𖥔 ִ ۫ ˑ you might love him ! heehoon ִˑ

ecole

De alguna manera, Heeseung llegó ese día temprano de trabajar. Su jornada laboral usualmente terminaban a las siete, pero eran las cinco y ya se encontraba tirando sus pertenencias sobre el sofá de pequeño, pero lindo, apartamento compartido.

Sunghoon no llegaba hasta las seis quince a su hogar después de tomar sus clases de pilates después de su trabajo de medio tiempo. Normalmente era el menor quien preparaba la cena, pero si Heeseung estaba en casa en se momento, podía aprovechar y sorprender a su bonito novio con su comida.

Así que eso es lo que hizo durante las siguientes dos horas. No sabía mucho sobre la cocina, pero los pocos platillos que podía preparar le quedaban bastante bien y también eran los favoritos de su Hoonie. En ese momento fueron solo Heeseung y el sonido de las ollas y del estofado cocinándose dentro de ellas.

Justo a la seis por la tarde, Heeseung quitó del fuego la comida y dejó que se enfriara un poco antes de que Sunghoon llegara a casa. En los quince minutos restantes, fue hasta su sofá y se recostó en él, sacando su teléfono para desplazarse por las aplicaciones que tenía. Cuando entró a Instagram, miró algunos post antes de detenerse en uno en específico. Era una fotografía de uno de sus antiguos compañeros de la escuela a la que habían asistido antes de mudarse, y en ella se mostraba un grupo mediano de amigos reunido alrededor de una fogata. La imagen habría pasado desapercibida por Heeseung si no hubiera visto a Sunoo ahí.

En esos dos años, el menor no había cambiado demasiado, solo sus mejillas se habían vuelto menos prominentes y sus facciones afiladas se hacían juego a su cabellera de un tono rojo quemado. Esa era la primera vez que veía a Sunoo después de los sucesos que habían ocurrido en aquella rosada primavera, pero ni su apariencia ni volver a saber de él era lo que lo había sorprendido, sino los brazos de un chico alrededor de la cintura de Sunoo y los labios d ese chico presionados en la mejilla del menor.

Y sobre todo, que la persona que mantenía esos actos tan íntimos con el menor era Jake, el mejor amigo de Sunoo.

Su posición era normal con el simple hecho de ser mejores amigos, pero eran los únicos abrazados así y se sostenían de una manera tan amorosa que había despertado la curiosidad de Heeseung por saber el estado de su relación, así que picó sobre la imagen para que se desplegaran todos los usuarios de las personas en la foto y entró específicamente al perfil de Jake.

Había muchas imágenes dispersas, de diferentes restaurantes y unas cuantes de él mismo en diferentes lugares, pero la tercera parte de sus publicaciones eran fotografías de Sunoo.

Sunoo comiendo helado, Sunoo dormido en un sofá, Sunoo acariciando un gato en medio de la calle, Sunoo en el asiento del copiloto de un auto. Pero solo eran imágenes en solitario de él, sino también con Jake; en algunas posaban el uno al lado del otro, pero en otras aparecían abrazándose e incluso besándose.

Sin que eso saciara su curiosidad, Heeseung siguió desplazándose a las publicaciones más antiguas de ellos dos hasta que llegó a la primera publicación donde Jake besaba a Sunoo, la cual había sido hace setenta y una semanas. Abriendo su calculadora, Heeseung tecleó algunos números hasta que calculó el tiempo desde que había publicado esa fotografía y había sido aproximadamente hace un año y tres meses. En conclusión, Jake y Sunoo habían empezado un noviazgo el mismo año en que él y Sunghoon se fueron.

Si era sincero, Heeseung estaba curioso por cómo había sucedido todo para que ellos hubieran terminado juntos, porque lo último que sabia era que Jake se había alejado de Sunoo después de toda su escena de acosador. ¿Tal vez hicieron las pases y se dieron cuenta que eran el uno para el otro? Heeseung no lo sabía.

Justo cuando pensaba en eso, el ruido de las llaves abriendo la puerta principal lo sacó de su cuestionamiento mental. Al abrirse la puerta dejó ver a un Sunghoon completamente agotado y con un rostro inexpresivo, pero su expresión cambió a una feliz cuando lo miró.

—¿Tú qué haces aquí? ¿No deberías seguir en el trabajo?— cuestionó el menor, dejando sus llaves en un pequeño cuenco sobre la mesita al lado de la puerta. Sus manos se colocaron sobre sus caderas, mirando a Heeseung con interrogante y al mismo tiempo divertido.

—Bueno, algunas cosas surgieron y me dejaron irme más temprano. — Heeseung sonrió inocentemente antes de abrir sus brazos, esperando a que su novio dejara de jugar y fuera directo a sus brazos. —Anda, ven.

Y tal y como esperaba, Sunghoon corrió los pocos metros que lo separaban y se lanzó sobre él sin ningún cuidado, lo que provocó protestas y varias risas por parte de ambos. Después de tranquilizarse, Heeseung comenzó a tocar cada parte del cuerpo de Sunghoon, desde sus muslos y trasero hasta su cintura y brazos.

—Los pilates de verdad sirven — comentó con una sonrisa traviesa, observando las mejillas de Sunghoon teñirse en rosa antes de ocultar su rostro en su cuello.

—Tu siempre dices eso, amor...

Curar el trauma que había dejado Sunoo en Sunghoon no fue una tarea fácil para Heeseung. Fueron intensas pláticas lo que hicieron que al menos Sunghoon dejara de atragantarse con comida para poder engordar solo por ideas que le habían metido en la cabeza, después de hacerle entender al menor que Heeseung lo amaría con cualquiera que fuera el cuerpo que tuviera siguieron sesiones con un nutriólogo y psicólogo. Le hicieron una dieta específica y comenzó a ir a clases de pilates, a las cuales Heeseung asistió para darle apoyo a su pareja, aunque después de las dos primeras clases se dio por vencido por todo el dolor muscular y solo se sentó en una silla mientras veía a Sunghoon torturándose con todas esas máquinas raras.

Actualmente todo había mejorado. Sunghoon ya no tenía pensamientos malos y su vida se había asentado de una manera cálida y amorosa dentro de las paredes de su apartamento. Solo Sunghoon y él abrazados de esa manera. Nada podía ser más perfecto que eso.

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La próxima semana vamos a conocer cómo Sunoo y Jake se juntaron. 👀👀