Momentos COD

Cena /John Soap MacTavish

Regresaste a casa después de lo que fue un día horrible, nada, absolutamente nada había salido bien. 

En tu trabajo habías tenido una simple discusión con un compañero de trabajo pero todo fue subiendo de nivel hasta el punto que tuvo que intervenir tu jefe, quien termino llamándote la atención por ello. Ni siquiera cuando intentaste concentrarte en tu trabajo para distraerte lo hiciste bien, todo tu reporte y graficas tenían errores, simples pero al final errores, lo que te hizo quedarte tiempo extra para terminarlo. Ni hablar de tomarte tiempo para tu comer, olvidaste sobre la mesa de la casa tu lonchera, por lo que mientras trabajas te conformaste con un paquete de galletas que compraste de una maquina. 

Para cuando saliste ya era de noche, fuiste directamente hacia tu vehículo pero al entrar e intentar arrancar, este no encendió. Lo intentaste un par de veces mas pero no dio resultado, seguía tan muerto como al principio. Suspiraste frustrada, tomando el volante con fuerza mientras dejabas caer tu frente contra el, accionando el claxon, cosa que molesto a los otros empleados que también habían tenido que salir tarde como tu. 

No te quedo mas opción que dejar tu coche en el estacionamiento del trabajo. 

Saliste de las instalaciones y comenzaste a caminar por la calle, tomarías un autobús, había una ruta que te dejaba cerca de una estación cerca de casa, desde la cual podrías ir caminando. También habías pensado en tomar un taxi, pero dado lo tarde que era desechaste la idea, podía ser peligroso para una mujer abordar uno, la delincuencia en tu ciudad era algo a tomar con seriedad.

Eras la única alma sentada en aquella parada de bus, lo que te daba una sensación de incomodidad, por lo que a manera de darte seguridad a ti misma, abrazaste tu bolso con fuerza, esperando que el siguiente autobús no tardara demasiado. 

La espera termino siendo solo de 20 minutos, los cuales te parecieron eternos en medio de la oscuridad de la noche en esa avenida oscura. Cuando subiste y tomaste tu lugar, notaste como apenas había otros tres pasajeros además de ti, te sentaste cerca de la salida y esperaste hasta llegar a tu destino. El recorrido tardo cerca de 40 minutos, sin duda en tu vehículo habrías llegado mucho mas rápido, pero a lo largo del camino esos tres pasajeros fueron deteniendo el autobús para descender en sus respectivas estaciones, así que tu fuiste la ultima en bajar.

Caminar hasta casa apenas tomaría otros 20 minutos aproximadamente, y es que ir en tacones solo te retrasaba, tus pies estaban cansados, tenias hambre, te dolía la cabeza, no tenias muchas fuerzas y ánimos, y seguías algo estresada. Solo querías llegar a casa, arrojar lejos tus tacones y dejarte caer en el sofá. 

Cuando llegaste a tu casa notaste algo que te preocupo, las luces estaban encendidas y tu recordabas perfectamente que las habías dejado apagadas. 

"Oh genial...lo que me faltaba, seguramente entraron a robar" 

Sacaste tu teléfono para poder marcar al 911 pero al ver la pantalla oscura te sorprendiste, presionaste su botón de encendido pero nunca encendió. Se había quedado sin batería. Volteaste a ver las casas de tus vecinos pero estos tenían sus luces completas apagadas, incluso algunos no tenían sus coches estacionados al exterior, clara señal que no estaban en casa. No tendrías mas opción que entrar por tu cuenta y revisar que había pasado. Rogabas porque no te volvieras una estadística y terminaras cara a cara con un asesino o un psicópata.

Con mucha precaución llegaste hasta tu puerta principal, introdujiste la llave y esta se abrió. Intentaste hacer el menos ruido posible, abriendo lentamente la puerta mientras entrabas de poco a poco. A primera vista todo parecía en orden, incluso a tu nariz llego un aroma delicioso de comida...¿Alguien estaba en la cocina?