7. Soleado

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Miércoles 6 de noviembre
6:19 AM.

Irina Richards 🌺

El sonido de la alarma me obligó a despertar.
Parpadeo varias veces adaptándome a la claridad de mi habitación. - las cortinas son de un color violeta casi transparente por lo que el sol matutino es el primero en visitarme.- Me incorporo en la cama estirándome un poco.

-¡Cariño!- llama mi padre en la puerta -¿Ya despertaste o debo utilizar la técnica del agua fría?

-¡Ya desperté papá descuida! - contesto adormilada.

- Está bien; arréglate y baja a desayunar.

-¡Okey pa! - le doy un último vistazo a la almohada, resignandome a cancelar mi cita con Morfeo. Ser la hija del jefe de policía, implica que sino te despierta la alarma, lo hará un vaso de agua helada.

Camino hasta el baño quitándome la pijama y soltandome el cabello. Abro la ducha metiendo los pies primero para acostumbrarme a la temperatura.

Me ducho rápido y seco mi cabello a la velocidad de la luz, aplico algo de loción de almendra en mi cuerpo y busco en el armario el oufit que utilizaré esta mañana.

El Sol está brillando por completo - algo no muy común en este pueblo - Así que rebusco tratando de encontrar un estilo que me permita disfrutar de la vitamina E.

Termino por escojer un conjunto de dos piezas que consiste en un top estampado que se ajusta justo en medio del busto, y una falda color verde esmeralda que llega por encima de los tobillos - algo osado ya que la falda tiene una abertura que desciende desde el muslo.

Recojo mi cabello en una coleta, aplico algo de maquillaje -nada extravagante ya que con el vestuario es más que suficiente- me coloco unas sandalias de tacon medio y bajo a desayunar.

¡Son las 6:40 Tiempo récord!

-¡Vaya! Que hermosa está mi princesa el día de hoy-exclama mi padre cuando entro al comedor- debería hacer sol más seguido, a veces te pareces a mi secretaria vistiéndote como anciana - bromea ocultando la risa detrás de la tostada que empezó a comer.

-¡Ja ja! Muy gracioso papá - trato de mantener la seriedad, pero en esta casa es imposible. - tu tampoco te ves mal.

Mi padre está por cumplir 46 años, pero aparenta unos veintitantos, bien podría pasar por mi hermano mayor o algún tío. Su manera de vestir evoluciona con la época, así que siempre está a la moda. Luce un pantalón de cuero y una camisa de vestir, azul cielo.

-¿Como amaneciste?, ¿Dormiste bien? -indaga mientras se sirve un poco de jugo de naranja.

- De maravilla, creo que puedo decir que dormí como un bebé, ¿Como estuvo tu guardia?

- Agotadora, pero me permitió volver temprano y hacer un rico desayuno - me muestra la mesa y hay de todo un poco, pan tostado, yogurt, hotcakes, miel, fruta y huevos revueltos.

-¡Que rico!- digo tomando un hotcakes.

-Buen provecho.

El desayuno transcurre entre charla y una que otra broma. Lavamos los platos y subo por mi mochila.

-¡Cielo apresúrate! - grita mi padre

-¡Ya voy! - empaco el protector solar y bajo rápidamente las escaleras, tomo una manzana de la cocina y salgo de la casa abordando el Audi rojo de mi padre; hoy es su día libre y se ofreció a llevarme al instituto.

Al llegar el baja del vehículo y me abre la puerta para que yo haga lo mismo, sintiendo la mirada de todos debido a mi acompañante. - si, lo sé, mi padre para el tráfico.- llama la atención de los hombres que se sienten intimidados ante el jefe de policía, y el de las mujeres que no dejan de babear por el.

El Jardín De RosasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora