Dangerous damon

06.

"No puedes estar con él"

Capítulo 6.

— ¿Pero qué demonios? — Gruño Jackson al quitarle el cigarrillo de su boca, me miraba con rencor en sus ojos. Lo siento hermano lo único que quiero es salvarte de ti mismo.

— ¡Mía viniste! — Exclamó Vicky, delirante, nunca he visto esta chica estable. Tantas chicas bonitas en el instituto y el escoge a la menos indicada.

— ¡Vayámonos ahora de aquí! — Saqué mi voz sobre protectora.

— Oh vaya, mamá ¿Eres tú? Oh no, disculpa ella está muerta — Expresó con ironía y desagrado.

— Jackson es en serio, este lugar es peligroso. — Abrí mis ojos mirando a todos lados nerviosa.

— Estoy con Vicky ahora. No me iré. — Se llevo un vaso de whiskey a su boca.

— Oh claro que si — Tome de su brazo pero él la quito bruscamente de mi agarre; fulminándome con la mirada.

— NO— Gritó. — ¡Respeta mis decisiones! — Frunció el ceño. — Nadie te decía nada cuando te drogabas antes de ir al colegio — Escupió. — o cuando te cortabas.

Todo mi linaje comenzó a hervir hasta llegar a mis mejillas.

— ¡Cállate! — Gruñí con el ceño fruncido. — Haz lo que quieras entonces, ahógate con tus propios problemas, ya yo no puedo hacer nada por ti si tu no cooperas. Eres un estúpido. — Dije entre dientes.

— Gracias Dios, entiendo, bravo hermanita— aplaudió con ironía. — Por fin utilizaste la única neurona que tienes.

Toda mi mala energía me obligo a levantar mi mano y darle un fuerte bofetón. Me di la vuelta, no pienso aguantar una sola palabra de él.

— ¡Hey! ¿A dónde vas? — Preguntó Damon atrás de mi.

— ¿Y A TI QUE TE INTERESA? — Le grité. — Lo siento...

— No importa — Expresa indiferente.

Suspiré. — ¿Me acompañarías al auto? No quiero pasar por ese horrible callejón otra vez sola. — mordí mi labio inferior.

— Está bien. — Asintió. — Vamos.

Nuestros pies comenzaron a moverse con el propósito de pasar por eso callejón hasta llegar a mi auto que...por lo visto no está.

— No, no, no, no ¡Mi auto! ¡Mi auto estaba aquí! ¡Te lo juro! ¡No puede ser! ¡Se han robado mi auto! — exclamé alterada mirando a todos lados.

Escucho una risa a mis espaldas que hizo que me volteara furiosa. ¿A caso esto le parece gracioso?

— ¿De qué te ríes, imbécil? — Pregunte con el ceño fruncido, en serio, estoy que me pasa un pájaro al lado y lo mato a tiros.

— De ti — Contestó con su patética indiferencia.

— Ríete a ver si esto de duele — me acercó a él para darle un puño en el pecho pero él lo detuvo.

— Si quieres golpear algo, las paredes están detrás de ti.

Suspiré antes de hablar. — Tu no entiendes.

— Ni quiero hacerlo.

Rodé mis ojos. — Mira, sabes que, si quieres vete, yo puedo irme caminando a mi casa sola.

Me di la vuelta y camine, no sabía realmente para donde me dirigía, pero de que voy a salir de este lugar, lo haré.

Un auto bloqueo mi paso, bajo el vidrio en la cual apareció un tipo más o menos de unos treinta años, con cara de sádico, psicópata y con un cartel pegado en su frente que decía " Te voy a violar"