ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 𝙸

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Las calles de la ciudad de Lyon estaban heladas ya que aún había clima de otoño, aquel venteo fresco hacia que todas las personas caminaran con su vestimenta abrigada para disminuir un poco el frio.

Era tarde y Jungkook iría a una cena junto a unos viejos amigos y compañeros de trabajo que había conocido cuando hizo el curso de ingeniería ya que todos se dedicaban a aquello, el cielo empezaba a oscurecerse y el pelinegro metió sus manos en los bolsillos de su abrigo dándose prisa para ir hacia el lugar, aunque no tenía apuro alguno ya que no era tan tarde y talvez estarían ya tomando una bebida caliente y dialogando tranquilamente.

Después de unos minutos llego a aquella casa la cual era el típico modelo de las viviendas en Francia, cuando entro pudo sentir el cálido aire de aquel lugar haciéndolo sentir abrigado.

-Hasta que llegaste querido amigo - dijo el castaño que estaba sentado en aquel gran mueble junto a los demás, como lo había pensado el pelinegro estaban esperando por su llegada pues ya era costumbre que fuera el último en llegar -puedes dejar el abrigo junto a los demás y ven a disfrutar de un cálido vino junto a nosotros- jungkook sonrió al escuchar a su amigo Jin e hizo lo que dijo para después sentarse junto a ellos.

Kim Seokjin era uno de los que estaban presentes, para jungkook era un gran amigo y un buen instructor pues él le había ayudado mucho al principio cuando no entendía muy bien sobre la ingeniería.

Jin era el mayor de los que estaban en aquella sala con sus 30 años recién cumplidos. Muchas veces el castaño les dialogaba sus experiencias y como le toco perder a algunos amigos y compañeros en la guerra, personas que pudo haber conocido en poco tiempo, pero se volvieron valiosas y especiales para él.

Cuando tuvo sus 18 años decidió adentrarse al ejército a cumplir con el deber de cada joven del país defender a su nación, estuvo allí casi 5 años, eso fue lo que duro la última guerra donde hubieron bastantes muertos.

Cuando fueron reclutados, Muchos chicos pudieron salir de la guerra sin ningún problema, pero otros tuvieron la mala suerte de pasarla mal en medio de esta, algunos sufrían accidentes y quedaban marcados toda su vida, otros la perdían dejando a familias seguramente heridas por la pérdida de un ser querido, a Seokjin le gustaba mucho contar sus experiencias durante el tiempo que estuvo en aquel lugar y a jungkook le gustaba escuchar todas esas anécdotas que le hacía sentir varias emociones como alegría, miedo, tristeza y nostalgia.

A pesar de que el pelinegro nunca ha estado de acuerdo con que haya guerra en algunos países del mundo no podía evitar escuchar y admirar a su amigo por lo que tuvo que vivir en sus aun pocos años, la verdad es que Seokjin no tenía marca de haber vivido todas aquellas experiencias y haber sufrido aquel horror de estar en peligro o de ver a personas estarlo, seguía con su genuinidad, su alegría y carisma que demostraban juventud pura.

-deberíamos de jugar una partida de póker- comento el pelinegro que estaba también en aquella sala disfrutando de su pipa inhalando sin preocupación el humo para después soltarlo haciendo que se esparciera por el espacio de la habitación, aunque el humo poco a poco se iba desvaneciendo.

Este hombre era el querido min Yoongi, un chico dedicado a la relajación, además de la ingeniería claro, con sus 28 años era una persona sin preocupaciones y tranquilo siempre buscando nuevas ideas para hacer su vida más interesante.

Yoongi era de dinero ya que tenía varios bares en parís que le daban muchos ingresos, pero por entretenimiento (o por evitar molestias con su esposa) decidió tomar el curso de ingeniería, el chico vivía en Lyon ya que allí estaba su casa en donde vivía con su esposa que casi no era mencionada por Yoongi.

-te he dicho muchas veces Yoongi que no se puede fumar dentro de la casa- comento Jin reprendiendo al chico a su lado el cual bufo con fastidio ante la exigencia del mayor pero aun así le hizo caso y presiono la pipa de humo en la mesa que estaba en el centro de la espaciosa y acogedora sala.

-puedo probar? - pregunto el chico rubio mirando curioso aquella cajilla que estaba en el bolsillo de la camisa de Yoongi

-oh claro amiguito, aquí tienes- una sonrisa se plantó en el rostro del menor al ver como el pelinegro sacaba aquella caja extendiéndosela, pero luego esta fue arrebatada bruscamente por una tercera mano

-ni se te ocurra min! - reprendió nuevamente Jin mirando al pelinegro, el cual alzo sus hombros suspirado un poco mirando al chico con una frase mental como "ni modo" -y tú por qué quieres probar esto? - hablo nuevamente Jin, pero ahora mirando a su pequeño hermano que solo hacia cara de indignación al no poder probar algo nuevo.

Para terminar de conocer a los presentes en aquella cena, por ultimo estaba el joven Yeonjun con sus tan solo 17 años de edad, era el hermano menor de Seokjin, vivía junto a él en aquella casa. el rubio era un joven muy curioso y quería vivir miles de aventuras, soñaba con ir a la próxima guerra, así como su hermano mayor por eso había decidido salir de casa de sus padres en aquel pueblo apartado de Lyon.

lo había hecho para saber más de la gran ciudad, también de su hermano y poder ingresar al ejército, pero Jin no estaba de acuerdo ya que él sabia los peligros que había allí y no quería que le pasara algo malo a su hermano así que siempre se lo impedía pero aun con sus restricciones y prohibiciones Yeonjun seguía haciendo sus travesuras.

El pequeño decidió no responder ante la pregunta de su hermano y se levantó del sillón para luego dirigirse hacia la puerta, le dio una última mirada a su mayor y luego agarro su abrigo para después salir de la casa dejando a un consternado Jin -pero este niño me sacara canas! - se quejó ante el comportamiento de su hermano, ahora no sabía para donde se dirigía, aunque ya era costumbre de su parte estar fuera de casa.

-para que tener hijos si teniendo a tu hermano ya es suficiente- comento Yoongi en un tono divertido mientras tomaba otra copa de vino y le servía de igual forma a jungkook que observaba toda la situación en silencio, la verdad es que se estaba deleitando con el rico olor del vino y luego perdiéndose en el sabor de este.

A jungkook le gustaba admirar y disfrutar de la calidez del vino antes de beberlo, era una buena forma de relajarse, tomo de su copa para después mirar al castaño - talvez y el chico quiere conocer y probar nuevas cosas, sabes que todo ser humano alguna vez tiene necesidad de conocer todo aquello que nos causa curiosidad y miles de preguntas- comento en un tono suave ante sus amigos

-Eso es cierto, pero hay cosas que son peligrosas y no debería de querer conocerlas- dijo Jin mientras se recostaba en aquel mueble

Jungkook asintió entendiendo aquello, pero luego volvió a ver la botella pensando en las palabras correctas para el mayor -pero tu hermano ya tiene la edad necesaria para saber qué es lo verdaderamente bueno y malo, deberías demostrarle apoyo para que el sienta confianza contigo-

El silencio reino el espacio mientras las palabras del pelinegro quedaron rondando de alguna forma en la mente de Jin el cual bebió otro sorbo de la copa de vino.

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Gracias por leer, muah 💗

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𝕿𝖚 𝕽𝖊𝖙𝖗𝖆𝖙𝖔 - ᴋᴏᴏᴋᴠ/ᴠᴋᴏᴏᴋ ☕︎Where stories live. Discover now