El Jardín De Rosas

10. Rosas Negras

(PARTE 1)

❁𝔒𝔟𝔰𝔢𝔯𝔳𝔞𝔫𝔡𝔬 𝔲𝔫𝔞 𝔠𝔞𝔧𝔞 𝔡𝔢 𝔠𝔬𝔩𝔬𝔯 𝔪𝔲𝔤𝔯𝔦𝔢𝔫𝔱𝔬, 𝔪𝔢𝔫𝔱𝔦𝔯𝔞𝔰 𝔭𝔬𝔯 𝔣𝔲𝔢𝔯𝔞, 𝔪𝔢𝔫𝔱𝔦𝔯𝔞𝔰 𝔭𝔬𝔯 𝔡𝔢𝔫𝔱𝔯𝔬... ℭ𝔬𝔫 𝔠𝔞𝔡𝔞 𝔪𝔦𝔢𝔯𝔱𝔢 𝔳𝔦𝔡𝔞 𝔞𝔩𝔦𝔪𝔢𝔫𝔱𝔬, 𝔢𝔫 𝔲𝔫 𝔣𝔯𝔦𝔬 𝔧𝔲𝔢𝔤𝔬 𝔮𝔲𝔢 𝔱𝔢 𝔡𝔢𝔧𝔞𝔯𝔞́ 𝔰𝔦𝔫 𝔞𝔩𝔦𝔢𝔫𝔱𝔬❁

Sebastián Hamilton🥀

El cortejo fúnebre se adentra en el camposanto seguido por mi camioneta; la cuál lleva un inmenso ramo de rosas negras en la parte trasera.

Dayana permanece a mi lado ocupando el asiento del copiloto; con la mirada perdida en la ventana.

Ella no ha pronunciado palabra alguna desde que se confirmó la muerte de Troy... y a mí ni todo el café del mundo sería capaz de mantenerme despierto una hora más.

-Dad...- debo respirar profundo para dirigirme hacia ella.- Si no quieres bajar...

Ella suspira y acaricia mi mano.

Bajo del auto y abro la puerta del copiloto ofreciendole mi mano a Dayana para que se apoye.

Caminamos hasta el féretro y me trago mi desprecio alzando el ataúd sobre mis hombros junto con los "amigos" de Gasco.

Caminamos hasta la fosa y bajamos el cuerpo, entretanto algunos conocidos lanzan flores.

Me dirijo nuevamente junto a mi amiga quien llora desconsolada en brazos de Irina y logro tomarla antes de se que lanze al suelo.

- ¡Dayana ya basta!- demando por lo bajo; pero ella no para de llorar aferrada a mi camisa.

Espero con paciencia a que esto termine mientras logro persuadir a Dayana de que deje de llorar como una Magdalena.

Se sube en el asiento trasero de la camioneta y le ofresco un cooler con jugo de arándanos que toma de mala gana.

Estoy por abordar yo también pero...

-¡Bast! - exclama Irina acercándose con prisa.- se que esto no es fácil para nadie pero... -duda por un momento - ¿Como has estado?...

- Apunto de dormirme parado- confieso frotando mi cara- desde que se supo lo de Troy no he podido pegar un ojo, acompañando a Dana.

-Ella lo está pasando terriblemente mal.

-Ni que lo digas.- río desganado - y tu ¿Como estas?... Con lo de los últimos dos días no he tenido oportunidad de escribirte.

-No te preocupes, te entiendo perfectamente... yo estoy tan sorprendida como todos en Pryton. Como si lo de las desapariciones no era suficiente, ahora le sumamos un cadáver.

- Dímelo a mi...-suspiro- mí mejor amiga sin querer está sufriendo las consecuencias de todo esto.

-Es que yo aún no puedo ni creerlo; ¿cómo es que pasamos de ser un pueblo tranquilo a esto?

-No lo sé... Lo único que tengo claro es que ya no soporto toda esta mierda-Suelto con frustración- Estoy cansado, pero tampoco puedo dejar a Dana sola en esta situación.

-Puedo hacerte compañía, si gustas - sugiere - yo estoy al pendiente de Dayana y así tu descansas un poco.

- No quiero que te molestes, bonita - acaricio su mano- no es tu responsabilidad.

-Dayana también es mi amiga... lo menos que puedo hacer por ella en estos momentoses apoyarla.- Me regala una de esas reconfortantes sonrisas.

- Vaya que eres tan terca como hermosa - Me río.