Sweet like Cinnamons (Seho) [Terminada]

Capítulo 6

Oh Sehun nunca estuvó tan silencioso en toda su vida como aquel día. Primero su mejor amigo de toda la vida le golpeaba por ponerse demasiado cariñoso con su hermano aka su actual pareja. Para ser honestos, no sabía que Jongin tenía la mano tan pesada hasta que su ceja comenzó a sangrar. Gracias a Dios, Kyungsoo le detuvo a tiempo y no llegó a un Sehun en emergencias con una contusión cerebral. Y ahora recibía una de las noticias más importantes de su vida. Junmyeon, el hombre que amaba desde que usaba pañales, estaba embarazado.

Cargaba en su vientre un fruto de todo lo que sentían desde jóvenes.

Su corazón latió tan rápido hasta que, por instinto, colocó una mano en el vientre de Junmyeon y empezó a llorar. No fue su momento menos patético, lamentablemente. Era una posiblidad que nunca había valorado ni en lo más mínimo. Sin embargo, con Junmyeon todo se sentía correcto. Según los cálculos que había hecho su hyung fue en la despedida de soltero en medio de su borrachera que lo habían concebido. Una parte suya se sentía inmensamente feliz pues desde pequeño sus padres le habían inculcado que un hijo es el regalo más grande de sus padres. La otra estaba preocupada por hacerlo mal y decepcionar a Junmyeon. Sehun no era la persona más responsable ni el más capaz para criar a un niño pero, sabía que con la compañía de su persona especial daría lo mejor de si mismo en la crianza de su pequeño.

- ¿Estás feliz? - preguntó Junmyeon leugo de limpiarle las lágrimas como cuando eran más pequeños – Puedes ser completamente honesto conmigo.

- Hyung – Sehun tomó las manos de su hyung - ¿Tú estás feliz? Aún si yo estoy eufórico por tener este regalo y ser capaz de amarlo contigo si me dejas...

- Sehun... Yo estoy feliz. No voy a negar que estoy muy asustado por lo que pueda pasar a futuro o si seré capaz de hacerlo bien.

- Criaste a Jongdae y a Jongin, asumiste el papel de padre cuando Seonho tuvo que viajar por tres meses y Boa necesitaba ayuda. Creo que mejor que tú para ser padre no hay nadie en este mundo hyung.

Junmyeon saltó a sus brazos y le abrazó tan fuerte que casi le cortó la respiración. Le gustaba verle feliz mas que escucharle cantar en la ducha en la mañana. Se quedaron en esa misma posición hasta que notó que se quedaría dormido.

- Hyung, ¿Me puedes prestar tu cama y tu cuerpo como almohada hoy? - preguntó seriamente a lo que Myeon asintió – Olvidé que Jongin tiene la mano pesada.

- Kim Jongin me escuchará mañana.

Subieron las escaleras del pequeño piso de Myeon y luego de dejarle un pijama, el mayor bajó a hacerle un pequeño té relajante para que durmiera sin tanto dolor. La habitación de Junmyeon era exactamente como su dueño: pequeño pero acogedor. Las sábanas de algodón olían a una extraña mezcla entre sándalo y lavanda; su mesita de noche albergaba una lámpara pequeña y el humidificador para la habitación. El AC colocado al mínimo y la baja iluminación construían un ambiente adecuado para descansar diariamente. Sehun consideraba lo justo según el nivel de estrés de la empresa de su hyung, y para lo poco que había visto, el pobre no estaba calvo de milagro.

Mientras su hyung estuvo en la cocina, aprovechó de usar su baño y lavarse los dientes. Observó en el espejo todo el trabajo que la noona de maquillaje debía hacer por las heridas y suspiró golpeando a su lengua imprudente por no saberse callar. Jongin y él nunca habían discutido hasta ese día y, si Sehun pudiera regresar el día a justo ese momento, no se arrepentiría de gritarle a su mejor amigo y dejarle más que claro que aquel hyung que siempre los cuidaba era el amor de su vida. Salió a tiempo y tomó la taza de té junto a Junmyeon sentándose a su lado como cuando eran más jóvenes.

- Envié un mensaje a mi familia – Sehun miró a su hyung asintiendo – Programé una reunión para el fin de semana.

- ¿A qué hora?