UNNIE ¿AHORA SOY LINDA? | Daerin

Extra

Cuatro años después.

Dos mujeres estaban conversando en un pequeño pero cálido departamento. Una le estaba leyendo a la otra su nuevo libro con una historia profunda.

—Y ambas chicas, terminaron en una noche de velada, se entregaron mutuamente de cuerpo y alma. Y por fin, fueron felices para la eternidad.

—Eso fue... Bastante conmovedor.

—Le prometí que escribiría nuestro propio final feliz.

—Dani unnie ¿Todavía la extraña?

—La extraño y la seguiré extrañando.

—Debería comenzar a buscar alguien más, ya pasaron cuatro años desde el fallecimiento de Haerin.

—Lo sé —suelta un suspiro. —¿Irás a verla?

—Si lo haré ¿Quiere acompañarme? —Danielle solo asiente.

—Bien, vámonos.

—Primero quiero pasar por unos girasoles, eran los favoritos de ella.

—De acuerdo.

Sin más, ambas chicas caminan hacia afuera del departamento. Pasan a comprar los girasoles y toman su camino hacia la tumba de la pequeña Haerin.

Ambas chicas se posan enfrente de la tumba de la menor, la cual ya estaba un poquito sucia. Las mayores se miraron para después dejar los girasoles en el piso.

—¿Quiéres hablar con ella? —preguntó Hyein.

—Lo deseo mucho.

—Te daré un tiempo —posó su mano en el hombro de la mayor en son de apoyo. Después de esa acción, se retiró unos metros de la mayor.

Danielle suspiró pesadamente para después sonreír débilmente con sus ojos completamente rojos por las lágrimas sin derramar.

—Hola Rinnie... Hoy son cuatro años después de que te fuiste, linda. De verdad te extraño. Me faltaba mucho por conocerte y por amarte. Al dormir, sueño con escuchar tu risa nuevamente, sueño con volver a ver tus ojitos brillosos, con volver a tomar tu mano. Sueño con que estás a mi lado de nuevo y poder estar juntas al fin, darnos nuestro primer beso, y poder decirte lo hermosa que eres. Te prometí escribir nuestro final feliz, y lo hice. Ahora soy escritora, Rinnie, acabo de escribir un libro en donde tenemos nuestra propia historia, bonita, hice lo que me pediste. Por ahora es solamente ficticio, pero en otra vida será realidad. Te amo como no tienes idea, Kang Haerin. Ah, y te traje un girasol, es lindo al igual que tú, con un espléndido aroma exactamente al tuyo. En otra vida seré tuya...

Danielle sonrió con lágrimas escurriendo por sus blancas mejillas. Volteó en dirección a Hyein y le hizo una seña para que se acercara. La menor se agachó al igual que la mayor, sonriendo con resentimiento.

Ambas chicas comenzaron a hablar de sus últimos recuerdos con Haerin. Desearían por lo menos haber hecho feliz a la pequeña rubia en sus últimos días.

Y desde un lugar precioso sin sufrimiento, descansaba Kang Haerin.

Y como dijo Danielle...

En otra vida, se pertenecerán.

—Sí Haerin, ahora eres linda.

***

Holaaa ;)

Hay un final alternativo ¿Quieren que lo suba?