Sweet like Cinnamons (Seho) [Terminada]

Capítulo 11

Jongin sentía que tenía que tragarse todas sus palabras hirientes y su orgullo. Junmyeon estaba radiante y se le veía tan feliz y tan sonriente como nunca le había visto antes. Su embarazo estaba bastante avanzado ya y aún así, Sehun estaba detrás suyo o vigilandolo todo el tiempo. No dejaba que hiciera nada de pie o que se preocupara en vano por cosas sin sentido. Ambos le habían ignorado épicamente al verle. Ni siquiera le dedicaron una mirada de odio o una sonrisa cortés. Hacían como que no existía y eso, bueno era consciente que se lo merecía.

Kyungsoo le codeó para que al menos se acercara a saludar al resto de la familia. Su esposo le echó una bronca gigante al enterarse de su reacción ante la noticia tan especial que su cuñado le había contado. Junmyeon era feliz con Sehun y él tenía que aceptarlo. Dió un recorrido por la propiedad y reconoció con pesar que más que una casa banal, se había vuelto un hogar familiar.

- Jongin, ven a ver – llamó Kyungsoo y corrió hacia el patio - ¿No es una cosa preciosa?

Era un oso teddy con un lazo verde en el cuello. Una cosita tan adorable para sus futuros sobrinos y se sentía mal por no haber traído un regalo para los futuros bebés.

- Es hermoso – pronunció ganando la atención de todos – Seguramente el bebé disfrutará de él.

- Son bebés, Jongin – aclaró Junmyeon arqueando la ceja – Tendremos gemelos.

Jongin boqueó como pez por la sorpresa mirando a ambos padres. Junmyeon siempre quiso gemelos, si mal no recuerda, y saber que su sueño se estaba cumpliendo de varias maneras le apretujó el corazón. Cometió un error muy grave y sabía que eventualmente tendría que disculparse mas no pensaba que de hecho, su hyung tendría razón. Sehun lo quería como un rey y se aseguraba de que sus necesidades estuviesen cubiertas. Le hacía reír y le estaba ofreciendo la compañía y una familia que lo cuidara.

- Cariño – llamó Kyungsoo mientras daban un pequeño paseo por los alrededores - ¿Qué pasa?

- Estaba equivocado – reconoció ante la mirada preocupada de su esposo – Junmyeon tenía toda la razón para odiarme.

- Él siempre ha estado ahí para tí y solo quería lo mismo de tí, mi vida – Kyungsoo acomodó su cabello y le sonrió – Es el momento de que hablen y vuelvan a ser los hermanos de siempre. Tendrás tres sobrinos y si quieres estar en la vida de dos de ellos, tienes que reconocer tus errores.

Asintió y continuaron su paseo admirando la isla. Minseok y Jongdae tenían razón en querer mudarse allí y reconocía que era un lugar perfecto para todo. Pasearon un poco más y, para cuando regresaron, Sehun y Jongdae ponían la mesa en el patio. Kyungsoo le codeó y con un suspiro entró a la casa buscando a su hyung. Subió los escalones que conducían al segundo piso y, Minseok le señaló la entrada al cuarto de los gemelos. Junmyeon no perdía la costumbre de esconderse en una habitación que le causara paz y, esta no era una excepción. Estaba sentado en una de las mecedoras leyendo un libro con los pies en alto. Se veía radiante, descansado y con aura de felicidad genuina que casi no deseaba molestarle.

- ¿Vas a quedarte ahí parado toda la tarde.. - preguntó sobresaltandolo sin despegar la mirada de su libro – o entrarás y me dirás que quieres?

- ¿Podemos hablar? - preguntó Jongin con un suspiro – Si no quieres está bien.

Junmyeon arqueó la ceja sin inmutarse a mirarle pero movió la cabeza invitándole a entrar. Caminó hacia la pared frente a él y tomó asiento en el suelo frente a su hyung. La habitación de los gemelos olía tan divino que se regodeó en él mientras las dos palabras más importantes salieron como si las estuviera reprimiendo por demasiado tiempo.

- Lo siento – se disculpó y Junmyeon bajó el libro en confusión – Siento no haberte apoyado, no haber escuchado y haber querido opinar en una relación que solo te concierne a tí.

- ¿Lo dices en serio?

- Hyung, nunca dudes que mi deseo siempre ha sido verte feliz. Pero, que fuera precisamente mi mejor amigo quien te la diera y además saber que no es la primera vez que estaban junstos no fue nada agradable para mí – explicó con pesar admitiendo sus sentimietos – Siempre fue un don juan delante de mí pero la realidad fue diferente y eso dolió hyung. Me mintieron por años y el día mas importante de mi vida veo como te abraza y te toma de la mano como si estuviera acostumbrado a hacerlo. Perdón por no entender.

- Jongin...

- Y veo que te hace feliz y te trata como te mereces pero, ¿te has puesto a pensar que me heriste a mí también? Te lo he contado todo de mi vida pero mantuviste la tuya oculta. Me hubiera herido saber la verdad pero no hubiera vivido engañado por ustedes tanto tiempo.

Era la realidad. Ambos tenían la culpa, de hecho los tres habían dañado esa relación desde el principio.

- Quiero que me perdones y que seas feliz el resto de tu vida con el hombre que amas. Seguiremos siendo hermanos por el resto de la vida y estaré encantado de estar presente en la vida de tus hijos como lo estarás tú en la vida de los míos, hyung – terminó su discurso y caminando hacia él besó su cabello – Te quiero.

- Nini... - Junmyeon abrazó el cuello de su hermano en respuesta – Estoy tan contento de que estés aquí.

- Yo también hyung, yo también.

Son las conversaciones las que nutren al ser humano y las que permiten que cada persona reconozca su propio error. Jongin abrazó a su hyung por el costado debido a su avanzado embarazo y sintió como cada una de las piezas de su corazón empezaba a reunirse otra vez. Era solo el primer avance en una reconciliación que ambos anhelaban.

La noche cayó en la residencia mientras compartían una agradable cena familiar. Minseok se encargó de cocinar su plato estrella y con ayuda de su esposo organizó una comida espectacular. La mesa llena de alegría y paz genuina hacían del momento más especial. En un momento calculado, Sehun entró a la casa con un nerviosismo misterioso dejando a los presentes y a su pareja un poco confundidos. Al salir e incorporarse a la mesa, tomó una respiración profunda con todos los ojos puestos en él.

- Llevo un tiempo queriendo reunir a mis dos familias en el mismo lugar por motivos alegres. Mis padres no fueron los más presentes pero me regalaron la posibilidad de ser amado y querido por mi hermano y su esposa. Boa me hizo de los suyos y permitió que supiera que una familia es algo más que tres personas sino los sentimientos que los unen de amor y apoyo. Encontré un amigo leal, y tres hermanos más a los que no les importaba mi rostro sino mi personalidad real – pronunció Sehun – Gracias ustedes conocí el amor y encontré al amor de mi vida.

Junmyeon parpadeó con las orejas rojas al sentir todas las miradas sobre él.

- Cotton – le llamó Sehun por aquel ridículo apodo – Gracias. Por darme la oportunidad de confesarme hace años, por estar a mi lado secando mis lágrimas cuando me sentía triste y por ponerme una curita en el corazón. Hay tantas razones por las que estar agradecido pero, darme la oportunidad de estar a tu lado y ser el padre de nuestros dos conejitos. Kim Junmyeon, ¿me harías el honor de pasar el resto de tu vida conmigo?

Era una pieza de joyería tan hermosa que deslumbraba. El zafiro brillante en el medio de la banda plateada le hizo recordar el primer regalo que el menor le hizo cuando eran más jóvenes. Asintió estirando la mano y la banda se deslizó al lugar de su dueño. Junmyeon se puso de puntillas y besó a su ahora prometido suavemente. Eran tantos años de amarse a escondidas que todavía le era un poco raro besarle delante de todos pero, se sentía el hombre más feliz del mundo. Juntaron sus frentes tan sonrientes y llenos de felicidad siendo rodeados por los aplausos de su familia.

- Contigo siempre, tesoro – habló Junmyeon – Siempre.

- Te amo Cotton, te amo un montón.

- Desde ya digo que voy a ser el padrino – bromeó Jongin desde su asiento con una sonrisa mirandole – Lo fueron en la mía, lo seré en la suya.

Junmyeon sonrió aun mas grande y asintió. Tenía a sus dos personas favoritas en la misma mesa, acababa de comprometerse con el hombre que amaba y sería padre de dos hermosas criaturas. La vida no podia ser más dulce en ese momento.

❤️🌻