No creo que en mi vida pues volver a ver esas órbitas vacías, la ausencia de escleras lo hacía ver perturbador, sin emociones y alma. Desde que lo conocí mis desmayos eran incesantes, no asimilaba mucho las emociones fuertes desde pequeño, fui llevado al psicólogo por esto y por mi imaginación. Mi cerebro estaba confundido, escuchaba una voz lejana, no distinguía quien, no era conocida para mi.
-¡Ey, despierta! -llamaba alguien.
Pude verle cuando mi vista se aclaró. El fondo cambió, ahora era un rojo vibrante dándole al ambiente un toque erótico. Quien me llamaba era una dama vestida muy elegante, portaba un vestido del mismo color que el cuarto donde me encontraba. Parecía ser de la aristocracia, contaba con una postura imponente y un peinado típico dejando su frente despejada, en su pelo una gran flor rodeada de un pequeño velo de encaje qué cubría hasta la mitad de su cara igual rojo. Cuando terminé de detallarla habló :-Qué bueno que qué despiertas, no me gusta que me hagan esperar, tu piel se ve pálida -¿quieres un poco de colorete?.
-¿Quién eres tú?, quiero irme de aquí -dije demandante.
-¡Qué maleducado estás¡-necesitas disciplina, pero primero dejame presentarme
-vale-ella tenía una voz irritante y autoritaria
-soy rojo, bueno roja, para ti señorita rojo, espero que no tenga que comerte en lo que queda de día. Negro dijo que eras algo sencible a las emociones fuertes, eso será con el que no es hermoso como yo.Dicho eso se levantó dejándome ver su gran vestido completo, su altura me sorprendió,no esperaba que midiera más de los 1.60, sentada daba la impresión de ser de baja estatura. Se acercó a mi y sonrió, tocándome las mejillas haciendo que estas se tornaran rosadas
-estoy muy sola, llevo 2 meses de viuda, mi esposo me abandonó por otra mujer, después de esto tuvo una trágica muerte
Ella extrañamente sonreía mientras decía esto
-te pareces mucho-¿me dejas besarte?Se sentía algo raro, nunca nadie me había besado, así que cuando sus labios color carmín tocaron los míos no supe como actuar, fue un beso suave, ella succionaba levemente mi labio inferior y dejó una pequeña mordida para separarse de mi y comenzar a hablar nuevamente.
-Sabes algo, el nunca tuvo la decencia de terminar conmigo, por muy príncipe que fuera lo tenía que hacer, por eso me lo comí.
Dejándome ver lo que había debajo de su vestido, unas patas puntiagudas de araña, mi corazón se aceleró y mis nervios estaban a flor de piel cuando se acercó a mi oído
-pareces apetecible-pasando una de sus patas por mi abdomen, cubierto de una capa de hilo estarás exquisito, igual que lo estaba él.Estaba amarrado de pies y manos, no podía hacer mucho, mi situación no era preocupante hasta ahora que me esta envolviendo en su hilo para comerme, se siente suave contra la piel, te da la impresión que vas a morir de asfixia, pero con una suave sensación, la envoltura iba por mis hombros, ya casi llegaba a mi cara y sorprendentemente no había perdido el conocimiento como siempre, no hubo forcejeo, me resigné en el primer momento. Daba vueltas en mi eje envolviendome cada vez más en la tela que apretaba mi cuerpo, ya casi llegaba a mi boca cuando vi que se detuvo y presencié a Negro. Se mantuvo solemne en lo que tal vez era la entrada a la habitación, me recorrió un escalofrío, su presencia era suficiente para ponerme nervioso. Con pasos elegantes caminó a nosotros y me arrancó de las patas de rojo proporcionandome a mi una caída y a rojo una bofetada que la dejo mareada por unos segundos.
-¡Qué mierda pasa ahora! -no puedes golpear...
Le propinó otra bofetada hasta que habló :
-silencio, ¿no puedes hacer eso?Su voz era ronca y profunda como la recordaba
-Dejalo y ponte a hacer lo que te corresponde, no es momento de divertirse, hay cosas que hacer
Rojo aún sobaba su cara adolorida, su rostro mostraba rabia, dolor e impotencia
-Tu si puedes divertirte todos los días con...
Otra, pero esta vez se vió más fuerte, Negro la tomó de la mandíbula y dijo con un tono de voz tan serio que en ese momento preferí estar desmayado a estar escuchando todo
-No hagas que tu legua desaparezca rojo, esta si la necesitas, tu pata era extra, pero lengua solo tienes una o eso creo¿ no?

ESTÁS LEYENDO
rainbow friends
De TodoÉl no solamente conoció los colores, conoció el lugar etéreo al qué podía ser llevado con su imaginación