Capítulo 10

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El alfa mayor caminaba de un lado a otro sin cesar, mientras los menores solo lo observaban, expectantes al próximo sermón que parecía no llegar. La angustia reflejada en el rostro del castaño y sus constantes pasos a punto de hacer un surco en el piso, los hizo sentir mal.

– Nam hyung, por favor, diga algo. – Dijo el pelinegro.

– Podemos explicarlo.

– No me hace falta que me expliquen esta vaina. – Los miró con molestia.– No soy estúpido, sé como hicieron eso. – Señaló con su dedo hacia la marca de Sunoo. Dando unos pasos hacia ellos.

Jungwon de inmediato pasó su brazo por encima del pecho del pálido, cubriéndolo de Namjoon. No sabe de dónde salió ese instinto protector, pero tampoco iba a retractarse. No quería que se acerque.

– Ok, entiendo, quieren su espacio. – Se volteó pasando sus manos por sus cabellos en frustración.

No tenía a uno, sino a dos mocosos que acaban de enlazarse en su tienda y uno de ellos era un lobo libre.

La madre luna tenía que sacarlo de esta.

O tal vez no.

– Bien, es el momento de las preguntas, y quiero que me respondan con completa honestidad, ¿de acuerdo? – Volvió su vista hacia a ellos. Y ambos asintieron.

Se le arrugaba como un papel el corazón tener que reventar la burbuja alrededor de esos dos, pero tenía que hacerlo.

– ¿Esto fue planeado? – Ambos dijeron "no". – Entonces, fue un accidente.

El de cabellos cerezas bajo la cabeza, al sentir el peso de aquella palabra taladrar sus oídos.

Accidente.

Sunoo posó su mano en el hombro del menor.

– No fue un accidente, él solo—

– Hyung, no intente cubrirme. – Sus ojos se encontraron. – Sí, fue un accidente. – Miró al castaño – Yo le dejé el control a mí alfa, y lo marqué sin su consentimiento. Perdóname, Sunoo, esta no era la forma en que quería que empezaramos una relación más formal.

– Ya nos dimos cuenta. – Reprochó. – ¿Se estaban cortejando? – Los dos afirmaron. – ¿Quién acortejaba a quién?

– Él a mí – Dijo el pálido.– Quise cortejarlo también pero él no quiso. – Dirigió su mirada al otro.

Era claro que le diría que no. Apesar de ser un una alfa de mente abierta, el quería ser quien diera el cortejo a hyung, no Sunoo a él.

– Ya veo – Tomó entre sus dedos pulgar e índice su barbilla. – ¿Acortejaban a alguien más?

– No – Contesto Jungwon, quien volteó a ver a su, ahora, lobo libre. Esperando lo que ya sabía que iba a contestar.

Ya sabía que Sunoo era cortejado por otros, y de hecho eso se trababa el cortejo. Ver cuál de todos los pretendientes era el mejor, y él tenía la intención de ganárselo. Desafortunadamente o muy afortunadamente, depende de cómo lo veas, tal vez el privilegio de enlazarse le llegó por adelantado.

– Sunoo, ¿cortejabas a alguien más? – Repitió la pregunta, sabiendo la respuesta, pero insistiendo en que si iba a ayudarlos, Jungwon tenía que saberlo todo también.

El mencionado miró hacia arriba, evitando las miradas de los demás, con lágrimas acumuladose en sus lindos ojos de zorro.

– Yo... – Su voz un poco rasgada – Sí – Volteó su rostro lejos de su menor. – Sí, sí cortejaba a alguien más.

Nudo || SunwonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora