Cap 2

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En el reino de las estrellas, donde por alguna razón absolutamente todo lo que estaba en el era mucho más brillante que cualquier piedra preciosa, hasta un trozo de madera contenía un brillo tan especial que opacaria cualquier diamante de alguna otra nación.En el se encontraba el propio Rey de este USA estaba en su oficina contemplando todo lo que podia ver de su reino mediante una ventana que fácil era de 3 metros, sostenia una copa con simple agua, le daba vueltas mientras tenía una sonrisita en sus labios, le emocionaba la idea de al fin poder tener a México, cada posibilidad le encantaba, aunque algo no le convencía del todo, las miradas que el chico le había dado durante todo el camino, parecía odiarlo, solo dejo aquellos pensamientos de lado junto a un suave suspiro, para después volver a tener esa sonrisita en sus labios.

-Ahora eres mio-Fue un susurro para si mismo, en una vuelta que le dio a la copa esa agua se convirtió en vino-Solo mio Mexico.

~30 minutos después en el cuarto de México~

Este se encontraba de rodillas apoyándo sus brazos en su cama, con las palmas juntas y ojos cerrados, estaba terminando de orar, le rogaba a Dios que lo librará de las manos de aquel otro country, le rogaba con todo su ser y fe que lo hiciera, que lo sacara de ahí, si quería que lo matara con un rayo pero no quería estar ahí, mucho menos vivo.

Duro unos 5 minutos más hasta que termino de orar, se paro y acomodo aquella bata de sacerdote que se le había entregado, lo habían posicionando en el castillo de los amantes del emperador y aquella bata que le habían proporcionado no era nada parecida a lo que acostumbraba a usar.

-Estereotipos de los Santos-Dijo en un gruñido mientras acomodaba aquella bata.

Parecía que le habían medido el tiempo porque en ese mismo momento tocaron la puerta de aquella habitación.

-Disculpe la interrupción Santo Sacerdote mandado por nuestro Señor, el Rey ha dicho que esta noche habrá una cena donde usted será presentado como uno más de sus amantes y con esto tendrá que conocer a los demás.

Inmediatamente un escalofrío recorrió su espalda, estaba asustado pero aquel miedo cambio rápidamente a una ira, no contesto a aquel sirviente solo atinó a quedarse callado y después escuchar como aquel se retiraba.

Se tiro sobre aquella cama, hundió su cabeza en la almohada y procedió a gritar.

-Tu perra puta pendeja estúpida mierdera madreeeeee! Que te den pinche chamaco mocoso miado mimado!!!!

Seguidamente se separó de aquella almohada con un par de lágrimas en sus ojos.

-Perdoname Señor por ser tan grosero y un simple pecador.

Limpio aquellas lágrimas, se miro al espejo sonriendo.

-Soy bipolar o un gran actor como Teresa.

Busco en aquel armario gigantesco que bien podía contener suficiente ropa para cada día usar algo diferente durante unos 2 meses, no encontró nada que fuera su estilo solo batas blancas y lo más normal que encontró fue unos pantalones y una camisa blanca, se decidió por aquello.

No tardó mucho para que un sirviente llegará, este sería el encargado de que México siempre tuviera lo que necesitaba.

-Cómo te llamas pues? Si vas a estar conmigo casi 24/7 debería conocer tu nombre, no?

-Una disculpa, algunas veces a la gente le molesta que los sirvientes nos presentemos, me llamo Finlandia.

-Pura gente no muy inteligente se enoja por eso, bueno mi nombre es México, puedes decirme Mex o simplemente Estados Unidos Mexicanos-Al decir el último claramente sonrio, quien lo llamaría por su nombre completo pudiendo llamarlo por Mex?

Heads or tails?   (USAMEX) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora