Te están buscando

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-Le juro que ese desgraciado tiene a mi hijo!!!- Gritaba una mujer de cabellos negros al borde del llanto de manera histérica a un oficial, la cual estaba acompañada de dos chicos. -Señora, por favor eso es imposible, el chico viene de una de las mejores familias de este país, además es menor de edad, un menor no es capaz de hacer eso- Decía el oficial de una forma tranquila y restándole la importancia a lo que previamente la mujer le habia dicho, mientras que la mujer lo miraba de una forma asustada y preocupada, el oficial no le creía, ese chico tenia a su hijo, y si bien todo era culpa de ella y de su esposo, lo querían de regreso, trataron de ir a su escuela a la hora de la salida y entrada con tal de llevárselo de nuevo, pero, nunca lo encontraron, sus maestros dijeron que desde hace 3 meses su hijo estaba dado de baja por falta de asistencia, lo buscaron una y otra vez, la mujer sabia que era una mierda de madre, que nunca mereció a aquel hermoso niño de hijo pero quería arreglarlo ser por fin la madre que el chico merecía, pero...

Seguía teniendo hijo para este punto?...

Unas manos llenas de sangre, un cuchillo al lado y un chico tendido en el piso, llorando y gritando de agonía. -Cierra ya el puto hocico!!!- Grito el menor, el chico casi mata al mayor pero no podía importarle menos, realmente se estaba cansando del de ojos lilas, no era su culpa que el no aprendiera a la primera,

-Unas Horas Antes-

Se asomo fuera del cuarto, se las habia arreglado para salir de aquella habitación, subió las pequeñas escaleras de madera, las cuales rechinaban a cada paso que daba, el, el estaba herido, su brazo sangraba, y uno de sus ojos antes de un hermoso tono lila, ahora era de un pálido celeste, la sopa que antes habia quemado su cara, lo dejo ciego de un ojo, y sus piernas estaban completamente débiles igual sangraban por unos ligeros cortes que infringió Aquino en ellas y aquella puñalada que consiguió hace unos días, le dolía cada jodido paso que daba. -Mrd, du, duele muchísimo... Pero ya no falta mucho, para salir- Sollozaba mientras subía las escaleras ya estaba enfrente de la puerta, tomo la perilla y la giro, se asomo a las afueras de esa puerta, pero no vio nada ni escucho nada, el, el lo habia logrado, estaba fuera, comenzó a llorar, la esperanza habia vuelto a llegar a el, dio un paso esperanzador, ya no sentía el dolor, solo sentía la felicidad, quería correr a la salida, pero no podía, comenzó a dar pasos cada vez mas rápidos, pero tan solo a unos pasos de la puerta, su libertad habia sido cortada, un guardia lo atrapo y golpeo su cabeza, la misma escena se repitió, Duxo cayendo al piso inconsciente, solo que ahora por un golpe y no por ser electrocutado.

Cuando recupero el conocimiento estaba en el sótano, su cabeza le dolía mucho, con el único brazo bueno que le quedaba tocó su cabeza.

"..."

-Sa, sangré, esto, esto es sangré...-

El chico solo fue aventado dentro del sótano, ese golpe fuerte en la cabeza y la forma que lo aventaron hizo sangrar su cabeza, las puntas de su cabello antes de un bello morado oscuro ahora se estaban tornando color rojo.

-Carajo- Dijo entre lágrimas, la frustración ya era parte de el, no pudo escapar teniendo todo tan cerca, volteo a la puerta, lo volvería a intentar?

Si...

Duxo con todas sus fuerzas se levantó del frío suelo del sótano, se acercó a las escaleras y antes de volver a subir, sonó el seguro de un arma.

"..."

-Ni te servirá de nada volver a subir Rethey, sabes? Debería acabar contigo, pero no sé que me lo impide, no sé que veo en ti que me hace querer mantenerte con vida. Decía el de ojos miel mientras seguía apuntando con el arma. -Supongo que es por el echo de que te amo-

-Amarme!?- Dijo dejando de subir el herido chico. -Debes de estar jodiendo Diego!! Amarme?! Violarme, golpearme y casi asesinarme te parece amor?!- Grito arto el chico, por fin podría gritarle a la cara lo que sentía.



O eso pensó...



Un sonido de disparo termino con todo el ruido de la habitación hasta que un golpe en seco se escuchó...

De mi propiedad (Anti Duxino)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora