血の心臓 ❤️ Corazón de sangre ❤️ (IMAGINA PARK JIMIN Y TÚ)

SEGUNDA PARTE

Bueno, en esta segunda parte Kim Terra (la hermana de Taehyung) es quien contará esta segunda parte del libro con casi los mismos sucesos de la primera parte. Solo que aquí, Min Yoongi y Jung Ho-seok (o J-Hope, el solecito de ARMY) se harán presentes en estos siete capítulos. 

Disfrútenlo, ARMY. 

Octubre 30-3023

La luz tenue de la mañana se deslizó por los barrotes de metal que protegían la única ventana y que insinuó su llegada a la reducida celda en la que me encontraba. Sentada en el suelo con la espalda pegada en la asquerosa pared, veía a la única compañía que tenía desde la noche anterior y que se mantenía sentado en su cama. En su respectiva celda. Era otro idiota que compartía la misma desgracia del silencio y la soledad como yo.

Ambos estábamos en unas deprimentes celdas de aislamiento gris en una de las conocidas Koban (o estaciones de policía para dejarlo más claro, en términos de español a japonés) ubicadas aquí en la puta Kanazawa.

Las camas metálicas tenían los colchones delgados y manchados. Odiaba ese lugar con todas mis fuerzas, pero casi siempre la pasaba ahí, más que en casa. Mi suéter negro estaba sucio. La capucha a duras penas ocultaba mi cabello negro y enredado. Ah, pero los moretones que me dejaron esos cabrones en la cara. Sonreí sin gracia. Esos putos moretones ya eran otra vaina.

_ ¿Todavía está ahí?

_ Ah, sí. Lo tenemos encerrado desde hace horas.

8

Mis antecedentes penales rompían el récord en toda Kanazawa. Mi último arresto fue por un estúpido enfrentamiento entre los Gyangu. Pandillas, en español. Los hijos de puta trataron de robarnos el botín que obtuvimos mi mejor amigo Woo-hyun y yo, de un magnate español que había salido a pasear por la ciudad. Era el robo perfecto. Por desgracia, el plan falló. Woo-hyun, mi único amigo y mi más grande compañía de vida logró escapar de los putos policías. Tuvo mucha suerte.

Por desgracia, yo fui arrestada por enésima vez este mes por Cara de culo. Así llamaba al alguacil Makoto. El cabrón estaba harto de mí, así como yo estaba harta de su actitud de mierda. En verdad trató de aparentar algo que no era. Cara de culo era un cobarde. Era otro imbécil que fingía cumplir la ley. Y aquel imbécil volvió a encerrarme en una de las celdas. Había también otro idiota encerrado en otra celda. Yo me sentí sola. Ya nadie pagaría mis fianzas para salir libre. No contaba con nadie más que con Woo-hyun. Pero, ¿Qué podía hacer mi amigo? Él era un delincuente como yo. Los delincuentes japoneses jamás les pagaban las fianzas a otros delincuentes. Así que lo único que pude hacer, fue abrazarme las rodillas y mantener la cara oculta bajo la capucha de mi suéter. Estaba hecha un asco, pero eso la verdad no me importaba.

Cara de culo visitó mi celda.

_ Debería encerrarte aquí de por vida, Terra.

_ Púdrete, anciano.

Él pateó las barras de hierro, cabreado. Yo lo ignoré y preferí mirar el suelo.

Toda mi vida había sido un puto asco. Sin padres, sin hogar. Yo solo era una telépata que le robaba a la gente para conseguir algo de estabilidad y así sobrevivir.

Mierda. Makoto es un hijo de puta. De seguro (T/N) se enojará conmigo. Eso fue lo que leí de la mente de aquel sujeto que estaba sentado en la otra celda. Lo vi ansioso, sucio y cansado.

Supuse que la tal (T/N) era su novia. Las novias siempre se enfadaban cuando los imbéciles de sus novios fallaban en algún plan de robarse unas cuantas botellas de cerveza, o se infiltraban en la casa de un amigo al que los padres activaban la puta alarma.