El asesino reencarnado es un genio de la espada pt 1°

Capitulo 11

[Fuerza, Agilidad, y Resistencia han aumentado en 2.]
— Hah… —
Raon jadeo.
“Eso es realmente verdad."
Sus músculos se contrajeron, comenzando por su antebrazo y luego bajando por todo el cuerpo. Cuando apretó su puño, pudo sentir que su poder de agarre se había vuelto un poco más fuerte que antes.
Golpe.
Su cuerpo era más ligero, como si se hubiera deshecho de un pequeño trozo de metal de su cuerpo, mientras intentaba saltar en el lugar.
“¿Así que el cuerpo en realidad cambia cuando las estadísticas incrementan, huh?"
[¿Pensaste que el sistema creado por la esencia del Rey era falsa?]
“Esto es una locura."
Raon estaba sin palabras. No tenía ningún sentido que sus habilidades físicas mejoraran como un premio por entrenar hasta superar sus límites. Estaba por decir que el sistema era demasiado poderoso, cuando un segundo mensaje apareció.
[Éxito en resistir la interrupción de ]
[Los puntos de habilidad han aumentado más.]
[Agilidad, Resistencia, y Energía han aumentado en 1.]
Había mensajes anunciando un aumento adicional en las habilidades por resistir la interrupción de Ira.
[¿Qué es eso?]
“…”
Los ojos de Raon brillaron mientras estaba en silencio, sintiendo la euforia recorrer su cuerpo.
[¿Qu-qué es esto? ¿Cómo puede darte estadísticas adicionales por resistir mi interferencia?]
“¿Tú tampoco lo sabías?"
[¡Por supuesto! ¡El sistema nunca me había sido robado antes, y la esencia del Rey nunca había fallado en tomar posesión del cuerpo de un humano!]
Ira se transformó en una llama azul y voló alrededor en frente de sus ojos. Parecía nervioso ya que actuaba como una abeja.
“Supongo que sí."
Cuando Raon asintió, el sonido de un golpe se pudo oír desde arriba de la plataforma.
— Buen trabajo a todos. —
Rimmer, quien pisoteó el suelo, estaba sonriendo mientras aplaudía con sus manos.
— Kuh… —
— Hmmm… —
— ¡Maldición! —
Ante su encantadora sonrisa, los ante su alegre sonrisa, los niños que se rindieron fruncieron el ceño y bajaron la cabeza.
— Suspiro… —
— A penas lo logré. —
— Pensé que moriría. —
Por el contrario, aquellos que lograron resistir hasta el final sonrieron de satisfacción, a pesar de sus cansadas expresiones.
— No se preocupen. No los eliminaré todavía. —
— ¿Eh? —
— ¿Disculpe? —
Los chicos abrieron sus ojos ante la voz alegre de Rimmer.
— Dije que serían puestos a prueba, pero no dije que tomaría esa decisión hoy. —
— Oh… —
— ¿Es… es verdad? —
— Si. Sin embargo, si siguen entrenando como hoy, entonces la mayoría de ustedes va a fallar. —
— ¿Cómo? —
— ¿Qu-qué quiere decir? —
Los chicos miraron a Rimmer con incredulidad. Ya que había más de cincuenta personas que lograron correr hasta el final. Les dificultaba creer que la mayoría de ellos fuera a fallar.
— Claramente mencioné que debían correr a toda velocidad, pero ustedes ahorraron su fuerza mientras corrían. Entre los ciento sesenta de ustedes, solo hubo una persona que corrió a toda velocidad todo el tiempo. —
Rimmer miró a Raon por un breve momento.
— Excepto por él, todos los demás preservaron su fuerza mientras corrían. Es patético que algunos de ustedes terminaron rindiéndose a pesar de eso. —
— Ugh… —
— Es-eso es… —
A medida que los chicos fueron expuestos, no pudieron ocultar su vergüenza y sus caras se volvieron rojas.
— Además, los astutos que usaron su aura para no quedarse atrás deberían reflexionar sobre sus acciones. —
— Hmmm. —
Mientras Rimmer terminaba sus oraciones, muchos aprendices, incluido Burren, se mordieron los labios.
— Bien, realmente no me importa nada de lo que hagan. Los únicos que van a tomar el examen son ustedes, no yo. —
Rimmer sonrió. Fue una misteriosa sonrisa que era seria y astuta al mismo tiempo.
— Su estatus será “Aprendiz Temporal” de ahora en adelante. Les sacaré el “temporal” si logran pasar el examen que tomará lugar en seis meses. —
— ¿Qu-qué es ese examen? —
El niño de ojos verdes quien quería darle a Raon una galleta antes levanto su mano con ojos borrosos.
— No sería divertido si te cuento sobre ello. No habrá un ranking, pero habrá un primer lugar, así que hagan lo mejor. —
— ¿Cuán duro debemos entrenar? —
— Voy a darles un simple pero franca pista. —
Crujiendo su cuello, miró hacia los niños. Los ojos de todos estaban brillando con expectativas.
— Por seis meses, completen todo el entrenamiento que les dé. Si solo siguen mis instrucciones, sin mezclar sus opiniones personales, entonces pasarán su examen de seguro. —
— ¡Oh! —
— ¿Es…es eso verdad? —
— ¿No suena demasiado sencillo? —
Las expresiones de los niños se iluminaron, como si estuvieran frente al sol, cuando escucharon que seguir las instrucciones sería suficiente.
— No miento, si siguen mis instrucciones, ustedes pasarán. Sin embargo… —
Las puntas de los labios de Rimmer se levantaron.
— Eso no será fácil. Yo solo voy a darle las instrucciones y dejar que entrenen cada que quieran. Si las siguen en la forma que lo hicieron hoy, entonces todos fallan sin lugar a dudas. —
— Hmmm… —
— No de ninguna manera. —
Las expresiones en los rostros de los niños entre doce y trece años estaban llenas de urgencia, ya que no podían regresar a casa sin ningún resultado.
Sin embargo, había algunos que estaban calmados, como si no estuvieran preocupados. Ellos eran Raon y Runaan.
Ellos no mostraron ninguna reacción, a pesar de escuchar lo que dijo Rimmer.
— Mierda. —
Por el contrario, Burren, quien había terminado primero, no lucía bien.
No había dicho ningún nombre, pero Rimmer lo reprendió y felicitó a Raon. A pesar de correr más rápido que cualquiera, se sintió como si hubiese perdido ante esa basura colateral.
“¡Qué insolencia!”
Burren siguió observando la espalda de Raon en vez de escuchar la explicación de Rimmer sobre el examen.
— Ustedes van a vivir en los dormitorios del quinto campo de entrenamiento desde ahora. Este tiene las mejores instalaciones y tratamientos, así que disfruten por seis meses. —
Rimmer señaló los dormitorios, que podían ser vistos atrás del campo de entrenamiento.
— Hmm… —
— ¿Ese es el dormitorio…? —
Las expresiones de los chicos no mejoraron, a pesar de escuchar que tenía las mejores instalaciones. Eso fue porque sabían que aquellos beneficios eran solo temporales.
— Ya que es el primer día, terminaré aquí. Pueden ir a descansar o seguir entrenando aquí lo que quieran. También hay un gimnasio interior en el lado izquierdo, así que siéntanse libres de usarlo. —
Rimmer bajó de la plataforma ya que terminó su discurso. Sin embargo, cuando estaba a mitad de las escaleras, giró su cabeza y sonrió.
— Oh, una cosa más. El estatus social no existe aquí. Ya seas un rey, un comandante, o un esclavo, son todos iguales. Asegúrense de llevarse bien con sus compañeros aprendices. —
Movió su mano, mostrando que realmente no tenía nada más para decir ahora, y dejó el campo de entrenamiento. La mitad de los instructores lo siguieron y se fueron, mientras que la otra mitad miró sobre los chicos con la espalda en la pared.
[Ese grosero, orejas puntiaguda….]
“¿Qué es lo que te desagrada tanto de él?”
Raon mostró su confusión mientras miraba por encima de Ira.
[No me gusta su cara. Se atreve a mirar por encima de la esencia del rey, pensando que tiene todo en su control. Diez mil años encarcelado en hielo no serían suficiente castigo para tal insolencia.]
“…”
Se explicó, pero Raon todavía no lo comprendía. Parecía que Ira era solo un psicópata.
“Será mejor que lo ignore."
Sacudiendo levemente su cabeza, relajó su cuerpo y mente cansados usando el “Anillo de Fuego."
“Debería chequear el gimnasio."
Ignorando los murmullos de Ira, Raon entró al gimnasio interior que Rimmer mencionó.
“Hmm…”
* * *
— Raon Zieghart. —
— ¿Solo cómo es que incluso corriste? —
Los colaterales y los niños de las familias vasallas no podían sacar sus ojos de la espalda de Raon mientras entraba al gimnasio interior.
Había una gran diferencia entre lo que vieron, y lo que habían escuchado de él antes.
Ellos todavía no podían creer que él logrará soportar más que ellos, a pesar de que ellos constantemente entrenaron su resistencia.
— Debe ser gracias al elixir. —
Krein Zieghart frunció el ceño. Él fue el colateral quien primero buscó pelea con Raon.
— ¿E-elixir? —
— Pero aquellos que viven en el edificio del anexo fueron abandonados por la línea directa. —
— Eso es correcto. Y él es el peor entre los colaterales. ¿Cómo podría haber obtenido un elixir? —
— Incluso si obtuvo un elixir, no debería haber sido uno bueno. —
— Escuche que el Santo andrajoso se lo dio y no la familia. —
Krein explicó la situación a los colaterales, quienes se preguntaban.
— ¡Ah! —
— ¡El Santo lo hizo! —
— Al final, el logró correr gracias al poder del elixir, y no por su cuenta. —
— ¡Y él es tan orgulloso! —
Escuchar que había recibido un elixir por el Santo andrajoso, los niños lucían disgustados.
— ¡Tsk! —
— ¡Qué chico afortunado! —
— Obtuvo un afortunado elixir a pesar de ser un mero colateral, realmente no hay nada agradable acerca de él. —
Krein sonrió, mientras los niños colaterales expresaban su resentimiento.
— Eso es porque lo estoy diciendo. —
— ¿Huh? —
— ¿No deberíamos enseñarle una pequeña lección? —
— Eso es verdad. Aparentemente, le contestó también a Lord Burren. —
— Adivino que nosotros necesitamos mostrarle que sucede. —
— Entonces cuando regrese al dormitorio hoy… —
— Deténganse. —
Cuando los colaterales estaban cerca de planear su asalto, una voz baja fue escuchada detrás de ellos.
— ¿L-Lord Burren? —
— Ustedes van a ensuciar el nombre Zieghart. —
Burren dio una fría mirada a los colaterales.
“Qué patéticos."
A él tampoco le agradaba Raon Zieghart, pero oprimirlo violentamente usando un grupo era vergonzoso.
No podía dejarles planear algo así a alguien que recibió el nombre de Zieghart.
— Él es un mero insecto que abandonará lo suficientemente pronto. Solo ignorenlo y concéntrense en su entrenamiento. —
Entrecerrando sus ojos ante su feo comportamiento, dejó el campo de entrenamiento.
— Ah, hmm… —
— Él… él dijo que nos detuviéramos. —
— Hmm. —
— ¿Eres realmente estúpido? —
Krein chasqueó su lengua, viendo al desanimado niño colateral.
— ¿Qué? —
— Lo que realmente está diciéndonos es que lo hagamos. —
— ¿Qué? —
— Estaba diciendo que no quiere que sus manos se ensucien, así que nosotros deberíamos proceder con esto. ¿Realmente no lo captan? —
— ¿Ah? —
— ¿Es…es eso así? —
— Por supuesto. Ya termine de prepararme. Si le damos a Raon una apropiada lección. Lord Burren también estará satisfecho. —
Los cuatro aprendices se juntaron en un círculo y comenzaron a planear como disciplinarían a Raon.
Y luego de eso…
Runaan Sullion, quien no había prestado atención a nadie, concentró su mirada sobre cierto lugar.
No fue a Burren quien terminó en primer lugar, o los niños colaterales de las familias vasallas, o Rimmer, quien fue llamado la Espada de Luz de Zieghart.
Raon Zieghart.
Su mirada estaba fija en la espalda de Raon, cuyo desempeño había sido menos que promedio durante la prueba. Y entonces, murmuró una palabra.
— Extraño. —
* * *
Rimmer dejó el campo de entrenamiento y escaló la Montaña de la Tumba del Norte, ubicada detrás del edificio principal. Al llegar a la roca con forma de tigre en la ladera de la montaña, levantó la cabeza.
— Hay un invitado en mi lugar de siesta. —
Cuando hablo hacia la roca, el hombre viejo de cabello rubio parado en la punta de esta inclinó su cabeza. Era Glenn Zieghart.
— ¿Cómo fue? —
— No hay punto en hacerme esa pregunta. —
Rimmer sonrió amargamente mientras apoyaba su espalda contra la roca.
— Como ya sabes, tengo un buen ojo para las personas. Y todavía… No pude ver a través de Raon. No pude analizar su condición en absoluto. —
— … —
— Estoy seguro que estaba completamente vacío. Estaba tan seco como un trapeador seco que había sido exprimido incontables veces. No entiendo en absoluto como pudo correr hasta el final. —
Curiosidad y asombro habitaban en los ojos sonrientes de Rimmer.
— Burren y Runaan tienen los mejores talentos, y los otros niños no son malos tampoco. Pueden ciertamente convertirse en los pilares que apoyaran a la familia en el futuro. Sin embargo… —
— Fuiste incapaz de juzgar a Raon. —
La mira de Glenn paso de Rimmer, hacía el quinto campo de entrenamiento.
— Estás en lo correcto. Sus talentos, potencial, futuro, y tendencias— ninguno de ellos podían ser vistos. Es la primera vez estando en una oscuridad como esta desde que te conocí, mi señor. —
Rimmer rió.
— Ha sido aburrido desde que mi centro de energía se desgarró, pero por una vez, esto parece divertido. —
— Tu trabajo no es para divertirse. Es convertir a los niños en guerreros apropiados del nombre de Zieghart. —
— Por supuesto. Se eso. ¿No soy el sujeto más leal de Zieghart? —
Rimmer asintió como un matón.
— Si no fueras un paciente y compañero de guerra, tu cabeza estaría volando ahora mismo. —
— ¡Wow, supongo que tener dañado mi centro de energía fue útil por una vez! —
— … —
Glenn miró hacia el centro de energía de Rimmer y alrededor de su corazón, luego giró su cabeza.
— Tú preguntaste por la posición de instructor principal, así que concéntrate en tu trabajo en vez de andar distraído. —
— Por puesto. Siento que uno de los aprendices de este año se convertirá en alguien digno de confiar mi futuro. —
Rimmer dirigió su mirada hacia el campo de entrenamiento, donde Glenn estaba mirando.
— ¿Te refieres a Burren o Runaan? —
— Es una posibilidad, pero podría ser uno de los niños recomendados, o un obstinado plebeyo, o un niño que ha sido abandonado por la familia. —
— Fue solo una coincidencia. Ese niño difícilmente puede convertirse en un guerrero. —
Glenn bajó la Montaña de la Tumba del Norte después de decir eso. Rimmer se quedó observando la espalda de su más estimado guerrero, y sonrió.
— Tú ya lo sabes no. —
* * *
Raon caminó afuera del gimnasio interior después de chequear los diferentes equipos.
“No está mal."
El equipo de entrenamiento fue el más nuevo y el mejor, justo como Rimmer había dicho. El campo de entrenamiento ciertamente parecía como si fuera a criar a los aprendices para ser los mejores si podían seguir las instrucciones.
Ya que había comenzado a entrenar en la tarde, el cielo estaba ya poniéndose oscuro. Salió del campo de entrenamiento, y estaba por dirigirse al dormitorio…
— Hey. —
Desde el callejón hacia el lado derecho, se podía escuchar una voz baja. Cuando giró la cabeza, los cuatro colaterales que buscaron pelea esa mañana lo miraban con expresiones intimidantes.
— Escuche que ingeriste un elixir antes de tu primer cumpleaños. —
— ¿Y así es como te volviste tan engreído? —
— Si yo consumiera un elixir como tú, podría haber sido mejor que tú. Ya estaría justo por detrás de Lord Burren. —
Los cuatro chicos parecían creer que estaban hablando con autoridad mientras se acercaban.
[¿Realmente estás siendo mirado hacia abajo por esos niños? Quiero acabar con mi vida ahora.]
“No te preocupes."
La llama en los ojos de Raon se encendió.
“Vas a ser capaz de ver lo que tanto querías esta vez."