three

280 33 9
                                    

Las clases continuaron, pero Atsushi tenía toda su atención en el libro que había pedido en la biblioteca. Akutagawa no le prestó mucha atención. De repente echaba unas miradas, pero prefería mirar a la ventana o hacer garabatos en su cuaderno.

En el penúltimo receso, no quiso ir a dormir, así que solo de quedó en el salón esperando que terminara, al igual que cierto albino que se quedó en su asiento comiendo una barrita de cereal.

Akutagawa no tenía nada más que hacer, entonces solo se quedó mirando al de ojos bicolores (de una manera bastante tétrica según Atsushi) mientras se comía su barrita de cereal, había algo que lo hacía ver... Tierno? No lo sabía, como sea, no le dió importancia y solo siguió mirando al contrario.

Estuvieron así durante 5 minutos hasta que Atshusi preguntó.

-quieres?-

-eh?-

-que si quieres, barrita de cereal- dijo el albino  mientras movía la barrita en su mano.

-ah? No, por qué preguntas?-

-bueno, llevas mirándome raro desde que terminó la clase, supuse que querías-

-ah? Em... No, solo me quedé... Pegado-

-oh... Bueno...-

Se hizo un silencio incómodo durante unos segundos y después el albino habló de nuevo.

-entonces no vas a querer?-

-eh? Estem, supongo?- Akutagawa estaba confundido, le había dicho que no le estaba pidiendo nada y aún así le daba, qué clase de persona era este chico?

Atsushi apenas escuchó la respuesta sonrió alegre y partió lo que quedaba de barrita a la mitad, se la entregó al azabache felizmente para luego seguir comiendo de su barrita.

El azabache nunca había visto a alguien tan alegre, quizás su papá, pero también tenía su carácter.

Siguieron en su silencio extrañamente cómodo para ambos, Akutagawa solo disfrutaba de la paz del ambiente y Atshusi de compartir su barrita con quién estaba en su lista de posibles amistades.

Al llegar al último receso, Akutagawa se iba a volver a quedar mientras que Atshusi quería ir al jardín a ver las flores, pero se detuvo al ver a un joven rubio acercase a dónde estaba.

-hola!- saludó el rubio con una gran sonrisa

-am... Hola?- respondió Nakajima con confusión

-tú eres el nuevo en la escuela no?-

-am... sí, llegué hace poco-

-pues es un gusto, soy Kenji Miyazawa- exclamó el rubio con gran entusiasmo

-Atshusi Nakajima...-

-ey, te venía a hablar porque ví que te la pasas en el jardín y además no hablas con mucha gente, así que quería saber si te quisieras unir al club de jardinería-

Atshusi se había sorprendido por la oferta, le parecía bastante bien, podía conocer más gente y compartir tiempo en el jardín también.

-sería un gusto Kenji-

-es un gusto tenerte como miembro, somos pocas personas-

-en serio? Cuántas?-

-pues ahora solo tú, yo, y una chica de primero, aunque es bastante callada, ¡ah! Y el profesor Odasaku, es nuestro supervisor y también cuida el jardín de vez en cuando-

Akutagawa conocía ese nombre, era un amigo muy íntimo de su padre, pero hace meses que no sabía nada de él, sabía que era profesor, pero no que trabajaba en su escuela, al parecer nunca pone la suficiente atención...
.
.
.
.
.
.
.
.
.
La tarde pasó, Akutagawa ya había llegado a su casa, estaba con su shorts deportivos y su polera una talla más grande que el ayudando a su padre con la cocina o de repente con cosas de trabajo, hablaban con normalidad hasta que Dazai entró por la puerta.

-bienvenido Osamu- Chuuya fue a recibir a su esposo ayudándole con las cosas que traía

-hola querido- Dazai saludó con una sonrisa floja a su esposo, parecía cansado igual que cada día. Avanzó a la cocina donde se encontró con Ryunosuke.

-bienvenido padre- Saludo Ryunosuke con medio pan con queso en la boca

-hola Ryunosuke, oye te tengo noticias, recuerdas al chico con el que hablaste en la junta del otro día?-

Y cómo olvidarlo...

-ah... sí? Por qué? Sucedió algo con él?-

-vendra con su padre a una cena formal la próxima semana, a Fukuzawa le interesó la conversación que tuvieron ustedes el otro día en la junta, quiere venir para hablar de futuros negocios y necesito que estés presente- Dazai solo dejó que su hijo se comiera su pan con queso y se fué a cambiar a la habitación que compartía con su esposo.

Bien, así que ahora tenía que ver la odiosa y en exceso dulce cara del albino en su casa, perfecto, solo se fue con su miseria y su pan con queso a encerrarse a su habitación, total ya había terminado de ayudar a su papá.
.
.
.
.
.
.
.
Ya era tarde, Akutagawa salió de su habitación a la cocina a prepararse un té, sus padres estaban abrazados en el sillón, Dazai estaba dormido y Chuuya leía recargado en su esposo.

-le va a doler la espalda si se quedan ahí por más tiempo- dijo Ryunosuke hablando de su padre sin mirarlos mientras empezaba a calentar el agua.

-mmm, tienes razón, y Ryunosuke, no tomes tanto té, te lo hemos dicho- Akutagawa ignoró olímpicamente a su padre,  cuando terminó de calentar el agua se hizo el té y prácticamente corrió a su habitación.

Chuuya negó con la cabeza para luego girar la cabeza y darle un tierno beso a su esposo para que se levantara.

-Osamu, despierta querido- el pelirrojo acarició la cara de su esposo mientras lo miraba con cariño, aunque ya han pasado años desde que se casaron, seguían amándose de igual forma o quizás más desde que se declararon su amor.

Dazai despertó bastante desconcertado y cansado, había tenido un día pesado y en medio de mimar a su esposo cayó rendido.

-qué hora es...?-

-la hora en la que nos vamos a la cama, ven- Chuuya se paró del sillón, extendiendo su mano para que su esposo la tomara y  lo guiará a su habitación, Dazai iba acomo un niño pequeño agarrado de la mano de su marido mientras se frotaba los ojos con sueño y una cara cansada.

-pero aún tengo cosas que hacer y revisar...- el castaño echó un bostezo largo.

-Osamu, no tienes energía para eso, ven a acostarte, descansa cariño- Dazai somnoliento solo pudo obedecer a la tierna (por ahora) voz de su esposo, se acostó y estiró los brazos al lado contrario de la cama, Chuuya lo entendió y se acostó junto al castaño, en seguida Dazai lo abrazó y lo atrajo más hacia el.

No había problema en que durmieran ahora, se lavaron los dientes y se pusieron pijamas después de un café.

Los dos se aferraban al otro y se relajaban en su abrazo, Chuuya estaba empezando a caer por el sueño pero antes escuchó un "te amo zanahoria" Chuuya sonrió y respondió con un "yo igual caballa" para luego caer los dos profundamente dormidos.

Fin

A

quí tiene un poco de soukoku por lo del cap de hoy

Lamento la demoraaa, pero últimamente tengo muchas tareas y exámenes, y no, mis exámenes ni van a durar 4 años como ciertas creadoras (lo que el corazón anhela, School Days whit idiots, un asunto de niñero, the last wish y Kitsune, esas historias me daban estabilidad emocional, vuelvan por favor 💔).

ghostyvampss xupalo

Eso es todo, no olviden apoyarme para que siga actualizando, cometen y no olviden votar.

Bai bai


Black Rose  / shinsoukokuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora