Malek se encontraba en la encrucijada de, sí dejar volver a Freya a casa de su hermano, o hacer lo que sea por sacarla de ese lugar.
Sus instintos protectores eran los que prevalecian en ese momento, pero también sus instintos asesinos, querían acabarla lentamente.
-Me iré - dijo Freya de pronto, sacándolo de sus pensamientos-hoy mismo le diré a tu hermano que renuncio.
-¿Qué?
-Desapareceré para siempre de tu vida Malek, me has demostrado que no crees en mí... Aún cuando en el fondo sabes, que yo nunca te hubiera traicionado. Tu padre, ni siquiera tiene idea de que existo, ni de quien soy, sé que sabes que puedo convertirme en quien sea, pero no lo he hecho, nunca lo haría menos para traicionarte...
-Mientes.
-Piensa lo que quieras.
Ella abrió un portal y sin darle tiempo a Malek de hablar, desapareció, dejando sólo un humo negro como rastro.
El intentó seguirla, pero al intentarlo supo que ella bloqueó el portal para evitar ser perseguida por él, había aprendido a evitarlo. El necesitaba aprender eso, joder, habían muchas cosas que el aún no sabía de la magia ancestral de Freya y los suyos.
Maldiciendo supo que no tenía más opción que volver a la casa de su hermano para poder hablar con ella de nuevo.
Cuando se apareció encontró a todos sus hermanos rodeando a una hermosa rubia sonrojada qué se aferraba a Caelen. Sonrió, por primera vez su rostro mostró una genuina sonrisa. Ver a su hermano tan protector le hizo mucha gracias. Ella parecía un gatito asustado frente a un montón de lobos.
Decidió acercarse, todos lo quedaron mirando, el pudo ver una sonrisa de felicidad en cada uno de ellos.
-Y este es nuestro querido Malek, el menor de nosotros, y el más valiente, pero debes tener cuidado, su temperamento es terrible. Acabaría contigo en menos de un segundo-mencionó Blacker, uno de sus hermanos más bromista.
-Si, muy gracioso- Malek lo miró fijamente con una mirada intimidatoria- me presento, soy Malek - dijo y extendió la mano a la rubia, quien tímida se escondió detrás de Caelen- No soy tan terrible como me pintan mis hermanos, tu me agradas.
-¿En serio?
-Si, ¿Eres Blaire no?
-Si.
-Blaire, en mi tienes un aliado. Puedes contar con mi protección, siempre que lo requieras, claro, si así lo permite mi celoso hermano.
Todos rieron al ver a Caelen tensar la mandíbula, por la impertinencia de su pequeño hermano. El por supuesto no estaba celoso. Sólo protegía a Blaire, porque podía sentir su miedo, podía notar el fuerte palpitar de su corazón.
Luego de un choque de miradas entre ambos hermanos todos se largaron a reír de pronto, Blaire supo que eran raros todos pero muy unidos, eso le agradó.
-Caelen, necesito ver a Freya- mencionó de pronto Malek, su hermano lo miró interrogante, no entendió el hecho de que quisiera ver a su sirvienta, pero asintió, dejó a Blaire con sus demás hermanos, ya que ya había tomado más confianza con ellos y acompañó a Malek a la cocina donde supuestamente encontrarían a Freya, pero una de las sirvientas que se encontraba les respondió lo que Malek ya suponía.
-La señorita Freya y su madre adoptiva se han ido de la mansión señor. Han tenido problemas con un familiar, por lo que han tenido que salir urgentemente, no han querido molestarlo, por eso ha sido su partida silenciosa, me pidieron que le dijera esto, para que usted no pensara qué son unas malagradecidas con usted.
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INTENCIONES OCULTAS
AcakBlaire Thomson es una chica rubia. Una chica rubia que cumple el estereotipo de rubia tonta o al menos eso le decían sus compañeros de curso desde que era pequeña. Su belleza es inigualable pero su inteligencia es muy reducida y su voz un tanto chil...