su mano derecha. Lo deja en el cenicero una vez que estamos solos y vuelve a hablar.
— Vayamos a la sala VIP.
Me ofrece una mano y lo acompaño a ese lugar.
Va al mini bar y se sirve un trago, luego de esto toma asiento en el sofá que hay delante de la tarima.— Ahora, quiero que des un mejor espectáculo para mí.
Le sonrío y subo al escenario que hay delante, empiezo a bailar al ritmo de seven rings de Ariana Grande. Deslizo, espalda, manos, piernas y culo por el tubo logrando que quede absorto en cada uno de mis movimientos.
Termino y me incorporo sobre sus piernas dejándole una excelente vista de mis muslos. Le quito el vaso dándole un trago a su coñac.
— Parece que mi baile le gustó demasiado —le acaricio la erección por encima de la tela del pantalón.
De un momento a otro me acerca más a él acariciándome el trasero.
— Ven conmigo, vuélvete mi amante. Si lo haces ya no tendrás que lidiar con una vida de mierda como esta.Le doy mi mejor sonrisa.
— Dame una respuesta rápida. No hago ofertas así a cualquiera.
Me quito de sobre sus piernas.
— Temo que tendré que negarme —dejo el vaso sobre la mesita de enfrente— No lograste despertar nada en mí.— ¿Qué?.
— Lo que oíste —suelto con burla— risa es lo único que me provocas.
Me toma del cuello y me azota con fuerza contra la mesa en tanto me encaja la rodilla entre las piernas.
— Repite lo que dijiste —amenaza aún sujetándome— perra asquerosa. ¿Te crees lo mejor solo por saber mover el culo?.
Vuelvo a reír, con una mano se baja la correa del pantalón mientras no deja de mirarme.
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Ꮚ El Omega del Rey //SanTake Ꮚ
FanficEl amor puede volver loco a cualquiera Antes de convertirse en uno de los mayores criminales de Japón, Takemichi Hanagaki llevaba una vida normal como uno de los mejores psiquiatras de Tokio, hasta que fue asignado al paciente más problematico del...