Lucy y ellos

Con locura

Pareja: Rolu. Ó, Rogue/Lucy del futuro.

Genero: Hurt/Comfort/Angst.

Rated: T, por insinuaciones de violencia y violación.

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Con locura

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Rogue acarició con firmeza la mejilla de Lucy. Y pensar que ellos habían creído que la había matado, pero un amo no puede matar a su única sirvienta, pensaba él.

Rogue sonrió ligeramente, haciendo exaltar a la chica.

-Te ves tan hermosa.

(-Y tan rota).

Lucy tragó en seco, echándose disimuladamente hacia atrás. Él la miró con sorpresa, pero casi al instante sonrió y ladeó la cabeza.

-Tranquila, ¿por qué escapas?- le acarició el cabello.

(-Yo soy tu salvación).

Y entonces Lucy se sentía culpable, porque él ya estaba lo suficientemente mal antes de que se apropiara de ella, pues se sabía acompañado, pero Rogue enloquecía con su silencio.

¿Qué podría estar pensando?, se preguntaba cada vez que lo veía. ¿Cómo se sentirá?, pensaba cada vez que lo observaba dormitar frente a ella, al otro lado de la húmeda cueva.

Había notado que tenía pesadillas, a pesar de él tener la misma expresión seria que solía tener, al despertar.

Dos personas cargando con sus demonios podían entenderse. Y Lucy había visto y sentido el mismo miedo (y soledad) que manifestaban los ojos de Rogue.

-¿En qué piensas?- susurró muy cerca de su rostro.

Lucy sintió la sangre entre sus piernas, y el sudor en todo su cuerpo que hacía que la recorrieran escalofríos. No creía que estar en esas condiciones fuera lo más razonable, y preferiría morir a mantenerse como estaba actualmente.

Sin embargo, por alguna razón, le apenaba dejarlo solo (si es que podía hacerlo). Sabía que él le había hecho mucho daño, y que sería estúpido quedarse, pero tenía sus motivos.

Uno. Hasta ahora sabía que estaban sólo los dos (pues Rogue la llevaba con él, como si fuera una mascota).

Dos. No deseaba dejarlo solo y mucho menos dejar que enloqueciera más (tal vez le hablaría).

Tres. Tampoco era tan malo cuando mantenía su distancia.

-¿Por qué mi sirvienta no habla?- ladeó el rostro, acercándose.

Lucy tragó en seco.

(Finge).

¿Qué haría? Rogue estaba esperando que hablara, y no quería que se enfadara. No quería terminar como la noche anterior.

(Finge, Lucy...).

-Heartfilia- susurró arrastrando la voz.

Lucy se mordió el labio inferior.

(¡Finge!)

-Diga, Rogue- murmuró.

Y entonces él se permitió sonreír. Porque su sirvienta le había hablado. Porque hace mucho no la oía hablar. Porque había pensado que le había hecho algún daño (aunque no se creía capaz de eso).

Porque su Lucy había vuelto (y nunca más se iría).