Dangerous damon

03.

¿Quién eres?

Capirulo 3.

Mia Hemsworth.

Justo como había dicho antes, al entrar a la fiesta las miradas de todos se clavaron en mi, los chicos con la mirada me desvestían y las chicas me amenazaban. La Mia de antes le hubiera gustado ser el centro de atención, se sentiría superior a los demás y caminaría de manera sexy a la pista de baile; Pero la Mia actual deseaba no haberse puesto este vestido, ¿Desde cuándo me he vuelto tan insegura?

– ¡Vinieron! – Exclamo Alyson abrazando a Vanessa y después a mí.

– ¡Aquí estamos! – Exprese simulando agrado.

– Por fin sales de esa cueva Mia, ya era hora–Me sonríe y luego abre sus ojos como si hubiera visto un ángel llegar. Mordió su labio inferior. –Nos vemos chicas – Coloco su cabello hacia atrás y acomodo sus pechos – Ya las alcanzo.

Entrecerré mis ojos siguiéndola con la mirada. Pero Vanessa tomo de mi brazo para caminar hacia el bar, voltee de nuevo y la vi saludando a un grupo de chicos. Negué mentalmente mi cabeza, ella siempre busca la atención de los chicos.

Ambas nos sentamos en el bar, conversábamos con el coctelero que según Vane está que arde ¿Hasta el sentido de humor por los chicos he perdido? Necesito ir al psicólogo, esto es grave enserio.

–Y...Brandon ¿Es ese tu nombre? – el asintió. – ¿tienes novia? Solo pregunto, es que mi amiga urgentemente necesita uno–Dijo Vane y le di un codazo ridiculizada.

– Vanessa– murmuré.

El carcajeo. – No, por ahora – sonrió seductoramente y ella mordió su labio inferior. Creo que al chico le interesaba Vanessa.

Rodé mis ojos y miré a otro lado, tome un poco de vodka. Afinque mi barbilla en mi mano. Y me deje llevar por la música que se escuchaba. Era lenta y al mismo tiempo un poco movida. Siento unas manos pasar por mi espalda desnuda, provocando que me exaltara.

– Tayler, me asustaste– Fruncí el ceño.

–Pensé que no vendrías– su voz se escuchaba ronca y sus ojos estaban mirándome con aspiración.

Trague saliva. – Vanessa me animo a venir, no tenía pensado hacerlo.

Dio dos pasos para quedar cerca de mí. – Te ves preciosa.

–Tayler, no comiences– coloque mi mano en su pecho para tratar de alejar su rostro de mi.

Apretó su mandíbula mirando a otro ángulo. – No voy a dejarte ir tan fácilmente Mia. ¿Lo sabes?

Tome su mentón –Créeme, es mejor terminar la partida campeón, no soy la Mia de la que estas enamorado.

Negó con la cabeza. – Es estúpido, lo dices porque estas lastimada.

–Tayler, en serio, no insistas más.

– Insistiré hasta el punto que quiera, Mia– Toma de mi mano fuertemente.

–Me estas lastimando– Me queje moviendo mi muñeca tratando de salir de su agarre.

– Lo siento– soltó mi muñeca. – Es que me pones tan...tan... – no terminó de concluir lo que iba a decir cuando un chico se acerca a mí.

– ¿Quieres bailar? – Preguntó, ignorando la presencia de Tayler que ahora estaba frunciendo el ceño.

– ¿Qué no ves que está hablando conmigo imbécil? – Escupió con recelo.

El chico alzo su ceja incrédulo, tanto que daba miedo, su rostro no era visible por la oscuridad más forcé mi vista para verlo, sin embargo lo único que radiaban eran sus ojos verdosos y su media sonrisa sarcástica. Trague saliva, coloque mi espalda recta mostrándome segura. Y asentí.