Damián daba vueltas en la cama, incómodo e indeciso, no estaba seguro de desear una relación seria, no estaba seguro de nada en su vida en este punto. Tenía sexo con sus tres mejores amigos al mismo tiempo, sentía amor pero no sabía si el tipo de amor por el que uno se pone de novio, tampoco podía ponerse a salir con los tres, ¿o si podía? Estaba confundido y no quería abandonar a ninguno.
Con Ignacio tenía una tensión sexual innegable desde que se conocieron, una complicidad casi mágica. Mauro por otra parte era su bebé, su consentido, cuando estaba con él no podía dejar de mirarlo ni un segundo, lo atrapaba por completo y esos ojos verdes solo lo hipnotizaban cada vez más. Mientras que con Lombardo tenían otro tipo de vibra, ninguno estaba dispuesto a ser sumiso ni pasivo de ninguna forma, pero tenían una conexión inigualable de igual forma.
— Dani: Mauro esta con Valentín —dijo Daniel sentado desde el sillón de su habitación, había ido a verlo ya que por su reflexión sobre la situación con sus amigos, se había encerrado en su casa—
— Dam: ¿cual? —preguntó—
— Dani: Lit, con duki no se llevan bien —dijo mirando su celular— Mauro esta insoportable dice
— Dam: no le digas así —dijo mirando el techo—
— Dani: lo dice Valentín —dijo— también dice que te diga que vayas a buscarlo porque en cualquier momento te lo mata
— Dam: no hablo con él hace una semana, no hablo con ninguno hace una semana —dijo— ¿que le voy a decir?
— Dani: sencillo, "hola Mauro estuve ocupado, chupame la pija así te relajas y ámame" —dijo haciendo reír a Damián— yo te hablo enserio
— Dam: no seas tarado —dijo—
— Dani: ahora está llorando —leyó su celular y suspiro— dice que ya no lo querés y llora mientras se come las titas de Agustín
— Dam: carajo —susurro levantándose de la cama— vamos
— Dani: ¿yo por qué? —preguntó— ni a palo, se van a poner a discutir seguro, mucho estrés para mi cuerpito
— Dam: no voy a ir solo Daniel —dijo— deja de quejarte y vamos
Ambos salieron del Departamento de Damián y se dirigieron a la casa de Valentín.
